Capitulo 7

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De regreso a mi consultorio solicito a la enfermera que me mande los resultados de los estudios de mi pequeña Angely y así poder corroborar la gravedad o la magnitud de su estado. Aunque no dejo de pensar en que estará haciendo mi Angely con ese tal Ernesto, sera que pudieron tal vez entablar alguna relación en el tiempo que la conoció o mejor dicho en el tiempo que esta aun con ella.
Mis pensamientos trato de difundirlos y reconozco que pensando cosas negativas soy un ganador, pero lo cambie todo por ella, solo ella es la razón de todo esto y aquello por lo cual sigo existiendo en este mundo.

- Doctor, aquí están las placas y los nuevos estudios de la paciente del segundo piso y un café para que logre sobrevivir la mañana.

-Gracias emm...

-Claudia, doctor. -menciona con una pequeña sonrisa como si intentara decirme algo. Al fin en cuenta no reacciono de ese modo.

- Gracias Claudia. Cierra cuando salgas y gracias por el café.

Tomo los estudios colocados en mi escritorio mientras abro el cajón en busca de mi abre cartas que me regalo mi mejor amigo en México el día de mi graduación junto con una dedicatoria.


"Ahora no solo seras responsable de abrir los recibos de impuestos que llegaran a tu casa hermano, sino también de estudios de algún  paciente que dependerá de ti y un buen tratamiento. -Cuídate, nos veremos cuando regreses- "


Coloco el abrecartas en el sobre formando un corte perfecto, recto y delicado para no dañar el contenido. No se porque pero me siento extraño en momentos como este, donde me pregunto si mi paciente estará bien o tendrá alguna secuela que pueda afectar su físico.

Después de minutos de revisión y corroborando los estudios de mi Angely, determino que todo se encuentra en orden y en poco tiempo ella podrá salir de aquí, determinadamente me recuerdo que necesito regresar a acomodarle una habitación en mi departamento a Angely para que pueda sentirse cómoda y adicionarle algo de ropa. Ahora que lo pienso, debería ir a su departamento por varias de sus cosas ahora que estará conmigo.

Antes de cruzar la puerta de mi consultorio freno mis ideas donde analizo que seria mal educado entrar a su departamento sin consideración suya como si fuese un vil ratero. 
Solo espero que ya no este ese tal Ernesto para irrumpir sus ideas. Se que sueno egoísta pero, necesito hablar bien con ella y ademas poder cuidarla.

Pasa el tiempo, aproximadamente unas 2 horas. Ya he revisado los otros expedientes de mis demás pacientes, y les realice un chequeo a cada uno de acuerdo a sus condiciones y la gravedad de su accidente. Desafortunadamente ellos llegaron con mi Angely, ellos chocaron durante la carrera donde se enfrentaron Ángel y el jefe. Pero se me ocurrió pedir información sobre ese tal jefe; así que decidí preguntarle a uno de los que estaban internados para recabar algo de información.

Me dirijo a la habitación de uno de los accidentados que están en un mayor proceso de recuperación para no forzar a nadie y poner en riesgo su salud. 

Al entrar, una de las enfermeras esta colocando un nuevo suero; ya que este no le apetece comer aun, ¿que tienen los pilotos clandestinos con la comida? 

-¿Cómo se encuentra el paciente enfermera?- menciono mientras extiende su mano para mostrarme el expediente -Su presión es estable, sus lesiones dejaron de presentar pocas molestias,  pero aun no a probado ningún bocado ya que el menciona tener algo llamado flagofobia. Me dio el numero del psicólogo que lo esta atendiendo y me hace mención de que el se alimenta de sueros, papillas, gelatina y agua; también me comento que ya estaba evolucionando en su tratamiento pero volvió a recaer en un accidente anterior, hace dos semanas. Y ahora con este nuevo accidente cuestiona que lo puede afectar aun mas. Y eso fue todo lo que el psicólogo me comento; a y que vendrá al hospital para tratarlo.

demasiada información de un paciente amante de las carreras.

-Muy bien, avíseme en cuanto llegue su psicólogo para comentarle su situación medica.
-Esta bien doctor. 

Cojo un banquito para poder estar un poco  más cerca de el y poder escucharlo, es la primera vez que interactuó de esta manera con un paciente "después de mi Angely claro", normalmente solo reviso su expedientes y menciono palabras alentadoras como "esta evolucionando muy bien, siga así, saldrá muy pronto de aquí" entre otras mas palabras.

Observo que esta abriendo sus ojos y voltea a verme con una mirada tranquila, torpemente intenta girar su cuello pero esto es impedido por el collarín, intenta sentarse pero muestra un poco de molestia ya que también se fracturo tres costillas.

- Evite moverse mucho, esta evolucionando muy bien para que se siga lastimando.
- Disculpe pero ¿quien es usted? 
- A lo lamento, Doctor  Charlee Dargan para servirle, estoy llevando el control de su evolución

Levemente se azota en la camilla un poco aliviado aunque no lo entiendo. 

- Doctor, ¿De casualidad sabe si junto a mis amigos trajeron a una joven de 24 años llamada Ángel Hernández?- por un momento me centro en mis sospechas que en verdad fueron reales.    -Si, llego junto con ustedes después del la carambola que armaron, salieron seis lesionados contándolos a ustedes dos; tres están en otro hospital, tu y ella están en el mismo hospital junto a otro de tus compañeros de cabello rubio que tiene tatuado las alas de un ángel; pero evolucionan bien. 

Totalmente el la conoce.

-¿Que relación tienes con ella? -le pregunto de forma directa, ya que no aguanto mas mi curiosidad.
- Ella es mi amiga, yo le ayude junto con mi amigo Ernesto a que ella se estableciera aquí en Canadá, desde que llego aquí, la hemos estado apoyando en todo; incluso en su increíble pero loca idea de desafiar al jefe. Donde creímos que seria una buena idea ser jefes del clan pero pocos desafían al jefe. Y bueno a todo esto, ¿de donde la conoces? aparte de ser ella una simple paciente para ustedes los doctores.

De alguna manera esa parte me ofendió.

- Ella no es una simple paciente para mi. Ella es el amor de mi vida, yo primero me aparte de ella por mi carrera, quería tener un futuro prometedor junto a ella; hacia meses que no salíamos  por las practicas, la invite a salir y ella acepto. Le dije que pasaría por ella en una hora en su casa, cuando llegue la encontré con un desconocido sentado en la sala de su casa, eso hizo que me hirviera la sangre creyendo que ella me había estado engañando mientras yo realizaba mis practicas. Se hinco pidiéndome que no me fuera, que el es solo un amigo y que entre ellos no paso nada, me dolió imaginar que ella la mujer que siempre me estuvo apoyando me haya traicionado; la deje en el suelo llorando y desde ese día me centre mas en mi carrera, dejando de llamarla durante unos meses. Un día, después aquel chavo con el que la encontré fue a buscarme al hospital en el que estaba haciendo mi servicio, fácilmente logre identificar el rostro de la traición; me sujeto del hombro y me sentó en una banca y me conto el porque el estuvo ese día, la verdadera razón fue porque ella estaba buscando un auto para poder regalarme. Ya que ella observaba que yo gastaba mucho en mis traslados.
Al terminar de decirme esto, ese chico me comento de que en ese momento ella estaba de camino al aeropuerto para tomar un avión con dirección a Canadá. Sali corriendo del hospital para tomar un taxi lo mas rápido posible para tratar de alcanzarla, al llegar al aeropuerto me informaron de que aquel avión en el que ella estaba ya había despegado hace cinco minutos. Desde ese día, no deje de buscar opciones que me pudieran llevar directamente a Canadá. Estuve trabajando como loco durante dos años, para juntar el dinero necesario e incluso llegue aquí por un intercambio de hospitales entre México y Canadá. Y todo lo que llegue a saber de ella es que había escribido un libro llamado "La Hera De La Agonía" y que no ofrecía entrevistas.

- Entonces tu eres aquel puto que le rompió el corazón, mucho gusto, Me llamo Alex. Amigo y casi hermano de Angely. 

Este hombre sabe su verdadero nombre.

Muy interesante, e inquietante, ya que me llamo puto. 





La Era De La AgoníaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora