Epílogo.

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Jimin y Jungkook se encontraban abrazados llorando sin importar que tan fuerte lo hacían. Jimin dejaba varios besitos en el rostro de Jungkook, sabía que esa sería su despedida así que aprovecharía los minutos que les quedaban juntos.

La habitación pareció iluminarse por una luz blanca cegadora. Cuando ambos lograron mirar al frente se encontraron con cuatro chicos. Estos tenían unas enormes alas preciosas con vestimentas blancas y doradas, resaltando sus ojos de un azul nunca antes conocido. Uno de ellos estaba vestido completamente de negro, incluso sus alas lo eran, pero no transmitía alguna vibra negativa o aterradora. Sus cabellos rubios brillaban al igual que el de el único pelinegro, y pesar de saber la situación lograban llevar calma a ambos amantes que seguían llorando abrazados.

 —Jimin, es momento el mayor de los cuatro habló, avanzando unos cuantos pasos.

Jungkook se aferró a su pecho llorando desconsoladamente. Jimin pareció entrar en un estado de tranquilidad, las lágrimas seguían corriendo por sus mejillas, pero parecía estar decidido a regresar al reino de cielo.

 —Me voy ahora, Koo susurró—. Prométeme que no retrocederás, desde ahora seguirás igual de feliz, nunca renuncies a la felicidad por mí... Si en el futuro conoces a alguien más, se feliz, recuerda que siempre te amaré y te cuidare desde arriba... Además, en cuanto esté allí arriba iré a buscar a la abuela Gi y a tus padres, les contaré que eres feliz y que lograste salir de la oscuridad que te atormentaba para todos los días despertar con una preciosa sonrisa en tus labios sonrió, una lágrima bajo de su ojo derecho perdiéndose en su mentón.

Jungkook lo miraba con ojos rojos y tristes, pero grabándose todas las palabras de Jimin. Tenía que seguir adelante, por él, por todos. Sonrió triste, acercándose para besar sus labios por un largo rato.

Namjoon movía sus manos creando una esfera de luz dorada con pequeñas imágenes que se reproducían en ella. Yoongi había caminado a Jimin para tomar su brazo justo donde la marca de nacimiento de este se mantenía brillosa y transparente. Hoseok consolaba a Jungkook en cuanto este y Jimin terminaron el beso de despedida.

Así fue como el sueño de Jimin apareció. La habitación estaba rodeada de agua y sonidos de la naturaleza, las grandes escaleras estaban frente a él, Jungkook también las miró con ojos grandes y llorosos. Yoongi movió una de sus manos en la marca de Jimin, de esta comenzó a emanar un brillo rojo hasta que desapareció tan rápido en un abrir y cerrar de ojos. Yoongi había regresado a la normalidad el tiempo de la marca, esta desapareciendo en segundos ya que debió desaparecer desde hace cinco años atrás, pero había sido ralentizada.

Jimin cayó al agua de la habitación, Seokjin lo ayudó a levantar. Al hacerlo Jimin era otro, estaba enfrente todos ellos con su apariencia angelical. Sus cabellos rubios brillaban cada vez más, sus ojos ahora eran de un azul tan atrapante y cálido que Jungkook no pudo apartar la mirada de este. Su vestimenta lentamente se convirtió en una túnica blanca con detalles dorados, igual a la de los demás ángeles. Y lo más sorprendente, unas preciosas alas blancas y llenas de plumas se extendían en su espalda.

Le dio una última mirada a Jungkook, tan sereno y feliz para comenzar a subir las escaleras. Siendo seguido de Yoongi, Hoseok y Seokjin. Jungkook los miró subir para luego regresar la mirada al cuarto ángel que seguía en su habitación.

 —Tienes la bendición de todos nosotros. Este regalo es para ti sonrió—. Olvidarás todo, a Jimin y a nosotros, pero cuando al fin lo recuerdes nosotros estaremos aquí contigo. Mientras tanto se feliz, Jungkook el ángel terminó de mover sus manos en la esfera dorada, ahora acercándose a Jungkook.

Áᥒgᥱᥣ [Jikook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora