Áᥒgᥱᥣ [Jikook]

Parte 19.

"Mi pequeño y peludo hijo."

El cachorro estaba dormido en la cama de Jungkook mientras ambos chicos descansaban en el piso de la habitación. Jimin lo miraba dibujar algo, al principio solo eran trazos y líneas que no entendía, pero mientras más pasaba el tiempo esas líneas comenzaron a tomar forma y la sonrisa de Jimin no había desaparecido de su rostro.

—¿Qué dibujas, Koo? —preguntó sonriente.

—No te diré hasta que esté terminado por completo —no lo miró, solo siguió con su dibujo.

—Apuesto a que es tu pequeño y peludo cachorro.

—Apuestas mal Minnie, es mi pequeño y peludo hijo —lo miró para sacar su lengua con diversión.

Jimin soltó una risa mientras dejaba su cabeza caer hacia atrás. Jungkook se unió a su risa, estaba muy feliz ese día, bueno, si Jimin estaba con él claramente estaría feliz.

—Dejando de lado eso... Quiero saber, ¿Averiguaste sobre tu marca de nacimiento?

—No, el color disminuyó un poco, pero eso fue todo, no es como que una marca de nacimiento pudiera desaparecer solo porque sí.

—Tienes razón, incluso puede ser cualquier cosa menos una marca de nacimiento, ya sabes, la piel se mancha.

—Lo sé, pero mamá decía que esa marca era su favorita y que nací con ella.

—¿La extrañas? —Jungkook dejó su libreta de lado para mirarlo.

Jimin suspiró mientras apartaba su mirada del castañito. Jungkook se sintió horrible al preguntar algo como eso, era como que le preguntaran sobre sus padres, claramente se largaría a llorar. No debió preguntar.

—Koo... Te mentiría si te dijera que no lo hago, la extraño, cada día la extraño más, pero es reconfortante saber que ella no me ha dejado del todo —sonrió de lado.

Levantó una de sus manos mientras le enseñaba el bonito brazalete que descansaba en una de ellas. Jungkook lo miró, era un brazalete muy bonito, ya se había fijado de que Jimin lo llevaba, pero nunca pensó que fuera de ella.

—Mamá sabía que se iría y me dejaría solo, su enfermedad era algo que le había medido la vida, mamá tenía más años que vivir y pasar conmigo, pero eso... Solo la limitó, ella sabía que me dejaría y me prometió que, aunque yo no la mirase, ni la sintiera, ella estaría conmigo —sonrió—. Este era el favorito de mamá, siempre lo llevaba puesto... Todavía recuerdo sus palabras a la perfección, incluso la recuerdo a ella. Vestía un bonito vestido color rosa, su favorito, su cabeza estaba adornada por una tela del mismo color cubriendo su falta de cabellos, pero seguía siendo hermosa, te lo juro Jungkookie, era la mujer más hermosa... Tenía tantos encantos, su sonrisa era uno de ellos —sus ojos se habían aguado pero no borraban su sonrisa, a Jungkook le gustaría ser como él, hablar de sus padres con una sonrisa y sin llorar por lo miserable que era. Jimin era un chico realmente fuerte—. Ese día me llamó, yo estaba en mi habitación alistando mi ropa, dentro de pocos días sería mi cumpleaños y quería mantener todo listo, había elegido mi vestimenta semanas antes y solo tenía que dejarla preparada para el día, mamá también mantenía todo listo, ella estaba más emocionada que yo —se rio un poco ante el recuerdo—. Corrí donde ella en cuanto la escuché llamarme, me recibió con una sonrisa, algo en mí se encendió, mis energías habían aumentado y mis ánimos estaban por las nubes, ella me había hecho feliz con solo eso... Me acerqué a su cama, mamá estaba en sus últimos meses, ya no se podía levantar, pero aun así estaba emocionada por mi cumpleaños, pero luego... Lo sabía Koo, ella solo tomó mi mano, me dijo cuan feliz estaba por mí y por saber que cumpliría un año más de vida siendo tan fuerte y sano. Recuerdo que la miré sacarse su brazalete, yo le dije que no, que si el brazalete tenía que ser mío me lo daría cuando fuera mi cumpleaños... Ella se negó, sabía que su enfermedad no le daría más meses como los doctores decían. Me negué, lloré y le grité que no, que ella me lo daría el día de mi cumpleaños. Parecía que había aceptado así que me disculpé por gritarle y con un beso en su frente salí de su habitación.

Jungkook lo había tomado de sus manos mientras lo miraba con pena, las lágrimas bajaban lentamente de las mejillas de ambos. Jimin se animó a el mismo para seguir.

—Días después desperté y en mi mesa de noche se encontraba una caja de regalo, lo tomé y era el brazalete, mamá me había dejado una carta donde me pedía perdón, dijo que había sido una mala madre, que no podía cuidar de ella y que me dejaría solo. Lloré mucho, ella había sido la mejor madre. Después corrí a su habitación, me sonrió débilmente, al mirarla supe que ya no me podía negar, su enfermedad estaba muy avanzada como para que ella llegara a la fecha de mi cumpleaños. Ese día ella misma me lo colocó mientras yo me metía a su cama, la abracé y besé mucho, no sabía por cuanto tiempo más lo podría hacer... —su voz se cortó.

Jungkook se lanzó a sus brazos mientras lo consolaba, era mejor parar, quería mirar su sonrisa, pero sin lágrimas bajando de su rostro.

¡Hola!

¿Cómo están?

¿Qué les pareció el capítulo?

Espero que les guste

Estuvo algo sad el final, perdón

Nos leemos pronto ❤

¡Adiós!