¡𝑺𝒉𝒊𝒏𝒆! [Vol. 2]

𝟎𝟓. 𝐍𝐨 𝐩𝐮𝐞𝐝𝐨 𝐜𝐨𝐧𝐟𝐢𝐚𝐫 𝐞𝐧 𝐭𝐢

-Esta tarde será un día normal, hablando del entrenamiento, uno contra uno, no durará tanto así que esfuercense.- dijo el profesor Aizawa para después salir del aula.

- Al fin.- dijo Mina estirando sus brazos.

-Pero aún así nos va agotar, recuerda que es el profesor Aizawa.

Noriko escuchó los quejidos de su amiga desde su lugar, ella estiró sus brazos hacia arriba hechando la cabeza para atrás mientras suspiraba.

- Dios, no se cansa ese hombre.

- ¿Y tú sí?- Katsuki recargó su trasero en su mesa mientras se le quedaba mirando.

- Un poco, pero no es tanto por eso, nos han traído corriendo que no he podido comer bien y me debilité un poco.

- ¿Intentaste hablar de eso con Aizawa?

- No.

-Deberías, si tú poder depende de tu manera de comer entonces habla con él.

La campana sonó indicando que era la hora del almuerzo.

Ella suspiró suspiró aliviada, podría ir a comer tranquila.

-Ven, vamos a comer, tu almuerzo está en tu mochila.

Ella miró dentro de esta y en efecto ahí estaba, lo tomó y salió caminando a un lado de Katsuki.

- ¿Quién crees que te toque hoy?- preguntó la albina.

- No lo sé, puede ser cualquiera, no estoy seguro.

Ambos dejaron de hablar y continuaron su camino hasta el comedor de la escuela.

- Hay que sentarnos por ahí.- ambos eran los únicos de la clase A en esa en esa mesa. Así que tomaron asiento.

- Gracias por la comida.- dijeron ambos y se procedieron a comer.

Ambos estaban en silencio comiendo, no era incómodo, por contrario.

Noriko recordó lo que Uraraka había dicho. Porque les molestaría algo así, es tan estúpido que le hayan prohibido contar algo tan importante.

- Bakugou.

- ¿Qué quieres? Déjame comer.

- Ve a comprarme algo de comida.

- Ve tú, tonta.

- Me estoy mareando, imbécil.- claramente eso era mentira, pero necesitaba que dejara su celular en la mesa para ella ver.

- Ahora vengo.- dijo revolviendo los ojos molesto.

Por suerte para ella, dejó su teléfono en la mesa y cuando lo perdió de vista decidió tomarlo.

-Esto está mal, pero...- si no, no sabrá que sucedía con ella.

Tomó el celular y lo revisó.

Azuma Noriko.

Lo primero que pude ver en es celular era su fondo de pantalla, era yo, y dios que sucedía.

¿Éramos una pareja? ¿Por qué él también decidió esconderlo?
¿Mamá lo obligó?

Abrí un poco más de lo que debía, a mi no me interesaba ver alguna otra cosa que no se relacionara conmigo.

Divisé a Bakugou entre la gente de vuelta a la mesa, que rápido, puse el teléfono en dónde estaba y puse cara de hambre.

- Sólo había esto, cómetelo.