𝟏𝟐. 𝐔𝐧𝐚 𝐜𝐢𝐭𝐚 𝐦𝐚𝐬

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Azuma Noriko

Después de dejar la presión escolar, pudimos empezar a relajarnos, todos comenzamos a disfrutar lo poco que nos quedaba de vida escolar. En cada receso solíamos comer juntos, también jugábamos algún deporte o cosas que gente común haría.

Nuestros destino después de la preparatoria ya estaban firmados y enviados a las respectivas compañías en las que trabajaríamos.

- ¿Sigues preocupada por eso?- la voz de Katsuki me llamó.

- No, no, para nada.- el rodó los ojos.

- ¿Me crees estúpido?

- ¡No! ¡Nunca dije eso!- dije con pánico agitando mis manos frente a mí en señal de negación.

- Deja de preocuparte por ambos, y si te hace sentir mejor, podemos terminar en cuanto te vayas y no sentirte atada.

- ¿Quieres terminar conmigo? - sentí mi pecho hundirse al pensar que podría pasar. No estaba lista, pero siendo sinceros, ¿quién estaría listo para terminar una relación que no da motivos para ser acabada?

- ¡No! No quice decir eso.- intentó arreglar sus palabras.- Es solo que no quiero que te sientas comprometida a volver solo por mi, y dejes tú sueño de lado.- miró hacía el césped arrancando un poco con sus dedos.- Sabes que espero que tengas la mejor vida posible y que si un día no quieres volver porque amas lo que haces en Estados Unidos, no lo hagas solo por una promesa.- su voz se fue apagando con cada palabra.

- Terminaremos, en cuanto me vaya, y seremos amigos, podremos hablar todo lo que tú quieras y puedas, y si al pasar cinco años sigues teniendo sentimientos por mi y yo por ti, regresaré, especialmente para verte a ti.- lo miré un poco seria intentando no quebrarme.- si tú no sientes nada por mi y yo tampoco y decido volver, será porque en serio quiero estar aquí.

- Si decides volver, me casaré contigo, Noriko.

(...)

Íbamos al salón tomados de la mano, y las miradas y susurros no paraban, como si no fuera algo común. Vi entre la gente a aquella chica que días atrás le dió una carta a Katsuki declarandole que le gustaba, cosa que ni siquiera leyó, aún creo que pudo haberse la regresado con amabilidad, pero la palabra amabilidad no estuvo en su vocabulario cada vez que le pedía que la rechazará de una manera amable, recuerdo que dijo "me desagrada la gente que cree que puedes cambiar a una persona por otra como si de un objeto se tratase" lo cual me hizo pensar evidentemente que ella no era de su agrado. Volví a mirar a Karin y ella solo miraba con rencor mientras sus amigas le susurraban cosas.

- Joven Bakugo.- All Might llamó al rubio y este giró.- Solo quiero preguntarte algo.

Yo le solté la mano y caminé a nuestro salón para que pudieran hablar, al llegar no pasaron ni cinco segundos y una pelota rebotó contra mi cara haciéndome tambalear hasta que caí sentada al suelo mientras me sostenía la nariz y mi vista se ponía borrosa, aún así pude ver un hilo de sangre en mi mano provocado por el fuerte impacto. Unos pasos apresurados se escucharon y una voz preguntó por mi, cosa que no respondí ya que sigue un golpe muy fuerte, sin embargo pude escuchar las voces.

- Noriko-san, ¿Te encuentras bien?- la voz de Midoriya fue la primera que pude reconocer, pero luego unos pasos firmes sonaron más.

- ¿Quién fué?- preguntó Katsuki de la manera más pasiva pero pesada posible. Logré agudizar mi vista y todos quedaron blancos.- ¿Quién fué? - me miró y yo ni pude contestar.- Me lo dicen ahora mismo o rompo algo.- alzó la mano a los chicos de nuestro grupo y a los del grupo B que también estaban ahí.

¡𝑺𝒉𝒊𝒏𝒆! [Vol. 2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora