No soy solo un apellido (Tobirama y tu)

Capítulo 12

2 MESES DEL ANUNCIO
*Narra ______*
Ya solo faltaba 4 meses para unir mi vida con Tobirama, hoy nos encontrábamos junto con Mito y Hashirama viendo algunas cosas como el lugar y la cantidad de invitados, mi kimono de compromiso seria el mismo con el que mi madre se casó a pedido mío y por ahora dejaríamos para más adelante las invitaciones así como la comida.
Mientras los mayores hablaban delante de nosotros yo y el peliblanco nos encontrábamos en un silencio sepulcral hasta que intente romperlo sacando algún tema de conversación.
-escuche que en unos días comenzaran a entrenar sus equipos de Genins- le sonreí
-sí, yo y Hashirama nos encargaremos de un grupo de tres niños- y sin más volvió su vista al frente
-¿Qué tal si vamos los cuatro por Sushi?- propuse en alto recibiendo varias afirmativas
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Luego de haber comido el ojirubi me acompaño a casa y aunque lo invite a pasar de manera insistente el me rechazo para irse rápidamente. Ahora ya era de noche y Madara ingreso a mi habitación
-¿Cómo fue todo hoy enana?-
-Pues hablar con Tobirama, es más difícil que ganarle a Kou en las escondidas- mi hermano solo soltó una gran carcajada y se acostó a mi lado
-estoy seguro que caerá ante ti… y si no lo hace lo golpeare hasta que entre en razón- yo solo negó riendo y me acomode mejor en aquel abrazo fraternal
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1 mes y medio para mi cumpleaños, hoy había decidido llevarle comida a Tobirama así que en la mañana prepare un ventó y me dirigí a la torre hokage.
-HOLAAA- grite una vez ingrese a la oficina del castaño luego de tocar la puerta
-Holi _____ (apodo)- hablo el mayor y me sonrió -¿Qué te trae por aquí?-
-Decidí traerle el almuerzo  Tobirama- apunte con el pulgar a su hermano que se encontraba ayudándolo en el papelerío y este solo me miro inquisitivo –por cierto… deberías vestirte más seguido sin esa armadura (MULTIMEDIA)…. Te vez bien- y pum él se sonrojo mirando hacia otro lado, le tendí el ventó y Salí de allí luego de escuchar un pequeño gracias de su parte…
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*al otro dia*
“-Me aburro… quiero una misión- me queje delante del escritorio de mi hermano
-ya haz tenido misiones- me dijo como reproche
-sí, desde hace más de cuatro meses he tenido que recoger plantas medicinales, atrapar animales perdidos y ayudarte a ti con el papeleo.- grite algo desesperada y el negó –quiero acción, golpear gente… sabes que puedo hacerlo- lo mire con reproche y luego de que Madara suspirara pesadamente se paró para acompañarme hacia la torre Hokage.”
Y aquí estaba ahora en las puertas de Konoha esperando a quien iría conmigo para llevar un pergamino a la aldea de las nubes… según Hashirama una misión de rango A aunque realmente no lo creía así.
-oh, así que iré contigo- dijo seco y sin darme vuelta pude saber que un peliblanco se encontraba tras de mi
Bendito seas Hashirama entre todas las divinidades y bendito es tu cabello lacio amen. Agradecía que mi mejor amigo me haya emparejado con su hermano para la misión… realmente vine buscando cobre y encontré oro, podre golpear gente y tratar de conquistarlo en el proceso.
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*Un mes para el cumpleaños de __________*
Ya íbamos 3 días de misión, habíamos conversado un par de veces pero Tobirama realmente me seguía viendo como una amenaza… a veces me observaba y estoy segura que pensaba que me le lanzaría encima con un kunai para matarlo si se llegaba a distraer… en fin la aldea se encontraba a solo una media hora de donde estábamos pero sentimos chacras que nos rodean y paramos, unas agujas pasaron por el costado de mi brazo puesto a que me había movido… su trayectoria original era mi corazón.
De los arbustos y árboles salieron un total de 8 ninjas… el peliblanco y yo nos pusimos espalda contra espalda y comenzamos a luchar. Golpes, Shurikens, kunais y jutsus iban y venían… ya hacía unos 15 minutos estábamos peleando y nos quedaban solo 2 sujetos, termine con el que peleaba contra mí y ci como Tobirama se encargaba del otro pero me di cuenta que era un clon de agua y cuando vi que el real se acercaba por la espalda corrí tomando el filo de la catana que disponía a clavarle, sin más con un kunai lo degollé.