Capítulo 14. Una Conversación Esperada

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Segunda semana del curso introductorio, no iba tan mal hasta ahora, pero era jueves, significaba que revisarían los procedimientos para emergencias.

- Señor Doe, por favor dígame, ¿qué haría usted en una situación como esta? - era un mal momento para no poner atención, tuvo suerte de que una voz le susurrara - Buscar un lugar seguro y esperar - ¿hacerle caso o no? Escogió hacerle caso al desconocido.

- Esperar en un lugar seguro hasta que acabe

- Muy bien señor, ahora, las magnitudes de los temblores varían... - inmediatamente dejó de poner atención y en su lugar buscaba a la persona que le ayudó - Detrás de ti - volteó y vio un chico de cabello azul marino, luego de identificarlo volvió a mirar al frente sin poner atención.

Cuando acabó la clase tenían descanso para almorzar, aprovechó para acercarse al compañero que le ayudó en clase - Oye, ¿fuiste tú quien me dio la respuesta? -

- Sí, soy Brandon

- John Doe, gracias por eso - era todo lo que quería saber, se alejó después de eso, pero su compañero lo detuvo - ¿A dónde vas? Es el almuerzo, siéntate con nosotros -

John ya estaba acostumbrado a no confiar en nadie, pero no quería quedarse mucho tiempo en el curso así que debía integrarse o no podría salir.

Eran tres chicos de los cuales Brandon parecía ser el mayor, los siguió a la cafetería y cuando todos tenían su comida fueron a una mesa donde empezaron a hablar.

- Que clase tan aburrida

- Lo sé, pero es obligatoria, mejor aprobar ahora para poder irnos

- No fue tan malo. Y llevamos meses aquí, seguro que será pronto

-  Ya quiero tener mi placa y estar en persecución

Los tres amigos hablaron casualmente hasta que Brandon integro al recién llegado a la charla - John ¿A qué rama iras tú cuando salgas? -

- A un proyecto nuevo

- ¿Te tocará inaugurar? Debes ser muy bueno para entrar siendo tan joven

- Supongo... ¿Qué edad tienen ustedes?

Brandon le respondió - Yo tengo 24, Luke y el tomate tienen 20 -

- Tienes 17 años ¿cierto? - le preguntó Charlie alias el tomate. John solo asintió ya que estaba masticando. A pesar de la diferencia de edad no se sentía intimidado, tenían casi la misma altura excepto Luke, que era más alto.

- Tus padres deben estar orgullosos...

- Mi padre no quería dejarme entrar, pero no tuvo muchas opciones

- El mío tampoco, aunque en tu caso no lo entiendo. Seguro que eras el rey de la escuela ¿Por qué dejarlo? - le preguntó Luke para sacar conversación

- Las autoridades vinieron con una oferta y no pude negarme - No quería hablar de eso, los otros lo notaron así que no preguntaron más.

Brandon le dio una palmada en el hombro diciendo - Eres ambicioso, eso me agrada -

- ¿Qué hay de ustedes? ¿A dónde quieren llegar? - El chico de cabello oscuro descubrió que estaba con un futuro rescatista y dos policías, pero no era difícil hablar con ellos.

Después de que acabara la clase John se encaminó a su departamento, apenas cruzó la calle Leilah lo llamó, se veía diferente de la última vez, mucho más arreglada. Charlie y Brandon los vieron platicando por una ventana así que salieron corriendo para aprovechar la oportunidad de hablar con ella.

- ¿Cómo va la denuncia?

- Aún espero resultados ¿Qué hay de tu amiga? ¿La encontraste?

- No he podido... - justo entonces llegaron sus compañeros a interrumpir - John, amigo vamos por pizza ¿vienes con nosotros? -

- Hoy no, tengo algo que hacer - respondió sabiendo que querían el número y no de la pizzeria.

- Tu amiga también puede venir si quieres, ¿Qué dices linda, vamos a comer? - le pregunto Brandon con una sonrisa

- No gracias, también tengo cosas que hacer - Leilah empezó a alejarse, pero a medio camino se detuvo para voltear y decir - John, aún te debo un favor ¿te veré otra vez este fin de semana? -

- No lo sé, tal vez vaya el sábado - esa conversación estaba fuera de contexto para sus compañeros que voltearon a verlo sin creer que coincidiera con alguien como Leilah, cuando ella estuvo lo suficientemente lejos empezaron a burlarse y reclamar, en vez de explicar dijo - Es una larga historia -

Sin tener de otra, sus compañeros volvieron a los dormitorios mientras John iba a su departamento, por fin había decidido hablar con Sera, llamó a su padre para pedirle su número, sin embargo, fue ella quien respondió - ¿John? - se quedó sin palabras por un momento - ¿Serafina? ¿Por qué tienes el teléfono de mi padre? -

- Estamos en la escuela. Él está hablando con el director para aclarar unos datos con mi registro

- Ah... - respondió a la vez que pensaba en otra cosa inteligente que decir

- ¿Quieres que le diga algo?

- No, yo hablaré después con él... - a Sera le dolió pensar que no confiaba en ella, pero no quiso ser la primera en colgar y menos mal no lo hizo antes de que John preguntara - Y tú ¿Cómo estás? -

- Estoy bien, las cosas aquí aún están algo tensas pero soportables

- ¿Qué hay de tu habilidad?

- Sigo sin recuperarme, tu padre me ha ayudado a enfrentar el hecho de que tal vez nunca regrese. ¿Qué hay de ti?

- Yo estoy bien, he tratado de integrarme y no es tan malo como pensé

- Me da gusto saberlo

Ambos estaban nerviosos, sin saber cómo continuar, ninguno quería que terminara la llamada, pero tampoco querían hablar de la última vez que discutieron

- Aún estoy practicando los movimientos de defensa que me enseñaste - seguían hablando de otros temas

- Seguro que ya mejoraste

- Bastante pero aún hay veces en que terminó en la enfermería

- ¿Has aprendido algo nuevo?

- Sí, B... - por poco se le escapa el nombre de Blyke, sin embargo, fue demasiado tarde.

- ¿Blyke? ¿Es lo que ibas a decir?

Tardó en responder, pero al final se rindió, no iba a seguir evitándolo, suspiro y continuó - Sí, él y Elaine me han ayudado a entrenar -

- Debí imaginarlo. Estabas con ellos desde antes ¿por qué no lo estarías ahora?

- Yo no estaba de su lado

- Tampoco estabas del mío

- Lo intenté, pero simplemente no podía entender por qué me mentiste

- Tienes razón, no debí esperar que lo entendieras

- Tal vez lo habría hecho de saber lo que sé ahora. Pero eso ya no importa

- ¿Qué es lo que sabes? ¿Qué te dijo William?

A esas alturas de la conversación ya no había vuelta atrás, solo podían continuar - Fue Claire -

- ¿De dónde sacaste ese maldito nombre?

- Así fue como me llamaste cuando discutimos - después de eso John se quedó callado, apenas y podía recordar lo que pasó ese día, pero no confiaba en su palabra

- Dile a Arlo que mando saludos - fue lo último que dijo antes de colgar.

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