¡Reencarne en un Mundo en Guerra!

Capítulo 1: ¡Reencarne en un mundo en Guerra!

Volumen 1 (Humanos)

Raúl era un estudiante del último año, que a pesar de no ser de los mejores de su clase siempre tuvo notas buenas destacando historia donde poseía gran interés y conocimiento, Raúl no se llevaba muy bien con su curso excepto con su pequeño grupo de amigos que se les podría llamar unos frikis de las ciencias sociales, Raúl también disfrutaba de cosas como los videojuegos, manga y anime pero su verdadera pasión era la historia en especial la historia bélica.
Raúl trabajaba de medio tiempo en una tienda de armas donde podía probarlas, aparte que tenía que hacerle mantenimiento gracias a eso supo de su funcionamiento a tal punto que su curiosidad no pudo aguantar más y se puso a buscar videos para complementar sus conocimientos sobre armas de fuego.
Él vivía con sus padres y se llevaba bien con ellos, nunca tuvo problemas a pesar de ser hijo único no se sentía sólo, a pesar que su madre se la pasara en lo oficina o que su padre no saliera de la cocina eso no impidió que le dieran amor a su hijo.
Un día Raúl fue de viaje escolar y tenía que ir en un autobús con el resto de la clase desafortunadamente para él, su apellido (el cual es Díaz) que es uno de los primero de la lista impidió que se suba en el autobús donde irían sus amigos amantes de las ciencias sociales por el contrario a él le tocó el autobús lleno de los “populares” aunque a él no le hacían matoneó tampoco significaba que sería un paseo agradable.

Al principio el viaje era normal pero al cabo de un rato de haber dejado el instituto  empezaron a haber problemas con el conductor al parecer su novia lo había dejado y por el móvil, me asusté por los gritos de aquel hombre también por la velocidad a la que iba el vehículo, decidí agacharme en mi asiento mientras le rezaba a cualquier dios que me escuchara.

Raúl : !por favor no qui…

De repente el autobús se estrelló con un local de embutidos.

En el autobús iban viajando 25 pasajeros incluyendo a los profesores y al conductor. 10 pasajeros salieron heridos y 5 sin ningún rasguño de estos 5 afortunados se encontraba el conductor del autobús.
En efecto Raúl había muerto junto con el resto de esos 9 estudiantes restantes que no tuvieron tanta suerte.
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Raúl: ( Siento mucho frío pero uno como nunca antes lo sentí también un dolor indescriptible en mi pecho, tengo una jaqueca horrible aparte de eso no puedo hablar ni siquiera gritar.)
Raúl : (Todo está oscuro la penumbra es impresionante, no se ve nada es casi como estar ciego. ¿¡Oh Dios mío estoy ciego!?)

¿?: Qué estupideces piensas, mortal.

Raúl: ( ¡¿Qué?! ¿Alguien me habló, pero no puedo verlo será que ya enloquece?. Me debí pegar muy fuerte en la cabeza.)

¿?: cierto casi olvido arreglar tu cuerpo, espera un segundo.

Raúl experimentó un dolor mayor a cualquier otro jamás visto por el hombre, todo su cuerpo se retorcía se cortaba y se unía tal parece que su cuerpo estaba disperso por todas partes debido al accidente del autobús.

¿?: Listo, ya deberías poder verme.

Raúl se puso de pie con mucha dificultad y vio a una hermosa mujer que aparenta tener una edad cercana a los 21. Con una piel pálida con ojos de color ámbar y  pelo lizo de color magenta. El joven antes de poder procesar algo más en su entorno, recibió de golpe todo el dolor acumulado de su “ensamblaje” más el dolor del propio accidente. El joven no aguantó y empezó a gritar y cuando paro de gritar empezó a llorar y cuando pensó que el dolor había terminado su cerebro lo traicionó mandándole las imágenes del accidente de golpe. El joven se rompió y no pudo evitar vomitar en frente de la hermosa joven.