Capitulo 27

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Son aproximadamente las seis de la mañana, la brisa choca contra mi cara y el frio se apodera de mi

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Son aproximadamente las seis de la mañana, la brisa choca contra mi cara y el frio se apodera de mi. A pesar de estar muriendo de frio, el calor del cuerpo de Jean me mantiene quieta para no despertarlo, nos quedamos dormidos en el techo, dormimos abrazados, dormí en su pecho por fin sin miedo de que alguien de la casa nos viera. Levanto un poco mi cabeza para ver la carita de Jean, que aún se encuentra dormido. Me quedo fijamente mirándolo, admiro sus pestañas, su labios, absolutamente cada facción, solo sonrió a verlo y lo abrazo más fuerte de lo que ya estaba abrazado a mi. Cierro mis ojos, solo me dedico a sentir, sentir su olor, sentir su piel, sentir sus latidos, sentir su respiración, quiero que mis manos sepan ubicar cada parte de el.

—Buenos días Ferchis—Dice Jean tratando de abrir sus ojos.

Abro mis ojos y levanto mi cabeza de su pecho para saludarlo.

—Buenos días niño precioso—Le digo sonriendo, acariciando su cabello y dejando un beso en su boca.

Despego mis labios de los suyos y ambos nos quedamos viendo sin decir nada, siendo honesta me encanta cuando esto me pasa con Jean, donde solo somos los dos, amándonos con la mirada y aquí es donde me doy cuenta que hasta lo más mínimo que pasa entre los dos nos vuelve locos. Me doy la vuelta, dándole la espalda, el se voltea al mismo ritmo que yo y me abraza por la espalda, nuestra manera favorita de dormir.

—Te amo—Dice Jean dejando un beso en mi cuello.

—Te amo más Jean—Le digo agarrando su mano que se encuentra en mi cadera y le dejo un beso en ella.

—¿Estas lista para decir esto?

Solo suspiro y no contesto.

—Si no estas lista no pasa nada podemos dejarlo para...—Lo interrumpo.

—Estoy lista—Le digo mientras me doy la vuelta quedando frente a frente con el.

El solo me mira y sonríe dejando un beso en mi frente.

Ambos nos levantamos, nos dirigimos a mi habitación, me dirijo al baño para ducharme y Jean me abraza por detrás antes de que pueda entrar al baño.

—¿Nos duchamos juntos?—Dice en mi oído, en el tono más excitante que he escuchado.

—Jean... eso no se pregunta, lo haces y ya—Le digo con ganas de arrancarle la ropa a mitad de la habitación.

El se ríe y nos vamos así abrazados hacia el baño. Al entrar Jean cierra la puerta con llave, no basto un segundo después de eso cuando el se lanza a mi, haciendo que choque contra la pared del baño, levanta mis dos brazos, empieza a retirar el hoodie de una manera lentamente excitante.

—Jean...—Jadeo.

—Dime.

—Quítame esto ya o yo misma me lo quitare.

"Tu lograste ser la excepción"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora