~8~

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-¡Hola ya he llegado!- cierro la puerta tras de mí y cuelgo el abrigo en el perchero.
Voy a la cocina donde sólo está mi abuela y la saludo y me quedo charlando con ella un rato haciéndole compañía mientras cocinaba algo.

Después de unos quince minutos me dirijo a mi cuarto y me tiro reventada a mi cama.
Saco el móvil del bolsillo del pantalón y le escribo a mi amiga "Vale, ya he llegado"

Tiro el móvil a un lado y resoplo cansada mordiéndome el labio inferior para reprimir una gran sonrisa.
Salgo de mi trance cuando suena mi móvil. Había sido leer mi mensaje y darse prisa en llamarme

- Cuéntamelo todo- río. No se anda con rodeos mi amiga.

- Pues haber- explico- ¿desde el principio?

- ¿Han pasado cosas?- interrumpe- Vic, no guardes silencio. ¿Eso es un si? ¡Eso es un sí!- oigo como chilla desde el otro lado y no puedo evitar chillar con ella también.

- Para ser la primera vez que quedamos en persona ha ido bastante bien- confieso- Sí lo que te has pensado es que ya me ha besado, ¡te equivocas!- oigo como resopla desde la otra línea y río para mi misma.

- Bueno, pero cuéntame, ¿ha ido bien?

- Ha ido perfecto- sonrío ampliamente aunque ella no lo pueda ver.

- Te escucho feliz Vic- añade

- Es que realmente lo estoy- y nada más escuchar lo que digo vuelve a gritar de la emoción y yo a reírme.

Le empiezo a narrar con todo detalle lo sucedido esta tarde y alguna que otra vez me pregunta o pide que especifique en algo.

Alex y yo llevábamos hablando dos semanas casi todos los días diría yo. Buscaba cualquier chorrada y tontería para meterse conmigo.

Cuando me dijo hoy de quedar no lo dudé dos veces aunque tampoco dudé para llamar corriendo a mi amiga para contárselo y que me ayudase.
-¡Estoy nerviosa! ¿Y si nos quedamos sin tema de conversación?...- hablo rápidamente nerviosa- Tía Vale.
- Cálmate Vic. Párate a pensar, ¿no crees que te habrá estado hablando todos estos días por algo?- me callo- y si no no te habría dicho nada- se hace el silencio y recapacito cada palabra que decía. - El silencio otorga Vic- ríe- te estás enganchado y no sabes cuanto.

¿Por qué me conocía tan bien? Joder.

- Intenta relajarte y sé tú misma. Eso es lo más importante.
Y con esas palabras sentí que me quitó un peso de encima...

Quedamos en la terraza de una cafetería del centro. Cuando llegué él ya estaba sentado esperándome mirando el móvil.
Alzó la vista y me miró. Sonrío de lado y se levantó con cuidado para darme dos besos.
Me percaté que seguía con las muletas y le pregunté por su recuperación.
- Aún me queda una semana más- me sonríe con esa sonrisa suya tan preciosa- poco a poco. Ya queda menos- dice con gracia.

Y aunque al principio estaba algo nerviosa, los nervios se esfumaron en cuestión de segundos.
Tenía iniciativa por sacar muchos temas de conversación y reírnos un rato.

Hablamos de tantas cosas... Y se me hizo el tiempo tan ameno... solo de recordarlo no podía evitar sonreír y de pensar "Vale tenía razón" me estaba pillando tan rápido.

Tenía ganas de volver a hablar con él por fotos en Instagram y de volver a quedar más aún.

Lástima que estuvimos solo poco más de una hora porque había quedado con unos amigos a ver a sus compañeros a un partido, ya que al estar lesionado se tendría que remitir a quedarse en el banquillo.

Cuando termino de hablar con mi amiga me quedo un rato con el móvil.

Me llega una notificación de Eric. "Adrián me ha abandonado 🙄"

"Pero no llores" Le contesto aguantándome la risa con mi propia broma.
"Graciosa. Pásate un rato a mi casa que tengo ganas de hablar"
Me muerdo el labio dubitativa, ¿de qué quería hablar conmigo?
"Solo si pedimos para cenar🥺" Rápidamente me contesta para darme la razón. "Llego en quince minutos y hablamos de lo que quieras Eric"

Me levanto de mi cama y me calzo de nuevo las zapatillas. Aviso a mi abuela de que me había surgido una cosa y que no me podía quedar a cenar, sonrío aliviada cuando me responde con que no le preocupe que iba a venir una amiga suya. Así no me siento tan culpable.

Llamo a un cabify que no tarda mucho en llegar y me deja en la puerta de la casa de Eric.
Era la primera vez que venía a su casa y tenía ganas de verla.

Me comentó que vivía con Adri, el chico con el que estaba en la discoteca en fin de año. Eran compañeros de equipo, y además de eso muy amigos.

Le aviso de que he llegado y me abre el portal diciéndome el número de su piso.
Me abre la puerta un Eric a quien no tardo en darle un buen abrazo y él no se niega en absoluto.
- ¡Qué honor poder venir a tu casa!- exclamo intentando animarle y entrando - ¿como estás?- cierra la puerta tras de sí y vamos hacia el salón para sentarnos en el sofá. Estaba viendo un partido de fútbol en la tele. - ¿de qué querías hablar?
Nos sentamos el uno al lado del otro y resopla- Eric me puedes contar lo que quieras- apoyo mi cabeza a un lado para mirarle con detenimiento- y más cuando tú has aguantado mis audios infinitos y oírme hablar mil veces quejándome de la universidad- le consigo hacerle reír.

- Me van a convocar para el primer equipo- suelta de pronto- Vic, ese es el equipo profesional- aclara- es el que sale en la televisión y todo el mundo ve.

- ¡Pero eso está genial!- me apresuro para abrazarme a su pecho- ¿y no estás contento? ¡Eric eso es un notición!

- Lo es- admite- pero no sé. Es un paso grande... Quizás demasiado grande para mí. - nada más después de oír eso alzo la mirada hacia él mientras seguía en la misma posición.

- Es un paso grande si, pero para estar orgulloso. Eric escúchame, tienes que estar orgulloso de tu mismo, ¡porque yo si lo estoy! - agarro su cara entre mis manos para que me mirase a mi y no desviase su vista hacia otro lado- Estoy muy orgullosa de ti- nuestras miradas conectan y sonríe. - has trabajado demasiado muy duro y te sobra actitud y ambición. Que te hayan convocado es el resultado de todo ese esfuerzo. Eric, estate contento porque te están llegando las recompensas.- me apoyo de nuevo sobre él. Llevaba puesta encima una sudadera tan suave... que estaba demasiado cómoda.

- Sí estoy contento, pero a la vez tengo miedo, ¿sabes? No creo que ese partido lo juegue pero solo pensar que voy a estar en la lista y voy a la concentración con tantos jugadorazos. No sé, una mezcla entre respeto y miedo- habla ya más calmadamente mientras hace círculos con sus dedos sobre mi brazo. - Es un paso muy grande pero tengo ganas- baja su mirada hacia mi.

- Yo también tengo ganas de verte ahí.

Seguimos en esa posición pero esta vez viendo el partido de fútbol. Me contaba más cosas de fútbol y yo le escuchaba interesada.
Me intentaba colar alguna broma de vez en cuando para picarme y hacerme reír.

Decidimos pedir algo para cenar y cuando suena el timbre salgo corriendo hacia la puerta.
"¡No te mates! Que quiero cenar" Grita Eric riéndose.

Mientras él se levanta y va a la cocina a traer vasos, servilletas y cubiertos.
- Oye, hoy quedado con Alex, el del otro día- levanta un segundo su cabeza mientras ponía los platos encima de la mesa y me mira arqueando una ceja y rueda los ojos- ¡venga Eric! El otro día me dijiste que no era mal chico.

- No te dije eso Vic, simplemente es que no me termina de convencer. - habla tranquilo.

- Me sé cuidar solita- le sonrío para convencerle y darle un pequeño abrazo.




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Nuevo capp! Espero que os haya gustado♥️, ¿qué os parece Alex?
Y que Eric comience a abrirse un poco mas a Vic...

Os leo ;)

"Mi Mejor Jugada"; Eric GarcíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora