Stiles.

Capitulo II.

Ciertamente Stiles analizó seriamente el cómo debería manejar lo sucedido con Scott, así que, después del viaje más incómodo que ha tenido en años, quedo en verse con Scott para hablar de lo sucedido seriamente; lo que el Castaño no esperaba es que Scott se fuese de viaje (cuya razón no le fue especificada) con Deaton esa misma tarde y regresaría hasta dentro de un mes ¿Cómo lo supo? Simple, luego de pensar durante un largo rato en como regresar a casa Scott apareció y se ofreció a llevarlo. Ahora se encuentra en el sofá de su antigua casa mientras mira su reflejo en la pantalla oscura del televisor, no es que este pesando en algo que requiera la mayor concentración del mundo, simplemente piensa en la inmortalidad del sapo como cualquier persona sin nada que hacer; el detalle está en que Stiles si tiene que hacer y en qué pesar, pero de todas formas procrastina.

El Sr. Stilinski no se encuentra en casa, solo le dejo una nota explicándole a Stiles que estaría en la comisaria "instruyendo" a Parrish para ser un buen Sheriff, y Stiles sabe que le está costando un poco procesar la idea de su retiro. Stiles simplemente soltó un suspiro cuando leyó la nota y se fue directo al sofá. Luego de un extenso momento Stiles decidió revisar su celular solo por pura curiosidad e inercia encontrándose con nada en lo absoluto, y eso le hizo enojar un poco ¿Cómo Lydia podía ser así de desconsiderada? Ni un "Como te fue" o algo parecido cuando fue ella quien le invito a la fiesta aquella para dejarlo plantado; en cierta manera se siente enojado y a la vez sonríe un poco, no como una sonrisa normal, si no como una de las que aparecen cuando tu vida se está yendo por caño. Inconscientemente se lleva la mano al cuello y es demasiado tarde cuando su mano se estrella directamente con la rojiza e hinchada marca de mordida. En ese momento, cuando Stiles sintió su piel arder al roce de su mano y delineo la curvatura de aquella marca con sus dedos, sintió que el alma le dejaba el cuerpo ¿¡Scott lo había marcado!? Como pudo, y aun con la preocupación a flor de piel, corrió a su habitación, y ciertamente fue suertudo al no caerse al subir las escaleras.

Al llegar a la habitación esquivo las cajas en el suelo y se dirigió al baño, chocando toscamente contra la puerta la abrió lo mas rápido que pudo y corrió a la primera superficie reflejante que vio; una vez frente al espejo, y con la respiración a mil por hora, vio la marca rojiza en su cuello, y si, su alma lo abandono por unos segundos, hasta que sus ojos inquietos observaron a detalle la marca: faltaban las marcas profundas y sobresalientes de colmillos, y la ultima vez que vio, Scott si tenia colmillos. 

Eso fue un alivio casi inmediato, excepto porque cuando trato de recordar que había sucedido, recordó  casi todo, absolutamente casi TODO, y un sonrojo invadió su cuerpo cuando las escenas de la noche anterior con Scott, pasaron por su mente; casi podía escuchar sus gemidos y los de Scott fusionándose, y vaya que fueron muy ruidosos. Entre tanto ajetreo mental recordó de golpe dos ojos que le provocaron un horrendo escalofrío, que le erizo hasta el ultimo bello, recordó aquellas dos chicas, y por ultimo los recuerdos del momento en que aquella omega se acerco a su cuello y le clavo los dientes en la pálida piel, sin traer a su memoria aquella bebida que se le fue dada. El susto de Stiles quizá se había disipado, pero ahora una nueva duda carcomía su mente, y estaba mas que seguro que no podría descansar en paz hasta saber quienes o que eran aquellas chicas.