Días normales

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En una mañana muy pintoresca se escuchaba una melodiosa música que hacía que cualquiera tenga ganas de empezar el día.
- Miriam!! que es ese sonido?- menos para Helga que las mañanas no le sentaban bien.
- ah querida solamente es la radio, me despertó muy temprano para hacerte el desayuno.
- que?! - Este extraño acontecimientos, fue ignorado por la entrada de un hombre.
- buenas noticias, los Pataki se subirán al tren del éxito de nuevo al fin vendí suficientes localizadores para volver a ser llamados ricos.
- oh muy bien querido - ambos se abrazaron con mucho cariño.
- un momento que rayos está pasando aquí??!!
- tu tranquila linda y llévate tu almuerzo - dijo esto dándole su lonchera.
- si ve y aprende, sabemos que el futuro de nuestra familia está en ti y no en tu hermana que no nos a traído nada bueno- a un lado se podía observar a Olga.
- hay hermanita cómo me encantaría ser un poco más como tú.
- ja sigue soñando Olga.
- a si es sigue soñando....que tengas un buen día Helga.
- a ya decía yo.. esto es un sueño, no hay manera de que me llames por mi nombre Bob.
- como sea diviértete en la escuela.
- si si lo que tú digas - una vez ya afuera - Arnold!!..
- como amaneciste hoy mi reina, lista para que la escolte a la escuela.
- ah ahorratelo Arnold ya se que es un sueño.
- oh apuesto a que te diste cuenta por el carruaje - dijo señalando el carruaje con dos caballos blancos.
- no ya tenía muchas fantasías despierta con algo así.
- entonces... no quieres que te escolte?
- oh que diablos! Disfrutemos de este maravilloso sueño amor mío - dijo abrazando su brazo.
- por supuesto Ángel.

En la realidad..
- oh Arnold, claro que acepto, ahora dámelo ..dámelo!- dijo estirando su brazo al frente que choco la pared.
- Auch!! Maldita sea, solo un poco más y era mío.
Con mucha depresión miro donde se encuentra.
- mmjj ahora sí empieza la pesadilla..
En un pequeño cuarto que apenas alcanzaba un ropero y su cama que más parecía un saco de dormir. Con mucha cautela se dirigió al pasillo que conectaba a la cocina deslizó una pared falsa y ahí se encontraba su altar, encontró ese lugar con Phoebe quien la ayudó a remodelar y colocar todo lo relacionado con Arnold ahí, ese lugar era ignorado por su familia a si que no había de que preocuparse, cada mañana se bajaba hasta el sótano para observar alguno de los vídeos de su amado pero ahora parecía algo tarde para la escuela a si que solo se arrodilló frente a la extraña imagen de Arnold y dijo.
- oh amado eres la respiración que tengo en este mundo lleno de caus, eres la tranquilidad que aligera mi alma para afrontar el día a día, ¿ Hoy será el día en que deje que me descubras? o seré necia y arisca como en las últimas semanas?, oh mi amor si supieras como agitas mi corazón cada vez que te acercas, si supieras lo tormentoso que es no abalanzarse hacia ti para repetir ese hermoso momento contigo ooh.
- Miriam!! Tengo que ir a trabajar y tú sigues tirada en el sofá..
- oh ya desperté ya desperté.. - dijo a medio dormir limpiando su boca.
La amorosa mirada de Helga se desvaneció para dar con su habitual rostro de cansancio y enojo, para salir de ahí a alistarse para la escuela con lo poco que había, ya bajando hacia donde se suponía era la sala...
- Miriam donde esta mi cinturón de la suerte no vendo localizadores sin el.
- eso significa que a estado perdido durante meses.
- no me contestes a si niña, que gracias a ese cinturón, aquí no a faltado que comer.
- tienes que estar bromeando - dijo mostrando como en su tazón solo caía migajas de un cereal.
- bueno entonces come algo en la escuela.
- a si? Con que? con el dólar que me diste el mes pasado.
- ah aquí está Bob el cinturón estaba en la ropa sucia.
- por qué sigue hay ropa sucia?!
- o no se, nos cortaron el agua ayer
- oh rayos que no puedes hacer nada bien Miriam.
Helga solo saco un pequeño paquete de galletas y se fue molesta, ya no se despedía de nadie perdió la esperanza de que la escucharán.
Una vez Helga afuera se encontró con Phoebe.
- perdón Helga creo que se me hizo tarde.
- descuida Phoebe, solo no soportaba estar ahí.
- hoy mi mamá hará sus platillos especiales quieres ir a dormir a mi casa? - Phoebe le pregunto con una sonrisa. Helga solo la miro, Phoebe es la única que sabe sobre su situación económica, sabía que su invitación no era solo para pasar un buen momento si no también por caridad, pero su estómago rugía y tampoco es que ame estar con sus padres.
- eso suena bien.
- hoy después de la escuela creo que....
Plop!! Un choque la interrumpió
- ouch rayos cuánto tiempo más pasará esto Arnoldo?!!
- lo siento Helga no miré...
- de verías tener más cuido sabiendo que tienes esa cabeza de balón que..
- tranquilizate Pataki no quieras que dar mal - dijo Gerald señalando a los padres de Arnold que se encontraban atras de él y la miraban con asombro.
- oo..o buenos días.... Phoebe que me estabas diciendo.
Y siguió con su camino.
- que tengas un buen día linda.
- mamá y papá, no tenían que ir a la carnicería?.
- si al parecer aquí es donde nos despedimos hijo.
- ten un buen día cariño.
- gracias adiós.
Al despedirse su amigo se acercó.
- bueno viejo es justo como pensabas?
- es más que eso Gerard, es la mejor temporada de mí vida.
- vaya y solo son 6 semanas seguramente piensas que ahora todo está en orden.
Arnold ya no dijo más a ese comentario sus ojos miraron al frente donde Helga se encontraba hablando con Phoebe.
Desde su regreso de San Lorenzo él creyó que tal vez podría surgir "algo" entre ellos pero simplemente no fue así, parecería que todo volvió a como era antes pero no, lo cierto era que Helga se había distanciado de él de alguna manera, todavía había uno que otro disgusto cada vez que se veían pero Arnold sentía que cada vez que el intentaba acercarse, ella solo se alejaba o lo ignoraba, sus discusiones se acortaron enormemente que ya casi no le lanzaba sus famosas bolitas de saliva y aunque debería sentirse más feliz sentía que algo no andaba bien.
- hay!!.. - Arnold andaba tan distraído que no se fijó que una persona estaba delante de él que cayó encima de ella.
- Arni!
- Helga!
- oh lo siento mucho Helga me distraje que..
- ja Arnold y Helga con mucho amor se mandan un beso en pleno sol jajaja - Harold se burlaba y tanto Sid como Stinky se reían al ver la escena.
- gggmm espera a que te atrapé niño rosa - Helga se paró bruscamente haciendo caer a Arnold otra vez y fue en busca de Harold para golpearlo mientras esté solo corrió asustado adentro de la escuela.
Todos en la escuela ya estaban al tanto de la situación, además de que era difícil de ignorar después de las sospechas durante la premiación de Helga y la confirmación que tuvieron cuando fueron al sótano de la tienda del padre de Helga por el concurso de San Lorenzo todas las sospechas estaban poco a poco confirmándose muchos tenían los ojos y oídos abiertos al tema en cuanto otros solo lo ignoraban.
- vaya hombre me compadezco de él, creo que ya no tengo que preguntar por qué estabas tan distraído.
- lo siento Gerald es una situación complicada no lo crees?
- no yo creo que Pataki es lo complicado, como esos casos de los expedientes Z donde no se sabe quién es humano y quién un alienígena.
Arnold solo lo miro con los ojos entrecerrados.
- ya amigo no es que no piense que Helga sea el más grande dolor de trasero, pero a sabido ser la más introvertida chica que haya conocido y nos demostró a todas luces lo que siente por ti ( Arnold tenía una mirada tímida y las mejillas más rojas ) por lo que entiendo tu problema.
- es como dices Gerald, después de San Lorenzo, bueno con todo lo que paso pues...
- no necesitas decirlo amigo que con solo recordarlo tengo, el caso es, ¿que es lo que esperas ahora?
- ....bueno yo creo que..
- chicos se perdieron lo más divertido, Helga hizo que Harold corriera al baño niñas.
- si fue emocionante escuchar a todos gritar jajaja.

Hey Arnold.... continuaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora