Kim Seokjin ve su mundo ser zarandeado por Kim Taehyung, a quien considera una amenaza para seguir liderando tomando el control de todo lo que sucede en el colegio. Nunca habia visto a alguien tan cerca a su nivel a punto de arrebatarle todo aquello...
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Para Taehyung ya se estaba volviendo costumbre ver a Seokjin en el comedor junto a su madre comiendo y charlando como dos buenos amigos. Parecía que sus continuos desaires no surtían efecto en el mayor y ya comenzaba a hartarse. Además del hecho que su padre los acompañaba esta vez. Se acerco con sus brazos cruzados a la altura del pecho y el ceño fruncido.
— Hola, hijo — dijo su padre.
— Hola, papá, hola mamá — dijo seriamente y luego miro a Seokjin — pensé que tenías dignidad.
— Taehyung! — exclamaron sus padres avergonzados.
— ¿Qué? Este tipo se propaso conmigo y ¿Qué hacen ustedes? Comer galletitas con él y hacer como si nada hubiera pasado — dijo molesto.
— Él realmente lo lamenta. Lo ha intentado muchas veces contigo y...
— Pues que no lo intente más. Si tienes dignidad Seokjin no volverás a mi casa y a mi vida nunca más. — espeto.
Por alguna razón, Seokjin asocio aquel desprecio con el desprecio de sus padres y sus ojos se enlagunaron. Taehyung se espantó, y comenzó a reír nervioso e irónico.
— ¿en serio estas tan desesperado que piensas seguir fingiendo?
Flashes de como su madre lo ignoraba mientras el gritaba desesperado que no lo dejara con su tío vinieron a su mente. Ella siempre había preferido a su padre, y su padre la había preferido a ella. Ambos se lo hicieron saber y en ocasiones no les importaba dejar la puerta abierta de su habitación o no tener cuidado para tener relaciones sexuales. A ellos no les importaba si eran oídos o vistos por el menor, antes lo hacían con mas desenfreno. Seokjin no lo sabía, pero ambos habían muerto poco tiempo después de haberlo abandonado. Su continuo llanto y dolor le habían hecho doler la cabeza a su tío, quien lleno de enojo pago un sicario para vengarse en nombre del niño y de paso por él mismo porque nunca le consultaron si quería quedarse con él. Solo que nunca se lo diría.
— Jodete! — se puso de pie lleno de furia y salió del lugar.
— Seokjin! — le llamo la señora Kim.
— Lo siento mucho — dijo sin girarse, pues sus lagrimas ya rodaban por sus mejillas. — muchas gracias por todo señor y señora Kim. — dijo y salió rápidamente de la casa.
Seokjin se sentía como la basura que sus padres y su tío le hacían sentir. A pesar de haberle dicho a Taehyung que se jodiera, no quería alejarse de él. lo veía como lo más hermoso e inalcanzable que pudiera tener y empezaba a odiarlo por eso. Corrió desesperado ignorando las advertencias de Namjoon y fue en busca de pelea para desahogarse. Ataco al primer grupo de bandidos que encontró, pero en su ira ciega no se dio cuenta que eran demasiado viejos y experimentados. Recibió una paliza por parte de aquellos hombres que había provocado y que resultaron ser expendedores de estupefacientes como su tío. Así que, no contentos con golpearlo le propinaron algunas puñaladas.
