Un amable, cordíal y sumiso.... ¿JIANG CHENG?

Hay que mostrarle al mundo al nuevo Jiang cheng

Mientras Jin Ling dormía amenamente recostado en el regazo de su tío, siendo mimado como un niño pequeño, los cuatro adultos hablaban acerca de la próxima reunión de sectas. Ya hace un par de años que se habían vuelto a celebrar ese tipo de reuniones. La idea era reforzar las alianzas y fomentar la paz. Era también un momento perfecto para mostrarle al mundo el gran cambio que había tenido el líder Jiang,  o por lo menos eso pensaban dos de los hombres que ahí estaban mientras una sonrisa medio boba se ubicaba en sus labios.

Al cabo de un rato llegó la noche, ya todos debían irse a dormir antes de que el toque de queda les "obligara" a quedarse en el Jingshi. Jiang Cheng cargó a Jin Ling como un niño pequeño y en compañía de Lan Xichen lo llevó hasta la habitación que le correspondía.

Posteriormente, fueron al Hanshi donde se quedaron hablando un par de horas más sobre los planes que tenían. Lan Xichen estaba en las nubes en ese momento, era perfecto, por lo general Jiang Cheng no hablaba tan abiertamente de cosas cursis y melosas. Hablaban de cómo podían ir al pueblo tomados de las manos, ir a un festival juntos, ver las estrellas una hermosa noche y gritarle a los cuatro vientos su incondicional amor.

Jiang Cheng llenó de mimos y besos al líder Lan quien solo reía y acariciaba la suave piel de las mejillas de su futuro esposo, esperando que esa noche nunca terminara. Aun así, el tiempo pasó y ambos quedaron profundamente dormidos sin siquiera haberse dado cuenta.

--

Así pasaron un par de días más. Era extraño para la mayoría ver como Jin Ling no estaba tanto con sus amigos y pasaba más tiempo en el Hanshi con su tío, o ver como Wei Ying también acudía más a ese lugar y no se escuchaban gritos, peleas o cosas similares. El líder Lan por su parte parecía irradiar más luz que el mismo sol, se mantenía distraído en las reuniones y cuando daba clase cometía uno que otro error.

Afortunadamente para todos, o eso creían, llegó el esperado día de la reunión de las sectas. Tal vez la tranquilidad y el ambiente no tan formal de aquella reunión haría que todos se relajaran y volvieran las cosas a la normalidad. Era un evento de gran magnitud, esta vez se haría en Gusu Lan, aunque una gran participación la tendría el clan de Yunmeng Jiang como muestra de apoyo y de la alianza de las sectas por su matrimonio.

La hora de la inauguración tuvo lugar. Los líderes y discípulos de todas las sectas empezaron a llegar, empezaron a saludarse unos con otros, era prácticamente una alegre y cálida fiesta. Los únicos dos líderes que no habían llegado eran Jiang Cheng y Lan Xichen. Según Xichen y Wei Wuxian, eso lo hacían porque en ese evento finalmente se mostraría la fortaleza de su unión, más todos sabían que lo hacían para que el nuevo Jiang Cheng tuviera una entrada triunfal.

Después de unas cuantas bebidas, Lan Wangji se acercó al centro anunciando junto a Wei Wuxian que el líder Lan y el líder Jiang iban a entrar. En ese momento todo el recinto se quedó en silencio, sabían que si alguno hacía ruido en un momento poco propició posiblemente se llevarían una de las miradas matadoras del líder Jiang. Así fue como la tensión fue subiendo hasta que finalmente las puertas del salón principal de Gusu Lan se abrieron dando paso a la feliz pareja.

Por un momento, pareció como si el mundo entero se hubiera detenido y como si todos los presentes hubieran olvidado como respirar. Por esa puerta entró el siempre atractivo e impecable líder Lan Xichen con sus pulcras túnicas y una sonrisa más resplandeciente que la luna o el sol. Eso no era sorpresa, lo que dejó sin aliento a la multitud fue el atractivo joven a su lado. Jiang Cheng entró con la túnica típica de Yunmeng Jiang, pero no con la que usaba constantemente para las caserías, sino que era la túnica del líder para las fechas especiales.

Era una túnica bastante decorada que contaba con tres capas visibles. La primera capa se ceñía perfectamente a su cuerpo mostrando la hermosa figura que tenía. Una cintura delgada, unos hombros amplios, una cadera aparentemente prominente y unas piernas largas. Una segunda capa, a modo de túnica exterior, que se encontraba recargada suavemente sobre sus hombros teniendo la parte superior completamente abierta dejando expuesta la primera capa pero cerrada en la cintura acentuando así esta parte en especial. Finalmente, la tercera capa eran unos hermosos accesorios en tela de oro, era un grueso listón de color oro con bordados de color purpura que caían y se enrollaban grácilmente en los brazos del joven líder, dando la sensación de que volaran con el viento y con el más mínimo movimiento del joven.