D I E C I O C H O

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-¿Por qué no puedo simplemente fingir que estoy fingiendo ser buena para que nadie sospeche? -preguntó Adara.

Era temprano en la mañana y desde que Adara había despertado ninguno de los dos volvió a dormir. Por lo que pasaron su tiempo armando un plan.

-Porque asi no funcionan los hechizos.

Adara, sorprendida, preguntó.

-¿Cómo sabes eso?

Harry suspiró y la miró, y se dió cuenta de que ella parecía interesada en lo que él tenía para decir.

Las cosas había quedado un poco raras despues de que él le dijera la verdad, no estaba seguro de si Adara le había creido, pero estaba dispuesto a arriesgarse.

-En la isla, trabaje un tiempo para el Doctor Facilier. Supongo que aprendí algunas cosas -se encogió de hombro.

-Entonces, ¿Cómo funcionan? -preguntó ahora más interesada-. Los hechizos, quiero decir.

-Solo cumplen su función y ya -Adara lo miró sin entender-. Por ejemplo, las galletas que te dí tenian un hechizo de Maldad. Si hubiese funcionado serías malvada y ya, no puedes controlar lo demás. Todo lo que te importaría es hacer sufir a la gente y cuando Uma te ofrezca dominar Auradon, lo aceptarías sin dudarlo.

-No sé como ser mala.

-Oh vamos! -dijo Harry-. La maldad esta en tu sangre asi como lo estuvo en la de tus antepasados. Hasta que Pan las domestico.

-¿De qué estas hablando?

-¿En serio no lo sabes? -Adara negó con la cabeza-. Las sirenas de Nunca Jamas eran las criaturas más malvadas que existian, hasta Pan les temía. Incluso los piratas, aun que no quieran admitirlo, evitaban toparse con ellas.

-Nunca me habían dicho nada de eso.

-Porque quieren que desaparezca de la historia. En la isla no muchos piratas lo saben, solo algunos de los que estuvieron con mi padre desde el principio.

-¿Tú cómo lo sabes? -preguntó entre curiosa y sorprendida.

-Mi padre me conto algunas historias luego de descubrir que eramos amigos.

Adara se recostó sobre su almohada, procesando toda la información.

-Nunca dejas de sorprenderme, Hook.

Harry sonrió al oirla. Pronto su conversación fue interrumpida por el doctor que llegaba a revisar como se encontraba Adara y determinaría si ya podía irse.

Desues de la revisión el doctor le dió el alta y ahora ambos caminaban hacía la habitación de la chica.

-Oye -Harry llamó la atención de la chica-. ¿Estamos bien?

-Tenemos cosas que hacer -evadió el tema.

Se pararon frente a la puerta de la chica.

-¿Eso que significa?

-Intentaste hechizarme, Harry -lo encaró. Él miró hacia otro lado-. Y no me dijiste quien eras. Eso me dolió.

-Yo tambien estaba dolido, Adara ¿Tienes alguna idea de lo mucho que me importas?

Los ojos de la chica se humedecieron.

- Lo siento, siento haberte hecho sentir asi. Pero no puedo confiar en ti ahora -susurró la ultima parte.

Y ahora los ojos de él tambien retenian las lagrimas.

-Entiendo.

Luego de la corta respuesta, Harry se dió la vuelta y se alejó por el pasillo.

Adara entró en la habitación y se relajó cuando noto la ausencia de Melody. No estaba lista para tratarla mal. Iba directo a tirarse a su cama cuando tocaron su puerta.

Se preparo mentalmente antes de abrir la puerta. Sea quien sea, sería el primero en descubrir el "cambio" de la chica.

Ciertamente no estaba preparada para encontrarse con que esa persona era Ben y que ni bien abriera la puerta él la abrazaria muy fuerte.

-Me alegra mucho que estes bien -le dijo aun abrazandola y ella tuvo que poner de todo su autocontrol para no devolverselo.

Esto le parecio raro al joven rey, quien la miro confudido.

-¿Estas bien? -dijo preocupado-, ¿Te pasa algo?

-Estoy cansada, Ben -dijo más brusca de lo que queria, aun que tal vez era lo mejor.

-Yo... te dejare descansar entonces -dijo algo desanimado y se retiro de la habitación. 

Adara cerró la puerta justo antes de que una lagrima resbalara por su mejilla. Se cambió de ropa y se recostó en su cama donde se quedó dormida. Horas más tarde, unos golpes en su puerta la despertaron. No le importaba quien era, lo echaria. Aprovecharía su mal humor para dar una buena actuación.

Trató de ocultar su sorpresa cuando vió a Uma y Harry al abrir la puerta.

-Uma -intentó sonar indiferente.

-Adara -saludó alegre-. Tengo una propuesta que estoy segura de que vas a aceptar.

Adara echó un vistazo a Harry y luego respondió.

-No me interesa -dijo grosera y luego sonrió falsamente-. Pero gracias.

Iba a cerrar la puerta de su habitación. Sabía que Uma la detendría y le explicaría su "grandioso" plan el cual ella aceptaria, pero tenía que aparentar que no le interesaba nadie más que ella. Esperaba estar haciendolo bien.

Como supuso, Uma puso su pie evitando que la puerta se cerrara por completo. Adara volvió a abrirla con expresión de fastidio.

-¿Acaso no me escuchaste?

-Que irritante te has vuelto -dijo la morena rodando los ojos y empujandola para entrar. Harry entro luego y cerró la puerta detras.

-Claro! Pasen, por favor -dijo sarcastica.

Uma la miró entrecerrando los ojos, pensaba en lo bien que había funcionado el hechizo como para que hasta a ella le fastidie.

-Dominemos Auradon -dijo directa.

Adara la miró con fingida sorpresa y luego sonrió malvadamente, o eso intentó.

-Cuentame tu plan.

-El plan es robar la varita -dijo ella-. Y aunque no me guste admitirlo, te necesitamos.

-Ya sé. Necesitan de mis poderes.

-En realidad -habló Harry acercandose a ella-. Necesitamos que uses esa linda cabecita tuya para desactivar las alarmas.

-Y el campo de fuerza -añadió Adara.

-¿Campo de fuerza? -preguntó Uma.

-Si, ¿No lo sabian? -cuando ninguno contesto, Adara soltó una risa-. Excesivo, teniendo en cuenta que no había villanos.

-Eso solo prueba que no son tan buenos como aparentan -dijo Harry con rencor.

Sin saber porqué, Adara sintió que esa ultima frase era para ella y eso le molesto, aunque él no estuviera tan equivocado.

-Con la varita y tus poderes, nadie podrá detenernos -Dijo Uma acercandose con la mano extendida- ¿Socias?

Adara miro su mano unos segundos y luego a Harry, quien le asintió casi de manera imperceptible, incitandola a aceptar.

-Socias -estrechó la mano de la chica.





Una Sirena de Nunca Jamas/ Harry HookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora