ELLA :: HER- Narcissa Black Malfoy traducción

Sala común

Cahya recuerda el mismo día que vio a Lucius en la sala común Slytherin durante su último año con su compañera de clases, Narcissa Black, por la primera vez.

Entrando al enorme espacio, se sentó en uno de los varios sofás de cuero caros. Al primer vistazo de la chica ante ella, era realmente bella, con ojos tan oscuros como la noche, pero llena de calidez que podía derretir hielo.

Cahya le dio a Lucius, en el sofá opuesto con esta chica, una mirada inquisitiva levantando su ceja izquierda como indicador para que él presentará con quien estaba. Con su cara vacía de emociones, ojos celestes se encontraron con sus idénticos, él se aclaró la garganta.

—Ah claro, mm — murmuró, inusualmente callado para el prefecto normalmente articulado.

—Cahya,¿has conocido a Narcissa Black?— Él sabía que no.

—No, no estoy segura de haber tenido el placer de conocerla. Cahya Malfoy.— ella se inclinó para estrechar la mano de Narcissa, quien le estrechó la mano con entusiasmo y respondió, —encantada en conocerle,— dijo con una sonrisa que se sentía genuina. Mas, por el claro shock que trató de ocultar, se hizo aparente que Lucius nunca había mencionado a su hermana, hasta que escuchó el apellido de Cahya.

Cahya notó la proximidad cercana de la pareja, y que definitivamente era un indicador que eran más que conocidos. Ella se ordenó su pelo tan oscuro como el carbón(perfectamente opuesto al de Lucius, que tenía pelo plateado) para verse ordenada y se preparó para hablar nuevamente, para ver qué tanto podía ella irritar a su hermano por no haberla mencionado antes.

—Me gustaría decir que he escuchado mucho sobre ti, Narcissa, pero mi amado hermano parece haberlo hecho para que yo no escuchase absolutamente nada— la pareja hizo contacto visual por un segundo antes de que Lucius le tirará una mirada perforante a los ojos de su hermana, casi como una advertencia. Lo tomó como un desafío.

Narcissa miró confusa a Lucius luego a Cahya. —Desafortunadamente debo decir lo mismo, Lucius definitivamente no mencionó a una hermana.— Ahora Lucius se veía incómodo, como si estuviese planeando en separar a todos sus conocidos de cada uno, tener vidas separadas, mientras quedándose igual él mismo.

—¿oh?— Cahya dramáticamente preguntó, —estoy segurísima que tuvo que haber sido solo un error, ¿correcto, Luci?— Él odiaba ese apodo que solo ella usaba, y sabía exactamente cómo causar enojo, —Oh, para esta tontería, Cahya, la información simplemente no era relevante en ningún punto de tiempo.— él trató de buscar una excusa pero se dió cuenta que simplemente trataba de fastidiar y avergonzarlo.

—Entonces dime sobre ti, Narcissa Black.— Cahya se recostó en su asiento, relajada e intrigada por el apellido. La más noble Casa de Black, había escuchado que le llamaban. Los Malfoy se sentaron en silencio escuchando la historia familiar de Narcissa, e interesantemente la de una de sus dos hermanas mayores: Andrómeda, siendo exiliada de la familia por tener relaciones con un Muggle.

Cahya se aferró a cada palabra que Narcissa dijo, observando curiosamente a Lucius que se sentaba desinteresado con un brazo alrededor de su acompañante. —¿Entonces cómo conociste a Luci?— Ella preguntó con una sonrisa, él sonrió y sacudió su cabeza por el tormento que le traía ese apodo infantil, —porque se que empezaste en el 66, ¿mismo año que yo, no? Entonces no se han conocido en clases.— Era claro la patética respuesta de haberse visto en la mesa de Slytherin, hablar en los pasillos y luego tener conversaciones en la sala común.

Narcissa, evidentemente exhausta, anunció, —No quiero ser maleducada, pero debo disculparme- ya es algo tarde. Encantada de conocerte, Cahya.

—No te preocupes, anda a descansar. Fue maravilloso conocerte igualmente, Narcissa.

—Buenas noches, Lucius.— Él la miró y sonrió y asintió su cabeza, viniendo de él, es más de lo aparenta.

Ella le sonrió, y se marchó para descansar. Cahya rápidamente reemplazó su asiento de sofá por el asiento junto a su hermano. —Entonces, hermano,¿cómo te sientes?

—¿Sobre qué exactamente?— Actuó como si hubiera sido acusado de un crimen.

—¿Ella?¿Narcissa?— Le respondió ella con un tono tranquilizante para insistirle que no tenía que salir a la defensiva.

—Oh,— suspiró. Él siempre estaba en guardia y atento, e incluso si podía ser muchas, muchas cosas malas, no eran vinculadas. —Ella es... amable, ¿no?— Cahya asintió como respuesta, —Si. Si lo es.—

—Es de sangre pura también.— Ahí está. No esperaba menos de él, para mostrar su ignorancia para arruinar una oportunidad de un buen momento. Pero ella solo dijo estar de acuerdo. Ella aún quería que él fuera feliz.

—Como si tu te conformaras para algo menos de sangre pura,— bromeó, escondiendo el tono insultante que ella solo podía soñar en usar. Él liberó una pequeña risa e inclinó su cabeza donde su pelo le había tapado la vista. Era un momento raro, considerando la manera de ser de él, pero fue placentero para ambos. Ella no estaba segura que tanto tiempo podía seguir fingiendo, entonces optó por disfrutar los momentos que podría tener con su hermano.

-

Cahya regresó a su cuarto. Curiosamente, cuartos compartidos no eran requerimientos si tienes una fortuna que gastar, como los Malfoy. Ciertamente no era equitativo o justo pero al menos tenía su propio espacio.

Echó llave a su puerta, y prácticamente se tiró a su cama, exhausta. Acostada en su espalda, ella simplemente se dio permiso de deslizarse en un pensamiento profundo, particularmente curiosidad sobre la chica que acababa de conocer en la sala común.

Narcissa parecía especial. Cahya era incapaz de formular una oración que explicara la razón por la cual Narcissa se sentía como una persona de significancia, de un modo.