Capítulo 11: Una Venganza Y Un Adiós

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...Jiang Cheng...


– Jiang Wanyin ¿Qué tienes? Desde hace un momento estoy hablando contigo pero parece que no estás aquí – aunque Xichen no me haya visto lo vi hablar con su amante y ahora más que nunca me sentía más indignado pues el osaba celarme con Wen Xu pero el aún se veía con un simple sirviente por esa razón lo puse a prueba pues no pensaba darle una oportunidad de arruinarme a alguien que ya estaba enamorado de otro omega, por esa razón desde hace un momento estaba observando como ese sirviente tocaba el guquin con maestría irritándome puesto que mi habilidad con dicho instrumento era fatal – discúlpame, es solo que estoy algo cansado, creo que me iré a dormir, despide a todos por mí – me levante y fui a buscar un vaso con jugo de arándanos dispuesto a hacer mi movimiento así que camine directo a donde ese sirviente se encontraba sentado y con toda la maldad y furia que tenía acumulada en ese momento derrame furiosamente el contenido del vaso en el rostro de ese omega sintiéndome totalmente satisfecho con los ojo que miraban la escena, Lan Xichen apareció rápidamente – ¿¡qué haces!? Wanyin porque lo hiciste – Lan Xichen busco rápidamente su pañuelo y empezó a limpiar la cara de un Mengyao que empezaba a llorar lágrimas de cocodrilo, pero en un momento rápido sin que Xichen se diese cuenta me sonrió con malicia y maldije en mis adentros, la gente empezó a murmurar y me sentí humillado e incómodo – solo le doy su merecido a este arribista que te sedujo para que rompieras nuestro compromiso, tu aun estás enamorado de él, Xichen acaso no te das cuenta de que me sentí totalmente humillado estos días mientras tú te veías con este-este sirviente – la gente estaba conmocionada por lo que estaba sucediendo – Xichen saca al joven Wanyin de aquí, en estos momentos no está pensando racionalmente así que sácalo – Xichen miro a Mengyao que se mantuvo en silencio todo el tiempo disimulando muy bien su inocencia a provocarme – tranquilo, yo estaré bien ahora vete – sin más tome a Wanyin del brazo y lo hale rápidamente antes de que todos vieran el espectáculo que solo los que se encontraban cerca vieron y lo lleve lejos al Hanshi, mi habitación personal – ¡que me sueltes! ¡Suéltame Xichen! – Jiang Cheng se encontraba forcejeando para soltarse de mi agarre pero si lo permitía estoy seguro que volvería al gran salón a formar un escándalo – ¡suéltame! Aun no termino de hablar con ese sirviente, ya me las pagara, vas a ver así como tú has perdido cara esta noche él también debe de perder algo – no podía retener a Jiang Cheng era demasiado fuerte así que rápidamente lo arroje dentro de la habitación y cerré la puerta con un hechizo protector – cálmate, Wanyin escúchame por favor, sé que no estuvo bien lo que hice pero quiero que sepas que en verdad te quiero y no quiero perderte, pero lo que has hecho tú también estuvo mal, Mengyao no tiene la culpa de mis acciones – Xichen trataba de retenerme por los brazos pero yo seguía forcejeando – ¡deja de defenderlo! El solo es un arribista, por dios hasta cuando lo defenderás – empuje fuertemente a Xichen haciéndolo retroceder sobre sus pasos – discúlpame, en verdad te pido disculpas por todo, después de todo yo te trate mal, te humille y te seguí traicionando aun estando comprometidos en verdad lo siento – Xichen se derrumbó a llorar y me sentí arrepentido de lo que hice, mi omega rogaba por ir a su lado y eso fue lo que hice, dejando mi orgullo de lado me arrodille junto a Xichen y lo sostuve en un abrazo – yo también me disculpo contigo Xichen, actué guiado por mi orgullo y te hice perder cara ante algunas sectas, en verdad lo siento – Xichen levanto su rostro y paso un pulgar por mi mejilla, sin haberme dado cuenta estaba llorando y las lágrimas se deslizaban por mis mejillas – en verdad eres hermoso Wanyin – lentamente se acercó y deposito un suave y dulce beso en mis labios que lo correspondieron inmediatamente siguiendo el ritmo el cual iba subiendo de tono a medida que pasaba el beso y para cuando me fui a dar cuenta ya me encontraba sentado a horcadas sobre Xichen gimiendo mientras frotaba mi trasero contra el miembro de Xichen y mientras mi cuello era succionado y besado con pasión – Xi...Xichen para, nos pueden encontrar – Xichen me observó el rostro para luego acunarlo entre sus manos – en verdad eres tan hermoso, Wanyin creo que me eh enamorado de ti – tal vez fuera por el momento pero con solo esas palabras sentí que moría de felicidad y me lance a besar esos labios a los que me había vuelto adicto enredando mi lengua con la de Xichen – yo también creo que me enamore – con esas palabras Xichen comenzó a devorar mi boca y acariciar mi cuerpo con desesperación haciéndome gemir y jadear – lo..lo siento...no me puedo controlar – lo observe con las mejillas sonrosadas observando cómo se desataba su cinta de regulación y procedía a dármela ¿dármela? No en realidad estaba atando mis muñecas con ella – discúlpame, si no puedo contenerme – con solo esas palabras me dio vuelta y empezó a retirar mi ropa salvajemente dejándome desnudo en poco tiempo, comenzando a acariciar mis nalgas y mi cuerpo sin pudor pellizco mis dos botones mientras rozaba mi entrada por sobre su propia ropa sacándome sonoros gemidos, empezó a besar mi espalda al tiempo que simulaba embestidas brutales – ahh...Wanyin te deseo... ya quiero estar dentro de ti, en verdad te deseo – continuo de esa manera mientras se desvestía poco a poco y tomo mi miembro para empezar a mover lentamente de arriba abajo llevándome a la locura – mnhh...mas...quiero... mas ...quiero sentirte más Xichen – Xichen siguió moviendo su mano de arriba abajo pero ahora más rápido pero de pronto se detuvo haciéndome gruñir en protesta a lo que el soltó una pequeña sonrisa – A-Huan – yo estaba desconcertado por lo que dijo – ¿Qué? – Xichen sonrió aún más por la ternura que le causaba Jiang Wanyin – llámame A-Huan por favor – me sonroje porque sabía que significaba, era su verdadero nombre así que con toda la vergüenza del mundo – A-Huan...por favor te lo pido no me hagas esperar más – Xichen me miro y luego sonrió e inserto un dedo entre mis nalgas, aunque yo lo pedí me estaba doliendo como la mierda, hasta que lo empezó a mover y empecé a gemir por el estímulo, mientras ese dedo entraba y salía de mi apretada abertura llegando cada vez más lejos – mas...mhn...mas – inserto dos dedos más haciéndome retorcerme del dolor – sa...sácalos A-Huan...sácalos – observe a Xichen quien al parecer estaba sumergido en la lujuria metiendo y sacando sus dedos al tiempo que con su propia mano se daba placer pero de un momento a otro me voltio – lo siento mucho...pero... no puedo más – y sin previo aviso se abrió paso en mi interior con fuerza a lo que yo solté un grito algo ahogado por los labios de Xichen quien se quedó quieto en su lugar hasta que me acostumbrara a su gran tamaño, de un momento a otro se empezó a mover lentamente atrás y adelante hasta que dio en cierto lugar y mi cuerpo se sacudió del placer – ah...ahí...mas...– sin más empezó a golpear ese lugar con su gran maso al tiempo que yo gemía y jadeaba sin control debajo de este gran hombre quien me tocaba y besaba dejándome marcas al tiempo que embestía brutalmente mi punto dulce haciéndome delirar del placer – ah...ah...siento que es...estoy a punto...– nuestras respiraciones eran erráticas y descontroladas, estábamos a punto de venirnos y sentí como empezó a oler mi cuello buscando mi glándula omega – no...no me...vayas a morder – sin previo aviso me vine empezando a disparar chorros de mi esencia apretando a Xichen quien prontamente también se vino dentro de mí por la presión y sentí el nudo anclarse dentro de mi preocupándome de repente pero a la vez haciéndome sentir lleno y cálido y lo próximo que vi fue todo negro, caí en la inconciencia.

Un Omega IndecorosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora