𝑻𝑴𝑵𝑻 ➼『 ¿𝐌𝐢 𝐡𝐢𝐣𝐨? 』

Capitulo 14

Al fin llegó la mañana, ya estaban listos para subir al avión que los llevaría de regreso a casa, claro que no falto la parada de comprar donas que tanto le fascinaron al más pequeño. Saki y sus dos subordinados se asintieron mutuamente una vez la tortuga ya estuvo arriba del avión, asegurándose de no olvidar nada para después subir también. A los minutos el vuelo comenzó. 

Leo: ¡Ya quiero saludar a todos! —Se removió en su asiento alegremente.— ¿Y si los llamamos?

Saki: No será necesario hijo, ya están enterados de que vamos en camino —Le regalo una sonrisa para después volver a ver su computadora.— Ahora calla y come donas 

Leo: ¡Oye! —Hizo un puchero pero pronto rio.— Si comeré pero no seas así

En la guarida del pie; Bebop y Rocksteady corrían por los pasillos de la guarida con una bandeja de cupcakes en las manos del jabalí, estaban organizando una pequeña bienvenida pues apenas y habían sido invitados a las únicas tres llamadas que hubo con su jefe y el jefe jr. Al entrar al salón principal ambos se tropezaron entre si y cayeron al suelo, la bandeja salió volando para así ser atrapada ágilmente por el lobo quien no dudo en comerse uno.

Bradfort: ¿Se dan cuenta que aun faltan dos horas para que lleguen? —Colocó el plato en una mesa y después los miró divertido.—

Bebop: ¿¡Qué!? —Se levanto indignado.— ¡Xever nos dijo que ya habían llegado! 

Rocksteady: Nos vieron la cara, camarada Bebop —Se quedo en el suelo, levantando uno de sus brazos en queja.—

Xever: No me sorprende que cayeran —Apareció recargado en la puerta con una divertida sonrisa.—

Bebop: ¡Eso no se hace! —Ayudo al rinoceronte a levantar para después cruzarse de brazos.—

Bradfort: Ya cállense —Le dio un empujón al pez, sonriendo divertido.— El lado bueno es que ya esta todo listo 

Xever: Y volvemos a la seguridad —Rodó los ojos fastidiado.— Que no se ve para nada sospechosa

Rocksteady: Es para proteger al jefecito —Colocó sus manos en su cintura.— Los Hamato aun no se rinden, camarada  

Xever: Si se hubieran atrevido a atacar en estos días los hubiéramos aniquilado —Chocó su puño contra su palma.— Y nos dejaran en paz de una vez

Bradfort: No es tan fácil, brocheta mal hecha —Gruñó irritado por la actitud del pez.—

Xever: Si claro, entonces espero que Destructor sepa lo que esta haciendo —Se cruzó de brazos, desviando la mirada.— Leonardo podrá no tener memoria pero no es tonto

Bebop: ¡Eres un pesado, amigo! —Lo apunto con el dedo, molesto.— Lo sabemos ¿¡Pero que necesidad de mencionarlo!?

Xever: ¡La necesidad de que no nos odie de nuevo! —Enderezó su postura, mirando a cada uno.— ¿Todos pensamos eso, no? 

Fue inevitable que los rostros de todos no reflejaran una respuesta afirmativa hacia esa pregunta, si eran sinceros consigo mismos, lo habían pensado. Leonardo los hizo ver un lado suyo que no creían tener y, además, se hizo una parte muy importante del clan, ya no le daban vueltas al asunto de cómo a quien consideraron alguna vez su enemigo ahora lo querían proteger y matar a cualquiera que le hiciera daño. 

La sala se mantuvo en silencio, Xever decidió salir un momento y dejarlos con sus pensamientos, el pez no dijo aquello con la intensión de poner tensos a sus compañeros pero si pensaban igual que él, podrían pensar en algo o incluso hablar directamente con su líder al respecto. Hacerlo más que nada para que el pequeño mutante no se sintiera encerrado, eso no era malo ¿Verdad?