𝑻𝑴𝑵𝑻 ➼『 ¿𝐌𝐢 𝐡𝐢𝐣𝐨? 』

Capitulo 17

Donnie y Rockwall corrían por los pasillos de la guarida, revisando cada habitación que se les atravesara. El mono usaba de vez en cuando su poder en su intento de sentir la presencia del menor, lo que conseguía pero en otro lugar, la jaqueca insoportable se hizo presente. Pasos se escucharon venir hacia ellos a lo que se detuvieron, colocándose a manera de pelea y viendo llegar a sus adversarios.

Bebop: ¡Ustedes no deberían estar aquí! —Su tono bromista desapareció, ahora era furioso que no se contuvo en lanzarse a atacar.—

Baxter: ¡Largo! —Por primera vez, estaba dispuesto a pelear con todo lo que tenía.—

Donnie: ¿Por qué tanto miedo? —Sonrió victorioso, dándose cuenta de que tenían razón.— ¡Ya no lo oculten más!

Rockwall: Lo tengo, Donatello —Le susurro a la tortuga, sonriendo después hacia los enemigos.— Terminemos esto de una vez

El terrible dolor de cabeza había hecho a la tortuga sentirse nuevamente mal, el mareo fue insoportable que termino cayendo al suelo, quería levantarse pero otros dos pinchazos lo hicieron quedarse de rodillas, respirando pesado. Le dolía, le dolía mucho, se suponía que ya estaba mejor, entonces ¿Por qué otra vez?

Leo: Bas-basta... Por fa-favor, y-ya bas-basta —Soltó un quejido, una lagrima de dolor rodo por su mejilla.— Pa-pá... —Su voz sonó débil y entrecortada, suplicante.—

Los sonidos de afuera le preocupaban, al escuchar un grito de dolor por parte de el rinoceronte fue que intento levantarse otra vez, tenía que hacer algo. Una voz se le hizo conocida pero no era de ninguna de su familia, era del hombre que atacó con anterioridad la guarida. Otro dolor fue suficiente para que cayera nuevamente al suelo, extendiendo su brazo hacia la salida y lo ultimo que el pequeño reptil vio fue unas sombras tras la misma, después de eso, todo se torno negro.

Baxter se maldecía internamente, el esbelto había sido capaz de taclearlo y dejarlo atontado cuando de repente sintió el peso de su compañero sobre él, Bebop estaba inconsciente por los poderes del mono. Les habían dado batalla pero no fue suficiente para detenerlos que terminaron en el suelo, viendo pasar a sus enemigos cómo si nada en el resto del pasillo, a duras penas se quito al jabalí de encima y lo comenzó a mover.

Baxter: ¡Despierta, idiota! ¡Van por él! —Zumbó desesperado, dándose cuenta que aquellos mutantes ya no estaban.— Nonono ¡NO!

La puerta de la sala de entrenamiento ya estaba frente a los mutantes, el ninja de morado la abrió sin ningún problema y corrieron un poco al adentrarse a la misma. Los ojos de Donatello se humedecieron al ver el cuerpo inconsciente de su hermanito, ahí estaba su hermanito, que no demoro en dejarse caer de rodillas junto al mismo y tomarlo con cuidado entre sus brazos, abrazándolo y sollozando un poco. Lo tenían, de verdad lo tenían.

Donnie: A-aquí estas, aquí estoy, ya lle-llegamos —Arrulló al de azul, soltando una entrecortada risa.— Te sacaremos de aquí 

Una vez se calmo, se aseguro de que el menor estuviera bien y lo estaba, lo tomó entre sus brazos y salió junto al mono quien se adelanto para cubrirlo de cualquier ataque o si los otros dos mutantes volvían, Rockwall noto las vendas y el equipo que tenia puesto el de, ahora, cinta azul oscura pero no era momento de mencionárselo al esbelto pues lo principal en ese momento era escapar.

El jabalí recupero el conocimiento y sin perder tiempo volvió a levantarse, apenas corrieron cuando se encontraron de nuevo con los otros dos mutantes. Su miedo y preocupación creció al ver a Leonardo inconsciente en los brazos de Donatello, pronto esos sentimientos se volvieron ira, atacando sin piedad con tal de que el ojizafiro estuviera con ellos.