Epílogo

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Luego de haber huido de con la ayuda de una nave de fuga de Vanaheim, Thor había descubierto de que su padre al parecer no estaba cumpliendo su labor de rey puesto que ahora Vanaheim había sido tomado por criminales y por ello estaban escapando a Asgard. Sin embargo, el Dios del Trueno no podía esperar y llamar a Heimdall se le hacía más fácil para no solo transportarse a él, sino a todos.

– ¡Heimdall, hasta que al fin me haces caso! – exclama Thor ya que había pasado media hora llamándolo y quedando en ridículo con los vanaheimses – ¡No tengo la menor idea de que paso contigo, pero...! – gritaba hasta que de repente el Bifrost solo cae para absorberlo a él – ¡Heimdall! ¡Espera faltan ellos! – intenta detener el Bifrost con sus truenos, pero es en vano – ¡Heimdall!

Thor deja de gritar cuando nota como si el Bifrost lo no estuviera llevando hacia lo más alto de los nueve mundos, que era donde estaba Asgard, sino que pareciera que lo estuviera arrojando a lo más profundo.

– ¡Auch! – grita adolorido cuando cae precipitadamente en un suelo polvoriento y oscuro – ¡Heimdall...! – iba a hablar más se calla al darse cuenta que estaba en Muspelheim – ¡Heimdall mándame al Bifrost de nuevo! – pide mientras empieza a correr del inmenso dragón de fuego que resguardaba el viejo castillo de Surtur – ¡Heimdall!

Agita su martillo para empezar a volar, pero se ve atado por varias cadenas que son lanzadas hacia él para atraparlo. Furioso invoca un gran trueno para destruir las cadenas y huir de ahí riéndose de los demonios de Surtur, quienes no lo pudieron atrapar. Pero sus risas se callan cuando él torpemente al no ver por dónde iba se choca con una gran montaña, haciendo que se golpee la cabeza y pierda la consciencia.

– Tráiganme al hijo de Odin – les ordena el Rey a todos los demonios de fuego de Muspelheim – Lo aprisionare, así como su padre me aprisiono

Parecía una ironía del destino del destino que hace siglos Odin lo haya dejado ahí rendido y adolorido, y que ahora él, Surtur, tuviera al hijo de este rendido y adolorido. Finalmente, todo estaba a su favor, todo gracias a que el Dios de las Mentiras remplazo al Padre de Todo en Asgard.

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En uno de los laboratorios más importantes en Hala, la capital del Imperio Kree, se encontraba el famoso escuadrón de guerreros kree "Star-Force". Viendo con satisfacción como finalmente habían logrado capturar a su nueva "arma".

– ¿En verdad creíste que iba a ser así de fácil venir a cobrar venganza, Vers? – le cuestiona Yon-Rogg a una dormida Carol Danvers, quien se encontraba en una camilla, atada de piez y manos mientras que mantenían conectado a su cerebro uno de los más importantes artefactos kree

Un borrador de memoria. Aquel que aseguraba con efectividad que las personas útiles de otras razas que gobernaban, quedaran sin memoria para así ellos poder manipularlos. Una idea que salió de ese mismo escuadrón al no haber podido capturar hace décadas a Vers, pero ahora finalmente veían como el artefacto indicaba que...

"Memoria al 0.00%. Base de datos del 100.00% borrada. Persona sin memoria"

Sonriendo orgulloso Yon-Rogg no duda en desconectar a la mujer del artefacto, al igual que hace el resto quitándole las amarras de los pies y manos. Sin notar como la rubia por unos instantes había sonreído, los hombres kree no eran tan perceptivos, pero las mujeres sí.

– ¿Seguro que funciono, Yon-Rogg? – le pregunta Min-Erva a su comandante puesto que sabía de las capacidades intelectuales y físicas de la mujer

– Nunca dudes de los métodos kree, Min-Erva – la regaña el kree para finalmente tomar en sus brazos a Vers – La llevare a que comulgue con la Inteligencia Suprema, ustedes prepárenle una habitación y sus trajes – ordena a su equipo quienes asienten con la cabeza – Ahora será una de nosotros

El comandante kree siempre confió de sus aparatos tecnológicos, había esperado tanto ese momento que el sobreorgullo lo llegaba a cegar. Olvidándose e ignorando también que Carol Danvers ya no tenía memoria que perder, porque de su pasado recordaba muy poco y que si había sobrevivido por veintisiete años en coma, podía ser lo suficientemente fuerte para soportar ese supuesto "vacío de memoria" que le hicieron.

Para sus adentros la rubia sonríe puesto que, si bien se iba a vengar de ellos, primero debía de conocer todo lo que estos sabían, tenían y hacían. Solo con aparentando ser una de ellos podría vencerlos y entender su pasado para así, recuperarlo y volver a ser la Carol Danvers que siempre fue.

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Y ahora si oficialmente doy por terminada esta historia jajaja aunque obviamente con la ultima escena postcreditos entenderán de que hay una continuación y sip, ya acabo de publicar el prologo del segundo libro de esta loca linea del tiempo que me invente jajaja se llama "Capitana Marvel U.A.". Vayan a leerlo que hay unos cameos que les encantaran. 

Civil War U.A. - Capitana MarvelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora