Hidra

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Haechan ya tenía todo preparado, estaba más que listo para confesarse.

No había querido hablar con Sungchan por los nervios y la vergüenza que poco a poco se colaba en su cuerpo. Por ello aunque sonara estúpido o infantil le había pedido a Renjun que el fuese quien le enviara un mensaje citándolo, pero Renjun como el buen mejor amigo que es, se había negado, así que no le quedaba de otra que ser él quien lo invitara.

Estuvo dudando mucho para solo enviarle una simple invitación pero después de tanto pensar en ello se le ocurrió una mejor idea, quizás sería demasiado cursi pero le gustaba más que simplemente enviar un mensaje; Y si Haechan escribió toda una carta, era más que una simple invitación, era casi como un spoiler de lo que ocurriría, en la carta más que nada explicaba que estaba agradecido por todo lo que el menor había hecho por él y su mejor forma para agradecerle era invitarlo a una cena, eso era todo, la dirección del lugar y el nombre de quien le envió.

Haechan se sintió como en una película de espías, cuando fue a dejar la carta al casillero de Sungchan, veía a todos lados, asegurándose de que nadie lo viese y sus nervios lo volvían loco, casi se equivoca de casillero cuando escucho unos pasos a lo lejos, pero se dio cuanta a tiempo y simplemente dejo la carta en el casillero del menor, esperando que el la leyera y asistiera, sin más prácticamente salió corriendo de ahí como si lo estuviesen persiguiendo.

Trato lo más que pudo en disimular su felicidad, intentaba calmarse y no sonrojarse cada vez que pensaba en lo que iba a hacer, de solo imaginarse a si mismo, la vergüenza se expandía en su rostro y el ya tan conocido sonrojo aparecía, incluso Yangyang le pregunto si se sentía bien y fue casi imposible negar su felicidad cuando le respondió, trataba de controlarse pero no podía, parecía un adolescente, sus emociones eran fuertes y le costaba esconderlas.

Casi toda sus clases se la paso distraído y se obligaba a si mismo a prestar atención a las clases pero no podía y a la hora del receso, cuando vio a Sungchan sintió que se moría, era todo tan confuso que ni siquiera supo por que fue tan cobarde y salió corriendo a esconderse.

Al terminar sus clases, salió lo más rápido que pudo del salón, todos los del salón estaban muy sorprendidos, ya que prácticamente Haechan era uno de los que salía del ultimo al quedarse guardando sus cosas con calma, de seguro tenía algo urgente que hacer después de clases o surgió alguna emergencia y por ello su prisa, pero en realidad Haechan solo quería estar listo a tiempo.

Sabía que aunque prácticamente ya tenía todo listo, él y su inseguridad le harían dudar y se tomaría su tiempo, quería estar listo antes de la hora acordada y no llegar tarde.

Estaba más que listo, había tomado la ducha más larga de su vida, pero quería estar totalmente limpio, lavo su cabello dos veces,  cepilló sus dientes tres veces, luego de ello se vistió con lo que había comprado y se tomó su tiempo al arreglar su cabello, incluso uso un poco de maquillaje, delineo sus ojos y puso un poco de bálsamo en sus labios, eligió cuidadosamente sus accesorios, uso su perfume especial, ese que solo usaba cuando la ocasión lo ameritaba, parecería exagerado pero incluso colocó un poco de esa crema hidratante con brillitos en su cuerpo.

Lucia increíblemente bien, parecía un modelo e incluso un idol, todo estaba bien, todo estaba listo, solo debía tomar sus cosas y dirigirse al lugar de la cita, quería salir con tiempo para prevenir el trafico o cualquier inconveniente que pudiese surgir, le sorprendió el que Renjun no estuviese en casa pero no le tomó mucha importancia y simplemente se dedico a pensar en formas para calmar sus nervios y pensar en temas de conversación, cosas que pudiese preguntar y en su caso contestar, con una sonrisa en su rostro abrió la puerta de su casa.

Pero jamás, nunca, ni por un segundo esperaba encontrarse a Mark ahí.

Fue como un balde de agua fría cayendo sobre él. El verle así, en ese estado, el verle de nuevo, después de tanto tiempo ignorándolo, mentiría si dijese que se sintió feliz al verle, se sentía más que sorprendido, incluso por un instante sintió miedo de su presencia.

No sabía que decir, como actuar su mente por un momento se quedó en blanco, pero tenía algo mejor que hacer que simplemente quedarse ahí a observar como Mark parecía juzgarlo con la mirada, como le dedicaba esa extraña mirada que no sabía como definir.

Cuando Mark avanzó un paso más cerca de él, no retrocedió, ni siquiera se movió un poco, su antiguo yo lo hubiese hecho, pero ya no era el mismo Haechan y Mark tampoco, así que no tenía porque dejar que Mark viniese y arruinase sus planes, pensaba simplemente ignorarlo. Pero Mark habló.

Haechan- dijo con un tono de voz totalmente desconocido para Haechan-

NO! Mark, no digas nada, simplemente vete- dijo cerrando la puerta tras de si.

Haechan escucha- dijo tomando el brazo del menor para evitar que se fuera.

En otro momento- dijo intentando soltarse de agarre cuando sintió que se volvía más fuerte- tengo algo importante que hacer.

Pero Mark ni siquiera escuchó, más bien no le importaba, solo quería que Haechan le escuchase. Mark parecía no darse cuenta de que cada vez que intentaba arreglar las cosas, simplemente las arruinaba aun más.

Tienes que escucharme- dijo  totalmente serio.

Hoy no, tengo algo realmente importante por hacer- dijo logrando soltarse del agarre.

¿Más importante que yo?- dijo alzando una ceja.

Si- fue más que clara y segura la respuesta del menor.

¿Qué es más importante que yo?, dime Haechan- su molestia empezaba a colarse en su tono de voz.

Muchas cosas, Mark- para ese momento Haechan lo único que quería era que mágicamente Mark desapareciera.

¿Cómo ir a verte con Sungchan?!- sonaba más a una afirmación que una pregunta.




Let's play (2chan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora