Tierra

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Sungchan estaba impresionado, la voz de Haechan era muy hermosa, cuando hablaba era linda pero escucharlo cantar era demasiado perfecto, debía concentrarse en el camino pero la distracción era demasiado hermosa como para ignorarla.

Haechan por si solo había empezado a cantar, era como algo automático cada vez que escuchaba esa canción, y se sorprendió aun más cuando Sungchan se le unió, había pensado que todo el camino sería silencioso, pero no fue así, después de cantar unas canciones, platicaron y se contaron chistes, pero el nerviosismo de ambos no desapareció.

Al llegar a la casa, Sungchan se bajo antes y le abrió la puerta, esta vez agregando un "bienvenido Sr Lee" con un tono demasiado gracioso como para contener su risa.

A entrar se sintió nervioso, no sabía como comportarse, conocía a los padres de Sungchan pero solo los había tratado por videollamadas, esto era algo diferente, pero debía dar una buena impresión y tampoco era como si se fuera a comportar mal.

Bienvenido- dijeron al unísono los padres de Sungchan

Gracias- Haechan no sabía que decir, por ello prefería solo hablar cuando fuese necesario.

Esperamos que nuestro Sungchanie no haya hecho nada para incomodarte- habló su madre

No, él no ha hecho nada de ello, de hecho...- no pudo terminar por la interrupción de alguien

O peor aun, hablarte mal de nosotros- continuó su padre- no somos malas personas Haechan, ni mordemos si eso te preocupa, puedes tener más confianza con nosotros y hablar de lo que quieras.

La cena transcurrió en Sungchan intentando desviar el tema de sus padres, cada vez lo exhibían aun más, contando cosas demasiado personales para él, incluso le mostraron a Haechan fotos de él cuando era bebe.

Haechan se sentía realmente cómodo con la compañía de Sungchan, pero tenia una duda existencial entre si agradecer o no el que sus padres los hayan dejado solos, sus nervios aumentaron bastante pero la comodidad que Sungchan le brindaba lo hacía olvidarse por momentos de ellos.

Ambos estaban con los mismos nervios y pensamientos, querían hablar sobre muchas cosas y al mismo tiempo disfrutar del silencio y la compañía, eran dos tontos con sentimientos por el otro, pero la diferencia estaba en que uno tenía claro lo que quería y el otro no.

Los segundos pasaron convirtiéndose en minutos y los minutos en horas, hasta que fue lo suficientemente tarde como para que Haechan regresará a su casa.

Sungchan sabía que debía ser paciente pero no aguantaba más, el ver a Haechan así, a su lado disfrutando, solo hacía que le gustase más, no esperaría más, tendría que hablar con Haechan y confesar sus sentimientos.

Haechan tenía muchas emociones juntas y le aterraba, mientras iban de regreso a su casa pensaba en todo lo que estaba pasando, en la compañía de Sungchan, sus sentimientos y en como resolver todas sus dudas, admitía que le encantaba pasar tiempo con él, pero no quería ilusionarse y que la historia se repitiera, no quería volver a pasar por lo que pasó con Mark. Sungchan no tenía la culpa, pero su miedo a ser rechazado podía más, por ello no pensaría más en ello y dejaría sus pensamientos de lado, lo único que debía importarle ahora era regresar al equipo de hockey.

Puede que sus planes fuesen interrumpidos y le hicieran dudar.

Al llegar Sungchan lo llevó hasta la puerta de su casa y antes de ser interrumpidos nuevamente por su madre habló.

Haechan, realmente te ves hermoso hoy, de hecho todos los días- estaba demasiado nervioso pero debía hablar.

Sin esperar alguna reacción o respuesta por parte de Haechan, lo besó, aunque solo fue un simple choque lo hizo.

Me gustas- dijo para darse la vuelta y retirarse, más bien huir de ahí, dejando aun Haechan en shock y con sus ideas y pensamientos aun más revueltos, pero a pesar de su negación el sonrojo en sus mejillas solo delataba algo que él no quería aceptar.







Let's play (2chan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora