Estrellas Sin Brillo

Sanado (Zed)

-¿¡Neutranurse, podrías sanarnos a los tres!? Tuvimos un accidente- Menciono con algo de preocupación Syndra hacia la guardiana peli-menta; recuerdo haberla visto en la batalla de Noxus, pero no recuerdo que ella haya hecho algo relevante.

"Al menos escuchaste lo que dijo esa chica; al perecer ella puede sanar heridas"

-Pero aun no sabemos que tan bien puede sanar; se que ustedes pueden curarme, pero el proceso es lento. Quizás ella sea igual en ese aspecto que el traje de ora.

Me quede en silencio mientras observaba a la guardiana de cabello verde, en el refugio del instituto se encontraban las guardianas de Runaterra, no estaban protegiendo a la gente, simplemente estaban haciendo de entretenimiento para los civiles.

Tanto poder y lo desperdician en algo tan estúpido...

Me percate de una chica que puede hacer luz con las manos, el chico de cabello azul y sus desplazamientos espaciales, "Havoc" "Phoenix" también estaban siendo parte de la fiesta, la gente se mostraba maravillada ante ellas, para mi no eran más que enemigas a destrozar.

Mientras observaba la fiesta del refugio me encontré con un espejo que reflejaba mi figura, y el "Zed" que se mostraba reflejado tenía una apariencia sombría y ojos azules, contrarios a mis ojos carmesí.

Recordé la situación que se presentó escasos minutos atrás, no sé cómo lo hice, pero; mi reflejo sombrío se movió sin que yo lo hiciera. Me moví un poco y noté como mi reflejo también lo hacía.

Concentre mis energías ignorando el dolor que sentía debido a las múltiples puñaladas del payaso, tratando de que el Zed reflejado en el espejo se moviera sin que yo lo hiciera.

No conseguí nada, de hecho, me sentía un poco más adolorido por tratar de hacer eso. Me concentre tanto en mi reflejo que ignore la música, y la gente alrededor mía.

"No estas listo..." Susurro la voz que ahora parecía provenir del Zed sombrío en un tono apenas audible.

De la nada sentí como una mano se acercaba a mi cabeza y en un acto reflejo la detuve. Era la chica peli-menta quien amenazaba con tocarme con sus manos que expedían un brillo verde cegador.

Kayn y Syndra me miraron extrañados, pero no pueden culparme. ¿Quién en su sano juicio se dejaría tocar por una mano que expulsa energía brillante? Además de que esa chica es horrible...

¡Tiene un cuerno saliendo de su frente!

¡IM-PER-FEC-TA!

-¿¡Ocurre algo!?- Pregunto con preocupación la chica pelimenta al ver que detuve su mano y la alejaba cada vez más de mi cabeza.

-N-No pasa nada... e-el... es así, desconfía mucho de todas las cosas- Menciono Kayn en un tono apenas audible debido a la música.

-Vamos... ¡no pasa nada! observa esto: "Inyección Astral"- Con sus manos envueltas de energía brillante toco la cabeza de Syndra, iluminando su cuerpo por un breve instante.

Cuando hizo eso, la herida en la mano de Syndra se cerro de inmediato, sin dejar marca prácticamente y a decir verdad era una técnica cuanto menos impresionante.

-No está nada mal...- Halago Kayn cruzado de brazos elevando la voz lo suficiente para que lo escucháramos.

-¿Ahora quieres que te sane?- La chica pelimenta ahora se dirigía a mi con sus manos expulsando un brillo verdoso radiante que me seguía sin parecer seguro.

A pesar de eso, deje que esa imperfecta chica cornuda me tocara.

-"Inyección Astral"-

Un sentimiento cálido recorrió mi cuerpo en su totalidad, el dolor que sentí por las puñaladas de las dagas del payaso se estaba disipando rápidamente, y experimenté un cosquilleo en la zona de mis costillas.