[Loki& Tú] [Edición lenta]
Qué pasaría si después de prometerse amor por toda la eternidad Sir Thomas Sharpe y Edith Cushing se reencuentran en otro mundo. En otra realidad...
Todo era un caos con el incidente de Thanos, 5 años han pasado desde que...
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Capítulo 2 "El lugar secreto"
Tanto tiempo buscando este lugar y al fin lo encontré.
Desde la ventanilla del taxi miraba el edificio de las instalaciones de los Avengers, más precisamente del famoso Tony Stark. Era difícil decir su nombre por la gran pérdida que sufrió esta ciudad, no solo está ciudad si no todo el mundo.
Bajé del coche y observé a mi alrededor con curiosidad -ya que todo estaba en reconstrucción- los jardines estaban algo dañados pero faltaba poco para que todo estuviera como la primera vez que lo mire en una revista. Cuando entre mis ojos captaron una figura que estaba en el mostrador-recibidor. Ahí supe que era ella, la que tanto estaba rogando por encontrar. Aunque vestía con ropa civil, su cabello rojo reflejado por la luz que entraba por las ventanas fue el detalle que me hizo saber que era ella; Wanda Maximoff. Me acerqué y toqué su hombro, cuando volteó mi respiración se detuvo y mi cuerpo tembló, era ella. Tanto tiempo buscándola y al fin estaba parada enfrente de mí.
–Hola ¿Te conozco?– su mirada denotaba confusión y desconfianza. Claro que lo estaría después de pensar como estaría mi rostro, observándola como si no la hubiera visto en años.
El caso es que precisamente eso pasaba, pero ella no lo sabía.
–Hola, se que no me conoces pero yo sí te conozco a ti– la mire a los ojos y mis dedos empezaron a temblar –soy tu hermana, ___, ___ Maximoff.
–¿De qué estás hablando?– una mueca de disgusto apareció en sus labios, tal vez pensaba que esto era una broma de mal gusto– yo no tengo hermanas…– dió un paso para atrás y me miró como si estuviera loca.
–Lose, se que suena loco, pero tu padre Oleg Maximoff es el mío también…
Ante aquella revelación su rostro se llenó de sorpresa al mencionar el nombre de su padre.
–Pero ¿Cómo es eso posible?
Suspiré y trague saliva, como si eso hiciera que mis manos dejarán de temblar.
–Oleg tuvo una aventura con mi madre biológica, pero nunca le dijo a tu madre, Irina. Mi madre falleció cuando yo nací y lo único que me dejó fue esto– busque en el bolsillo de mi pantalón y le extendí una fotografía donde salía Oleg con mi madre –al reverso tiene algo escrito.
Con duda la tomó, la examinó y leyó el mensaje.
–Amor, si un día encuentras esto él es tu padre, Oleg Maximoff. Encuéntralo y dile la verdad, menciona mi nombre y sabrá quién eres. Nunca dudes que te ame y de verdad lo siento. Con amor, Suzanna– al terminar de leer su mirada regresó a mí –¿Cómo es que tienes el apellido Maximoff?– cuestionó devolviéndome la foto.
