One Shorts {Kenjen}

Tarzan 3/?

Cortes Informativo: Hola, primero que nada aclararé algunas dudas para que puedan comprender lo siguiente que sucederá en la historia.

1.- Kenji tiene 22 años, Brooklyn y Sammy tendrán 2 años menos que su amigo. Ben tiene 18 años, Yazmina tendrá 22 años, Darius 21 años.
2.- Bumpy será un perro Greyhound o galgo inglés (una oreja más corta grande que la otra).
3.- Kenji se enamora de Ben ya que es el primer humano que ve, tiene una relación normal con Darius y Yaz pero no se lleva bien con el resto de los tripulantes.

Pov. Omnisciente.

El castaño abrazaba con todas sus fuerzas al contrario, por su actitud de hace unos momentos se notaba lo desmadroso que era y no quería ensuciar sus shorts del miedo de esa caída.

—¡No podríamos ir caminando~!— esclamo aterrorizado por casi chorñcar con una piedra.
—¡Caminando~!— imitó la palabra con burla.

Con un poco de malicia fingía estar a punto de chocar con los árboles, le era divertido ver la clara presencia de temor en el  más joven. No sabía por qué, pero sentir al más joven pegarse a él daba una sensación cálida en su pecho, una sensación que no deseaba perder.

Después de unos minutos llegaron al campamento, se escondieron entre la hierba alta y bajo la sombra de un árbol, encontrarón a los gorillas más jóvenes junto a una elefante destrozando todo.

—Gorilas— murmuró mientras su acompañante corría en esa dirección.

Kenji se acercó rápidamente a la líder que aquel grupo jugando de forma un poco brusca para el gusto de Ben.

—Es uno de ellos— pensó mientras salía del escondite.

Apenas lo notaron todos los gorillas guardaron silencio sorprendidos de ver a alguien de la misma especie de Kenji. Brooklyn permanecía quieta, mas la insistencia de su amigo la convenció para acercarse a aquel muchacho a quien en primera instancia confundió por una mujer.

Todos permanecía atentos a los movimientos del castaño, pero la atmósfera se vio interrumpida por la presencia del alfa de la manada. Pincus volteó al sentir una respiración muy cerca de su nuca encontrándose cara a cara con un gorilla mucho más alto que el.

—Hay, no puede...¡¡Ah!!— exclamó aterrorizado mientras se tiraba al suelo por el gruñido del animal.

El estadounidense era analizado por el primate quien lucía imponente, tomo un pequeño sartén que se hallaban cerca de él para cubrirse. Kerchak olfateo al recién proclamado adulto gruñendo de manera brusca aterrando al humano quien estaba por llorar. Los miembros del grupo desaparecieron entre el bambú del bosque dejando solo a Kenji que detuvo su andar observando a Ben, Jala noto eso e intentaba dirigir a su hijo al bosque, ante la cristalina mirada del castaño Kenji se perdio entre el bambú. Pasaron unos segundos hasta que una galgo corriera a su dueño lamiendo su rostro.

—¡Ben!— exclamó Fadoula mientras lo abrazaba.
—¡Nos...t-enías...preocupado— comento intentando recuperar el aire.
—¿Dónde estabas? ¿Te buscamos por todas partes?— cuestionó Yaz dándole pequeños golpes a su amigo.
—¿Y qué le pasó al campamento?— preguntó Tiffany observando las tiendas de campaña.
—No puede ser, ¡Yaz, no lo vas a creer!— exclamó mientras sujetaba los hombros de su amiga —¡Estaba caminando por la selva cuando...el ejército de monos...volé por los cielos y...y el me salvo!— intento explicar todo.
—¿Te salvaron? ¿Quién?— pregunto Darius confundido.
—

Fue Kenji— respondió con una sonrisa.

Los adultos se confundieron más antes aquella respuesta, nadie de la tripulación de llamaba Kenji.

Por otro lado en lo profundo de la selva.

—Manada, no nos acercaremos a los extraño— expresó demandante —no dejen que los vean y no los busqueb— ordenó especialmente para el único humano.
—No quieren hacernos daño, Kerchak— protesto Kenji.
—Kenji, no lo sabés— habló.
—Claro que sé, estuvevon uno de ellos— comento.
—Tal vez tu nos quieras poner en peligro, pero yo no— aseguró.
—¿Por qué bye intimida lo que es diferente a ti?— acusó molestando al líder.
—Protege a la familia, no te les acerques— hablo autoritario.
—,Kenji, escucha a Kerchak— intento persuadir a su hijo.
—¿Por qué me ocultaste que había criaturas iguales a mi?— le recriminó antes de salir corriendo para trepar a un árbol aislado.

Era un nuevo día en aquella selva, las aves cantaban y las personas comenzaban con sus labores, incluyendo a cierto chico salvaje que se mantenía escondido en un árbol observando como todos los hombres arreglaban el desastre que ocasionaron la manada. A escepción de cierto castaño y sus amigos que estaban por escuchar la historia de su amigo lo cual intrigo al azabache.

—Haber si entendí, fuiste perseguido por una manada de babuinos por culpa de la cría del alfa y un hombre simio te salvó— comento confundido Bowman.
—Lo único creíble de eso que perdiste la cámara— hablo la mujer atandose el cabello.
—¡Por qué no me creen, recuerden que nunca e sudo bueno para inventar!— exclamó molesto mientras guardaba la cámara de repuesto en su caja.
—Bueno cuentanos más sobre este erguido hombre mono con taparrabo.— sugirió con sarcasmo Yaz mientras se sentaba.
—Bueno, no estaba erguido, más bien estaba encorvado. Soportaba el peso sobre sus nudillos como los gorilas— comento.
—¿Sobre sus nudillos?— murmuró confundido.
—Se ponía en esta posición y caminaba así— se agachó e intento avanzar de esa forma.
—¡Que gran descubrimiento!, Un hombre sin lengua, sin comportamiento...— enumeró con sarcasmo nuevamente.
—Ni tenía tampoco respeto por el espacio personal, se ponía así de cerca parecía que me estaba acechando — se acercó demasiado a su amigo.

Kenji observaba divertido la escena, ver a ese chico intentando imitarlo le parecía tierno.

—También parecía confundido— se puso de pie tomando la caja —como si nunca hubiera visto a otro ser humano— comento —sus.ojos eran intensos y...fijos, jamás había visto tales ojos— describió embelesado sorprendiendo a las 3.
—Ben, ¡Ejem!, te dejamos con la cámara a solas— bromeó Bowman acercándose a su prometida.
—Solo no te lanzo la cámara, por qué no queda otra— amenazó mientras se dirigía a su tienda de campaña —además, piensen todo lo que podemos aprender de el si lo encontramos— sugirió más relajado.

La pareja se observo por unos momentos pensando que no era una mala idea, mientras que el asiático sonreía preparándose para bajar y saludar.

—Profesor Bowman, le recuerdo que estamos aquí para estudiar a los gorilas. No para seguir fantasías estúpidas— hablo con molestia Hap saliendo de su tienda de campaña.
—¡Fantasías!—  exclamó ofendido dirigiéndose al hombre —yo no lo imaginé, Kenji es...— interrumpió su argumento al ver a su salvador caer y  colocarse entre el y Hap —real.— dijo con una sonrisa triunfante.