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"¿Gritar de vez en cuando...?"
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— ¡Akane! ¡Voy por las bebidas! — Tomé las llaves.
— ¡Voy contigo! — Habló Kokichi desde el salón.
— ¡Vuelvo enseguida! — Reí al ver la cara de kokichi.— Te traeré algo — Le di un besito provocando una risa en el peli-morado.
— ¡Cuídate! — Espetó entre risas.
Asentí robando su gorro mientras salía de casa en dirección a la tienda de siempre.
— ¿...No está abierta? — Susurré para mi misma observando la tienda del frente.
Suspiré y me di vuelta buscando más tiendas ''Creo que después de esta había... ¡Una tienda!'' Sonreí para mis adentros entrando a la tienda, tomé las bebidas junto a dos frituras, pagué y salí de la tienda despidiéndome.
— Supongo que a Kokichi le gustan estas... —Hablé conmigo misma mientras verificaba mis cosas. A los segundos de distracción choqué con algo... O más bien alguien.
— ¡Ten cuidado, perra! — Exclamó enojado un señor. Alcé la mirada enojada por tal apodo y me levanté limpiando el polvo ''Tranquila, calma, todo está bien'' Estaba dispuesta a irme pero otra frase me hizo parar en seco.
— ¿¡No te disculparás!? — Suspiré y continué con mi caminata esta vez algo rápida.
— ¡Hey! ¡No huyas! — Comencé a correr más rápido soltando una risa. Si Kokichi estuviera aquí probablemente sería más divertido.
Después de meterme por un callejón suspiré y salí al otro lado de la calle.
Intentaba localizar donde estaba cuando una punzada en mi cabeza detuvo mi caminata. Caí en el piso...
