Mary es hija de Dick, Ryan es hijo de Kory. Después de un problema entre ambos niños su maestro se ve obligado a llamar a sus padres a una reunión. Ninguno contaba con que aquélla reunión significaría un reencuentro para antiguos ex amores...El rest...
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De caminó al colegio de Mary, Dick se preguntaba si vería a Kory, tenia la esperanza de poder hacerlo y al menos pedirle su número, en caso de que ella quisiera seguir en contacto con el, claro. No había podido dejar de pensar en su encuentro durante todo el fin de semana y el asunto lo estaba volviendo loco.
El y Kory habian sido mejores amigos desde la preparatoria, pero su estrecha amistad siempre había estado en la línea entre algo más, finalmente, a los dieciséis años, Dick llego a aceptar sus sentimientos por ella, aún recordaba con una sonrisa su confusa y estúpida confesión de amor y la expresión de alegría en el rostro de Kory después de su primer beso en la terraza de la mansión de Bruce.
Su relación habia sido como el mejor de los sueños, pero cómo todo lo bueno algún dia tenía que terminar.
Llevaban seis meses juntos cómo pareja oficialmente cuando Kory tuvo que mudarse. Habían hablado de mantener una relación a distancia, pero cómo Dick era un imbecil en ese tiempo y sabía que no iba poder soportar estar lejos de ella decidió que lo mejor sería terminar, para no sentirse atado. Su despedida fue tensa y dolorosa y nunca más volvieron a ponerse en contacto después de eso.
Habian pasado diecisiete años desde aquel día.
Supo cuándo Kory volvió al país unos años después de su ruptura por contactos en común, pero sus vidas habían tomado caminos diferentes y nunca pensó en volver a buscarla. Ahora se preguntaba porque no lo hizo.
Al llegar al colegio suposo que tendría suerte. Apenas se despidió de Mary notó la inconfundible cabellera roja abriéndose paso entre los padres y niños que ingresaban al edificio.
—¡Que suerte qué te ecuentro!— fue lo primero que dijo Kory mientras se acercaba con el pasó acelerado.
—También esperaba verte— respondió sin pensar, sintiéndose terriblemente avergonzado al instante.
—Quería saber si estabas de acuerdo con que lleve a Mary y a Ryan por un helado después de clases.
Dick casi se sintió herido por el hecho de Kory había ignorado completamente su confesión, por lo que tardó unos segundos en responder.
—Uhhm, si. Si ella esta de acuerdo, esta bien.
—¡Genial!— exclamó con alegría. —Ryan me estuvo torturando todo el fin de semana buscando una manera "apropiada" para disculparse. Realmente se sintió fatal cuándo vio los raspones en las rodillas de Mary. Literalmente estuvo todo el tiempo repitiendo "¡soy un monstruo mamá! no puedo creer que haya lastimado a una niña".
Dick silbó e hizo una mueca de asombro. —¡Vaya!
—A veces es muy....
—¿Apasionado?— Dick dudó viéndo que Kory no parecía estar cerca de encontrar la palabra adecuada.
—Iba a decir intenso, pero supongo que eso funciona—río Kory. —De todas formas le dije que podía invitarla hoy pero que no se ilusione demasiado en caso de que ella no quisiera o que tu no le dieras permiso.
