No Soy El Único

Novena Parte

La suave melodía de una canción de pop sonaba por los parlantes del automóvil del Señor Choi, la canción le resultaba atractiva aunque era la primera vez que la escuchaba. El ambiente no molestaba a Jungkook, pero seguía extrañado de que el Alfa tuviera tantas consideraciones con él.

-Estos días han estado muy fríos, ¿no?

-Sí -respondió Jungkook mientras temblaba un poco al recordar el clima-. No he salido de la cama mas que para comer. Por cierto, gracias por pensar en traerme, sino en este momento probablemente me estaría mojando y despertaría con una pulmonía mañana.

-Entonces me alegra haber venido -el alfa tomó una curva-. ¿Qué tal tu primera cita?

-Pues, fueron demasiadas emociones en un solo día. Aunque una parte de mi agradece poder liberar todo.

-Las primeras citas suelen ser así, pues son en las que hablas de la situación que te perturba. Alguna personas hasta por primera vez, y la carga emocional que representa eso suele ser un poco agotadora, mas si uno no tiene con quien llegar a buscar apoyo después. Sé que el alumno Park se ha ido de intercambio por lo que lo mejor será que llegues a tu casa, te acuestes y descanses. No olvides que el lunes debes ir a mi estudio.

-No me olvido, Señor Choi. La verdad es que desde que Jimin se fue... Siento que una parte de mi se fue, quisiera que hubiera estado durante mi terapia. Pero aún así me alegra que haya tomado una oportunidad que le hará muy bien.

-Así es -llegaron a un semáforo en rojo-. Bueno... Antes de pasar por ti, pasé por un restaurante para que tú, lindo omega, solo llegues, comas y descanses, ¿si?

El alfa le pasó una funda que contenía comida y se la ofreció.

-Pero... Señor Choi, esto es demasiado -el omega negó ligeramente con la cabeza-. Ya ha hecho mucho por mi, llévelo y cómalo usted.

El alfa rio encantadoramente.

-Yo también he comprado algo para mi, Jungkook. Por favor no me rechaces la comida.

Jungkook asintió, luego de un par de palabras y una despedida el omega bajó del auto. Entró al departamento con la funda en una mano y su abrigo en la otra, pues se había mojado en la entrada. Colocó las llaves en la mesa de la entrada y caminó hasta la cocina para calentar la comida que le habían obsequiado.

-Uffff... Esto huele muy bien.

Aparte de la calentar la comida, Jungkook tomó un paquete de galletas y un vaso con soda. Y con un ánimo mejor, entró a su habitación tarareando una canción. se acostó y comió mientras veía la serie que todavía no terminaba.

Al otro lado del departamento, se encontraba Taehyung que se estaba alistando para salir. Mientras se peinaba había escuchado la puerta y a Jungkook tararear después de estar un rato en la cocina. También había escuchado como pasaba por su habitación y el olor a comida.

Pero... No había escuchado su puerta sonar y la voz del omega avisándole que le había cocinado algo. Pasados varios minutos el omega tampoco aparecía aún por su habitación.

-¿Será que pensó que estaba dormido?

Su alfa bufó en su interior, para eso si quería al omega.

Taehyung se encogió de hombros ante su pregunta, tampoco le iba a ir a preguntar al omega que porque no había hecho comida para él. Aunque si se moría de ganas de comer la comida que preparaba el omega antes de irse a la fiesta, por su mente pasó todos los platillos que el pequeño omega le había preparado a lo largo de estos tres años. Desde que había llegado al departamento el omega se había encargado de la cocina, pues la verdad a el alfa no le iba a eso de la cocina. Solo sabía lo básico.