Epílogo

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~Cinco años después~

Lauren gruñia fastidiada de aquella reunión con su tripulación, todos hablaban de cosas sin sentido. Su tripulación había crecido los últimos años, ella con 30 años había logrado cosas que varios piratas no habían hecho.

La llegada después de la isla había sido un caos en el pueblo, habían pasado casi un mes fuera y cuando regresaron aquella pirata temida por todos había regresado jodidamente más rica de lo que era y además con una mujer. Todos quedaron sorprendidos y muchos la desafiaron...

Pidiendo el cuerpo de su castaña, ella furiosa los había atacado y en menos de segundos estaban tumbados con heridas demasiado graves.

—Me iré a casa está noche, mi mujer y mis hijos me esperan—Habló la capitana interrumpiendo a todos.

—¡No se preocupe capitana!—Todos dijeron contentos.

—¡Nos saluda a su mujer y s sus hijos!—Exclamó uno viendo cómo su capitana salía de la taberna.

—¡Saben que siempre espera sus saludos!—Refunfuño saliendo de aquel lugar.

Lauren camino rápidamente hacia su casa, que había comprado cuando llegaron a tierra hace cinco años, sus hijos estarían durmiendo en casa y tendría a su mujer solo para ella.

Llegó a su casa y antes de siquiera poder abrir la puerta, está de abrió y su mujer la jalo adentro.

—Me preguntaba cuándo llegarías, Lolo—Habló con una voz llena de lujuria—Me tenías esperando tanto tiempo—Susurró mordiendo el lóbulo de la oreja de la peli-negra mientras le quitaba la chaqueta larga dejándola en faja y camisa.

—Entonces no esperemos más—Gimió tomando a Camila en sus brazos.

Caminaron chocando contra algunas paredes mientras sus bocas se encontraban en una dulce y desesperada danza, sus manos se recorrían el cuerpo disfrutando aquello, sus cuerpos se seguían emocionando al toque del otro y sus corazones seguían latiendo a la par.

Lauren terminó de desnudar a la oji-marrón y la dejo sobre un sillón disfrutando la vista maravillosa de su mujer.

—Eres tan hermosa y deliciosa—Jadeó Lauren tomando un pecho en su boca y empezando a chuparlo mientras su otra mano acariciaba el otro seno.

—¡Oh Lauren, más!—Gimió tomando el pelo de Lauren acercándola mas si es posible.

Lauren se separó de ella jadeando momentos después, se quitó faja desesperada, al quitarla la aventó y sin poder soportar más destrozó su camisa y se quitó los pantalones y ríos interior de golpe, su boca se hacía agua al ver el delicioso manjar que había entre las piernas de Camila.

—Ya estás empapada—Gruñó acercándose a su centro e inhaló profundamente el olor dulce y picosito—Mía, completamente mía.

Su boca se adueñó del coño de Camila, no lo había lento y suave, la devoraba como si fuera un animal sediento, Camila se tapo la boca con la mano tapando los gemidos de placer que salían. En menos de segundos sitio a la castaña tensarse y llegar a un potente orgasmo, sin poder tener suficiente de aquel manjar volvió a chupar y lamer el delicioso coño de su mujer trayendola a otro orgasmo inmediatamente.

—¡Oh-oh, Lauren, ahh!.

Siguió devorando el manjar, nunca tenía suficiente de aquel sabor delicioso, los jugos de su mujer se escurrían por su trasero y cayendo al sofá, su nariz quedó impregnada de aquel olor y se separó de ella empezando a acariciar su pene palpitante.

—Jodidamente deliciosa—Rugio en voz baja acomodándose entre las piernas de su castaña.

—Oh Lauren, metela ya—Rogó levantando las caderas ligeramente en busca de más contacto.

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