Cap14: ¿A que le temes?

1.3K 150 99
                                    

las palmas de sus manos estaban sudando, el en general estaba sudando, había huido un gran tramo para escapar de los espectadores cuando accidentalmente rompió la televisión que ellos estaban mirando al cruzar por esta, afortunadamente había salido ileso, y estaba muy alejado de estos cuando pudo cruzar una TV algo remota, no estaba seguro de donde estaba, era otra casa oscura y lúgubre, como muchas de las que había visitado ya, con su característico olor a humedad y a viejo, este olor a polvo encerrado, se levanto un poco adolorido por la caída, pero se incorporo rápidamente.

la casa como muchas otras estaba igual de destruida, escalando un poco logro llegar a una sala de estar aparentemente, ya que en realidad no estaban estos sillones donde sentarse, había mucha madera amontonada en sus esquinas impidiendo ser un lugar "cómodo" para mirar la Tv, aunque esto poco le importaría a los espectadores, no se fijo demasiado en la decoración, miro un hacha en el piso, que le serviría para abrirse paso atreves de una puerta y continuar para llegar a la torre de señales como Mono le había comenzado a llamar, pero cuando tomo el hacha escuchó algo que pareció un gran golpe de adrenalina.

-¡Mono! ¡ayuda!- era ella, era su querida Six, soltó el hacha y miro en dirección a su voz, estaba atrapada dentro de la TV que había ignorado segundos atrás, corrió a ella, con estos extraños poderes que ahora poseía estiro sus brazos a la televisión y los introdujo logrando sostener estas frías manos que había echado tanto de menos -tranquila te tengo- comenzó a tirar de Six con toda la fuerza que tenia, lo estaba logrando, había logrado sacar la mitad del cuerpo de su amiga, cuando una vez mas, esas enormes y espeluznantes manos los tomaron por sorpresa y la volvieron a llevar dentro y el chico del susto termino echando para atrás.

Mono entro en pánico cuando observo que ese hombre delgado había comenzado a atravesar lentamente la pantalla, el chico se levanto y corrió nuevamente por el hacha, el tiempo ya se comenzaba a ralentizar por su presencia, desesperadamente rompió la madera que le impedía cruzar, iba tan lento que no sabia si podría escapar, escalo una roída pared que ya tenia sus cimientos de fuera, la madera crujía por su peso, y escuchó la puerta rechinar al ser abierta, sintió de inmediato la presencia de este hombre a sus espaldas, sentía como su cuerpo era atraído de manera muy extraña, como si de una fuerza mayor se tratara, pero logro escapar antes de que lograse atraparlo, el tiempo volvió a la normalidad por un momento, Mono aprovecho rápidamente para escurrirse bajo del suelo de la próxima habitación, seria entonces mucho mas fácil de evitar ese monstruo bajo los cimientos de la casa así se llenase de lodo.

en cierto punto se debió detener y no mover ni un solo musculo, casi no pudo respirar, cuando observo que la cabeza de este hombre alto y delgado se asomaba por un agujero en su busca, el estaba entre las sombras, solo podía ver su oscuro sombrero moverse, cuando este monstruo se fue, Mono continuo su camino, a pesar del lento ambiente que traía consigo, esa cosa parecía teletransportarse.

salió a un largo y oscuro pasillo, parecía tener un respiro, pero se equivoco, sintió esa sensación eléctrica acercarse, lo había encontrando, sin mas tiempo que perder, arrastro un taburete a una ventana sellada por tablones, para subir y escapar, cada vez sus movimientos eran mas lentos, esto era verdaderamente estresante para el niño, sentía como esa cosa se acercaba lentamente, como si no tuviera prisa alguna, ¿acaso lo estaba acechando o algo parecido? sentía que incluso sus latidos eran mas lentos y presentes impidiéndole respirar bien, tras arrancar un tablón, logro escapar una vez mas para deslizarse por lo que parecía un vagón de tren "¡¿porque hay un tren aquí?!" se pregunto Mono cuando quedo colgando de este.

no se quedo para averiguarlo, prefirió continuar huyendo, todo estaba frio y húmedo por la lluvia que se alcanzaba a colar en su interior, pero al menos podía correr con normalidad, Mono salto al siguiente vagón, pero la sangre se le bajo a los pies cuando la puerta se abrió dejando ver una vez mas al hombre delgado, hasta la mas pequeñas de sus celular que conformaban su cuerpo le gritaron intensamente al unísono ¡CORRE! el les presto atención, saliendo despavorido hacia el lado contrario, aunque obviamente le costaba avanzar demasiado rápido, ¿Cómo es que siempre lo encontraba?

Pale City HÉRO (Monix) [EN EDICIÓN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora