4 DESTINADO A HACER GRANDES COSAS

316 17 0
                                    

Nasuada y Arya hablaban amistosamente de camino a la gran mesa de madera que los elfos habían preparado para el banquete en honor al nuevo jinete, no hablaban de temas importantes, Arya ni siquiera mencionó su conversación con Eragon, ya tendrían tiempo de hablar de eso por la mañana. Cuando atravesaron la puerta del palacio, todos los elfos presentes dedicaron una reverencia hacia ambas reinas, gesto que ambas agradecieron, pero como Arya dijo después, esa celebración nada tenía que ver con ellas, si no que era en honor de Valandir y su dragón, los cuales aún no habían llegado, señalo Nasuada.

-¡Ahí están!-señalo justo después, mostrando una amplia sonrisa, y pidiendo con un gesto que el joven se acercará.

-Bienvenido Valandir Shur'tugal-lo recibió Arya.

-Saludos Arya Drötting y Reina Nasuada.-saludo el joven.

Arya se posicionó frente a la multitud y dirigiéndose a todos dijo: Querido pueblo de los elfos, han pasado cinco años desde que humanos, enanos, urgalos, y nosotros mismos derrocáramos al Rey, tras esa guerra, un huevo de dragón fue depositado a nuestra raza, con la esperanza de que un nuevo jinete naciera, hoy me alegro de comunicarles que esa esperanza ya es una realidad, con este breve discurso quiero presentarles a Valandir y a su dragón.

Todos los allí presentes enmudecieron, miraban al joven jinete con caras de sorpresa y de alegría, habían luchado mucho en la guerra, habían perdido aún más y estaban realmente orgullosos de que el primer huevo de los tres dejados en Alagaësia hubiese eclosionado frente a uno de los suyos.

Tras unos minutos de silencio, en los que Valandir se sentía muy incómodo, una joven elfa se levantó de su silla y haciendo un gesto de respeto hacía el jinete pregunto: ¿Cómo se llama el pequeño dragón? La pregunta pilló por sorpresa a Valandir, que si bien había pensado en numerosos nombres para su compañero aún no había elegido ninguno, en ese momento recordó otra de las historias que su padre le contaba cuando el preguntaba por la época en la que los jinetes guardaban Alagaësia, en realidad la historia hablaba de la batalla entre Jinetes y Apostatas en Doru Arabea, en esa batalla, los dragones salvajes lucharon junto a los jinetes y el dragón más grande de la época murió, su nombre era Belgabad. No era uno de los nombres que el chico había pensado, pero le gustaba ese nombre, y además ese nombre le recordaría el tiempo en el que su padre aún vivía, por fin había encontrado el nombre para su dragón, así que sonrió a la joven y dijo: Mi dragón, se llama Belgabad.

Firnen fue el primero en hablar a Valandir tras el anuncio,-Me gusta el nombre Elfo, y estoy seguro que a tu dragón también le gustará cuando conozca la historia de su anterior propietario-dicho eso el dragón verde dejo de mirarlos y se tumbó detrás de Arya. La Reina por su parte felicitó al Jinete por el nombre escogido, hizó una pequeña caricia al pequeño dragón y dio por comenzado el banquete. Nasuada y Arya volvían a hablar de forma amistosa, Nasuada anunció que se marcharía por la mañana, pues tenía asuntos importantes en Ilirea, Arya confesó entonces que había hablado con Eragon, y le contó que en tres meses enviaría un mensaje con las indicaciones para encontrarlo, Nasuada miró a Arya, y notó como su mirada cambiaba al hablar del Asesino del Rey, así que asintió y cambió de tema.

El resto de la noche pasó rápido para Valandir, después de la cena los elfos allí presentes habían ido acercándose para saludarle y ver más de cerca al dragón, pues aunque la mayoría estaba acostumbrada a ver a Firnen e incluso a Saphira, la visión de un dragón recién nacido no le era familiar a ninguno. Cuando Valandir vió que la Reina Nasuada y Arya se levantaban de sus asientos para marcharse se acercó a ellas, y con un tono serio y respetuoso pidió hablar con ellas a solas.

-Señoras, ¿Quisiera saber qué pasará con nosotros cuando Belgabad crezca?

-Tanto él como tú abandonareis Alagaësia por un tiempo-respondió Arya- marcharéis bajo la tutela de Eragon Asesino de Sombra y Saphira Escamas Brillantes, quienes serán vuestros maestros, después, cuando vuestra instrucción sea completa volveréis.

-¿Cuándo tendré que marcharme?

-En tres meses, hasta entonces Firnen y yo te enseñaremos lo que creamos que necesitarás para el viaje. Ahora si no te importa joven jinete me retiró a descansar-tras esas palabras la Reina se despidió de ambos y monto a lomos de Firnen, juntos abandonaron el lugar en dirección a sus aposentos.

-No pongas esa cara tan sería, deberías estar contento, todos los habitantes del reino sueñan con una oportunidad como la tuya-le animaba Nasuada.

-Lo sé, pero tres meses es muy poco tiempo, no me veo capaz de dominar este nuevo poder en un plazo tan breve-reconoció el joven agachando la cabeza-además no quiero dejar sola a mi madre, yo siempre la he apoyado desde que mi padre murió.

-Tranquilo, no tienes por qué controlar todo tu poder ahora, ni Arya ni yo controlamos todo nuestro poder todavía, el control se consigue con la experiencia, y en cuanto a tu madre, no estará sola, he hablado con Arya y va a nombrarla una de sus ayudantes personales, así cuando ella hable con Eragon para examinar tu progreso, podrá contarte que tal está.-Nausada habló con el joven mientras ambos caminaban hacía los aposentos de los invitados, llegado al punto de separarse, ambos dedicarón un gesto de respeto al otro y se marcharón.

De camino a su habitación, Valandir aún tenía las últimas palabras de Nasuada en su cabeza: Valandir espero que la próxima vez que nos veamos te hayas convertido en el gran jinete que todos esperamos que seas, porque aunque Eragon sea el primero de esta nueva estirpe de jinetes, el que deberá liderarlos y dirigirlos en el territorio de Alagaësia eres tú, ese es tu destino, para eso te ha elegido Belgabad, y para eso te entrenarán Arya y Eragon, recuerda mis palabras valiente jinete, Alagaësia entera espera grandes cosas de ti.

EBRITHILDonde viven las historias. Descúbrelo ahora