por favor, pega tu promesa y cúmplela

N

Capítulo ocho:

N: negación.

La idea de faltar a S dolía más que el estar ahí, junto a ti, pero sin ser notado.

Me sentía como un extra en una estúpida serie.

Te ves tan completo, Reki. Como si yo nunca te hubiese hecho falta, y se que sueno estúpido diciendo estas cosas, pero, ¿por qué tu inasistencia en mi vida dolía menos que el saber que mi falta en la tuya no importaba?

Desde aquella pelea con mis ex amigos supe que el tener gente cercana y de confianza no era para mí, siempre supe que la única persona con la que podía contar era conmigo mismo.

Aunque eso también es una mentira, si pudiese hacerlo, también me dejaría de lado.

Pero me niego a aceptar que el único amigo importante y palpante en tu vida es Langa, ¿dónde me dejaría eso a mi, a Hiromi, a la pareja de ancianos casados?

Nosotros también somos importantes, ¿no? Claro que lo somos, no sé de qué hablo.

Nos conocimos primero, tu siempre retándome y yo riéndome de ti, no queriendo ni aceptar ninguno de tus retos. ¿Por qué no somos tan cercanos, entonces? ¿Qué me falta?

Espero que te sientas mejor de lo que yo lo hago al estar contigo. Te extraño y ni se por qué, si aquí estas de vuelta, todo es como antes.

Kojiro dice que me nota "extraño", que puedo hablar con él si algo me pasa, pero yo solo quiero hablarlo contigo. No sé cómo, no sé cómo sirven estas cosas.

Tampoco quiero preocuparlo más, el hombre tiene suficiente con Kaoru en el hospital junto a Hiromi. A este ritmo faltamos la mitad de estar en silla de ruedas.

Pero qué podía esperar de la convivencia humana, las relaciones son erráticas, ¿por qué pensé que sería como en las películas?

Es normal pelear entre amigos, es normal tener disputas y sentimientos mezclados, ¿no?

Es normal evitar hablarlo, claro que es normal.

Mi mente evita y arroja lejos todos los pensamientos de que hago mal en evitarlo, si no lo evito me siento triste, si me siento triste está mal, ¿no?

La mejor opción es ignorarlo y forzarme a no sentirlo, a configurar mi cara a una expresión feliz para que nadie lo note.

Si nadie lo nota es como si no estuviera ahí, no existe problema alguno entonces. El único problema ahora es que patinarás contra Adam de nuevo.

Tengo miedo por ti, Reki, no quiero extrañarte porque no estés aquí de nuevo.