3

1.2K 114 27
                                    

—Profesora, tengo un anuncio para la clase de parte de nuestra Gran Maestra Intendente.

Una chica rubia con coletas se puso de pie, caminando erguida hasta el frente del salón mientras abrazaba un libro. Su ropa era un tanto peculiar pero al parecer a más de uno tenía especial atención en aquella chica. Un chico unos asientos frente a mí se encontraba apoyando su mentón en sus manos mientras la observaba casi embobado lo que pareció no gustarle a alguien detrás de él quien se cruzó de brazos algo furiosa.

—Como decía, mi hermana Jean está ocupada en los preparativos del Festival de las flores de viento por lo que sus clases serán intercambiadas con las del profesor Kaeya. —la chica parecía demasiado entusiasta, moviendo una de sus manos hasta finalizar con una vuelta que creó una lluvia de estrellas y notas musicales en el aula que duró unos momentos. — Espero disfruten mucho del festival y no se pierdan de los conciertos que se estarán dando entre los que me presentaré yo y, bueno, Venti.

—¡Así es, Bárbara! —exclamó un chico del fondo.

Barbara, como al parecer se llamaba la chica, continuó hablando por un rato demasiado largo en los que pude percatarme de que algo se escondía detrás de uno de los adornos. Pude distinguir algo violeta que no tardó en atacar con su elemento a la chica que estaba al frente.

El efecto del electrocargado fue muy visible cuando sus elementos chocaron, al parecer el atacante era alguien electro que quería molestarla. Barbara dió un salto, soltando un quejido antes de que la profesora se apresurara a cancelar tanto el hydro como el elemento ajeno.

—Fischl, a la oficina del director. —dijo, poniéndose de pie y señalando a la chica que anteriormente había visto enfadada. — Sabes que tienes prohibido lastimar a tus compañeros.

—Lo lamento, estimada profesora, pero no controlo lo que mi leal súbdito decida hacer.

—Sabes perfectamente que tú decides lo que ese pajarraco hace, siempre me atacas. —se quejó la chica atacada mientras la señalaba acusándola. — Voy a hablar con mi hermana y haré que te expulsen del colegio.

—Veo imposible que el director decida expulsar a la mismísima princesa del Reino de la Noche Eterna. — exclamó con una sonrisa de satisfacción, posando una de sus manos en su cintura.

—¿Por qué lastimas a Barbara, Fischl? —preguntó su compañero de banco inesperadamente, observándola desde su asiento. — Ella no te ha hecho daño, no debes herir a nadie bajo ningún motivo.

La chica pareció flaquear un poco ante la mirada de decepción del chico, bajando la mirada y acatando las órdenes de la profesora.

—Lo lamento. —susurró a su compañera antes de salir y recibiendo solo un bufido de su parte.

Al parecer esta escuela tenía demasiados problemas entre sus estudiantes que debían solucionar. Y ni hablar de los dramas del corazón.

Genshin Academy. ↪  Genshin ImpactDonde viven las historias. Descúbrelo ahora