Marvel una serie de eventos desafortunados

Parte 75

"Yo..", dijo ricitos de oro.

"Vamos hombre, no te voy a comer", dije.

"Yo acepto", dijo.

"Muy bien, donde te lo dejo", pregunté.

Con martillo en mano apuntando a su cabeza.

"Puedo guardarlo en tu casa", preguntó a la doctora.

"Si, pero necesitamos una explicación", dijo ella.

"Además quiero cargarlo y ver que lo hace especial", dijo ella mientras miraba el martillo.

"No creo que sea posible, si lo suelto en tus manos las perderás", dije.

"Lo pondré en esta mesa, intenta moverlo", le dije.

No iba a permitir que se vuele las manos por coger un martillo, solo los dignos podrán usarlo.

Es como la paradoja de la nube voladora y el martillo que tengo en mano.

Si el martillo cae, la nube no es digna o el martillo no es puro.

Ella no pudo moverlo, por más que intentaba ella no podía, incluso el viejo intento y el mesero que veía lo que pasaba.

"Nos vamos, quiero ver lo que te hace especial; si no fuera por tipo que nos mira te hubiera llevado a diseccionar y ver que tenías dentro", dije asustando a todos los presentes que sabían de lo que hablaba.

"Tu no harías eso verdad", pregunto el viejo.

"Quien sabe. Donde entro su amigo tuvo suerte de salir vivo, también no quisieron capturarlo o  dentro de poco tendríamos muchos hijos no legítimos de ricitos de oro libres en el mundo, cada uno capaz de matar toros con las manos desnudas, con fuerza descomunal y dependiendo de como se desarrolle incluso más peligroso que Iron Man", dije.

Ellos sabían quien era Iron Man, las noticias vuelan rápido y lo ocurrido ya es conocido en muchos lugares del mundo.

Nos movimos de forma rápida en la camioneta de uno de ellos, como se que no podrían matarme de forma fácil me quede dormido hasta que me despertaron.

"De que mierda está hecho tu abrigo", pregunto el viejo.

Parece que había golpeado, no lo sentí; claro si ignoramos el dolor que tengo en mi cabeza y corazón causados por "quien sabe que" no he recibido daño ni dolor. 

Bueno ahora tenía un abrigo, de hecho era una chaqueta roja.

Una buena chaqueta, espero usarla como es debido algún día; claro si recupero mis "ojos".

"Nada, solo un pequeño problema que tuve y un consejo, si ven un gigante verde corran lejos de el", les dije.

"Hablas de Hulk", pregunto el viejo.

"Si, como lo sabes", pregunte.

"Me lo acaba de decir este tipo de aquí, parece que quiere hablar contigo", dijo el viejo mientras me mostraba una cara conocida junto con guardias.

"Coulson", dije al verle.

"Podemos hablar, el jefe quiere hablar contigo y dejaremos en paz a tu amigos por el momento", dijo Coulson.

"Ok", dije.

Me aleje, no es como si tuviera miedo, pero esos rifles que tienen son para matar elefantes de un solo tiro y en fila, cada uno es capaz de destrozar a 15 de ellos y a un rinoceronte.

"Como sigues vivo", pregunto Fury.

Sus sodados estaban apuntando sus armas a todo mi cuerpo, eso va a doler y me va tomar tiempo recuperarme del desastre que causaran sus armas.