Un hombre muere y su alma viaja a través del espacio saliendo de su mundo natal, viaja por la realidad y termina en el cuerpo de otra persona reencarnado.
Cuando despierta se entera de quien es el hombre al que le pertenecía su cuerpo.
La Mafia Ital...
Alguna vez han visto un hombre adulto llorar por algo, algo que es desde lo más profundo de su corazón.
Pues si no lo han visto actualmente fuera de los laboratorios Star en Ciudad Central hay un hombre llorando en el suelo de la puerta principal y los guardias no han movido mano ya que vieron furia y rabia en la persona que ha causado esto.
Además temían que les pasara lo mismo, eso explicaba su extraño caminar.
El chico que estaba llorando, no hombre que estaba llorando era un hombre llamado Barry Allen.
Acaba de salir y vio a una chica con la que había acordado tener una cita para darle "algo", pero el no se esperaba que en ves de el darle algo a la chica fue pateado en las joyas doradas o joyas de la familia apenas fue visto por ella, ella se movió a una velocidad tan rápida que nadie la vio y solo se dieron cuenta de ella cuando Barry estaba llorando en el suelo por las canicas destrozadas que estaban completas en sus empaques.
"Hola Barry, tenemos que hablar", dijo una chica.
Ella vestía unos pantalones negros un poco apegados, además de una blusa color marrón y unas botas de color negro, junto a unos guantes de color negro.
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Barry podría jurar que tenía entumidas las pelotas por la fuerza de la patada y posiblemente rayos o corriente eléctrica que recorrían su entrepierna.
La fuerza de la velocidad era algo grandioso para Barry en ese momento, por el lado bueno podía curarse rápido y eliminar la descarga eléctrica que tenía en sus partes, pero su amigo estaba en alto y eso sería un problema; además cree que algo iba ha venir de lo más profundo de su ser.
"Hola Helena", dijo Barry mientras se agarraba y comprobaba que su amigo todavía estaba hay y si que estaba hay pero hinchado, tal vez una semana para que baje la hinchazón de lo que había hay en una persona normal, pero para el alguien con "poderes" entre 30 y 70 minutos para que le baje gracias a la Fuerza de la Velocidad.
"Sabes, algo me paso ayer y luego me despidieron todo por algo que hiciste", dijo la chica.
Barry ya sabía que era, pues el era el causante.
"Y creo que necesito una explicación sobre lo que está sucediendo o esta vez no regresaran", dijo la mujer llamada Helena.
Barry ya sabía eso, esa simple pero poderosa patada parece haber sido ejecutada mil veces y eso era peligros.
Haber dado mil diferentes patadas no es nada si solo conoces una y la prácticas mil veces.
Y hoy Barry lo sintió en lo más profundo y fuera de su ser.
Luego de la agradable mañana de Barry, el tuvo que llevar a Helena a una cita para compensar y explicar las cosas.
La cita no fue como lo esperaría, un pedazo de un motor avión volando en su dirección, una espada saliendo de su espalda a sus canicas; la cual esquivo a las justas por sus sentidos aumentados.
