Parte 65 El Arte es una Explosión II

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"Mierda, corran", grito un tipo con orejas de perro.

El lugar era un caos, dos grandes lagartos luchaban cuerpo a cuerpo.

El agitar de sus alas levantaba vientos muy fuertes que mandaban a volar una rata.

Varios de ellos estaban pegados al suelo con hielo muy fuerte, se mezclaban con el suelo alterando su tiempo o usaban arboles como marionetas para evitar volar lejos de donde estaban.

El resto volaba... 

Pero a diferencia del resto alguien se destacaba, volaba pero en un reloj con una Toro abrazándolo.

Los dragones golpeaban su cuerpo uno con otro y producían sonidos alarmantes.

Los rugidos de ambos eran muy fuertes uno de agua y otro de hielo, ambos chocaban de forma imbatible.

Pero si se prestaba atención solo uno de ellos estaba herido, el otro se recuperaba de forma rápida y no estaba tan herido en primer lugar.

Este era el dragón con el aliento de hielo, pero luego cambió a uno de fuego.

Si el hielo generaba frío, congelaba y retenía, entonces el fuego generaba calor, quemaba y aniquilaba lo que tocaba.

Un par de bragas se veían en el cielo de una chica de cabello rubio...

El calor se volvió insoportable, pero por el lado bueno se vieron unas bragas y hubo un delicioso olor a carne asada de vaca o toro chivato.

El aliento del dragón destruyo muchas cosas e hirió al otro dragón.

Ese fuego era diferente a todo lo que han visto los jóvenes magos, era un fuego maldito que tenía divinidad, un fuego eterno que al apagarse traería los más grandes peligros a un mundo

Luego el dragón herido escapo, el enemigo que enfrentaba era más fuerte que el en muchos aspectos.

Escapo por mejores oportunidades de enfrentar al dragón que había atacado, no sabía que era pero sabía que su poder disminuía al golpear y que el poder mostrado por el otro era la mitad de lo que le había golpeado, necesitaba descubrir la verdad.

Un dragón que gobernaba sobre dragones tenía que ser el más fuerte de todos y aprender de sus fracasos, poco sabía que ese sería su único enfrentamiento con dicho ser, pero las quemaduras en su cuerpo le harían recordar el poder que tenía.

"Oye regresa no hemos terminado", grito el dragón que ataco con fuego.

El dragón lentamente se transformo en una chica, dicha chica desapareció en un abrir y cerrar de ojos dejando una estela azulada en el lugar donde estaba.




"Crees que este bien", dijo una mujer.

"Si despertara pronto", dije.

"Le quería presentar a mi pequeña, pero se asustó", dije.

La mujer a mi lado miró a la niña que estaba fuera del cuarto, ella no había entrado por dos motivos. el primero era que estaba dibujando en su libro y el segundo, había adultos que tenían que hablar.

La pequeña tenía un gran parecido a su madre, pero no sabía quien era el padre.

No preguntó y la niña tampoco lo menciono.

No preguntó y la niña tampoco lo menciono

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Marvel una serie de eventos desafortunadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora