Pequeñas elecciones de vida *Adaptación* [COMPLETA]

Desayuno

Pov Mew

"¿Necesitamos levantarnos para que puedas hablar con tu madre?" preguntó Gulf de repente.

Llevábamos acurrucados bastante tiempo. Era reacio a dejarlo que se alejara una pulgada de mí. Pero sabía que mi madre quería hablar conmigo.

"Ojalá no tuviéramos que hacerlo, pero sí. Tendré que ir a buscarla antes de que ella venga a buscarme a mí. ¿Bajamos a desayunar?"

"De acuerdo," suspiró mientras se alejaba y se levantaba de la cama.

Rodeé la cama y lo esperé en la puerta. Lo besé en la mejilla y le cogí la mano, agarrándolo fuertemente. Bajamos las escaleras y entramos en la cocina juntos. Mi madre estaba sentada bebiéndose un café. Vio nuestras manos entrelazadas y sonrió a Gulf, haciendo que se sonrojara.

Llevé a Gulf hasta el frigorífico. "Tenemos fruta y yogur. Earth tiene un compartimento secreto para waffles de Eggo. O, si lo prefieres, podría hacerte una tortilla."

Nunca antes había podido presumir de mis habilidades culinarias. Esperaba de verdad que Gulf me dejara cocinar para él.

"¿Sabes cocinar?" preguntó, mirándome con sorpresa.

Asentí y le sonreí.

"¡Una tortilla sería estupendo!"

"Siéntate," dije. "Te la llevaré."

"Gracias, Mew." Se puso cerca y me besó en la mejilla.

Si mi madre no hubiera estado en la habitación, no lo hubiera dejado acabar ahí. Sonreí mientras Gulf se sentaba al lado de mi madre.

"Buenos días, Gulf. ¿Estaba bien la habitación de invitados?" preguntó Pleng.

"Era fantástica. Me encanta como has decorado la habitación. Es muy bonita" contestó Gulf.

Sonreí para mi mismo, sabiendo que Gulf había pasado muy poco tiempo en esa habitación.

"Gracias, querido" dijo Pleng. "Decorar es una de mis aficiones."

"Tus habilidades para el jardín superan la decoración," ofrecí, sabiendo que era la afición favorita de mi madre. Estaba intentando mantener la conversación lejos de mí. "Tiene rosas premiadas."

"Mew, no es de buena educación alardear," me regañó Pleng.

"Estar orgulloso de tu madre no es alardear," discutí.

"Yo no tengo permitido tener más plantas," dijo Gulf. "Después de que matara el pequeño e inocente helecho que Krist trajo a casa del trabajo, me prohibió incluso tocar una planta. Dice que tengo el pulgar negro sobre la tierra."

Resoplé y Pleng se rió por lo bajo. Gulf nunca decía lo que esperaba. Disfrutaba eso de él.

"Gulf, ¿disfrutaste la fiesta anoche?" preguntó Pleng.

"¡Oh, sí!" dijo Gulf. Podía oír la sonrisa en su preciosa voz. "Nunca antes había conseguido bailar sin caerme. Por supuesto, ¡Mew tiene todo el crédito por eso! Guía perfectamente."

"Aprendió tan rápido," reflexionó Pleng. Podía sentirla mirándome fijamente. "Krist ha mencionado que estás en la universidad."

"Sí, señora" contestó Gulf.

"Pleng, por favor, querido" dijo mi madre.

"De acuerdo, Pleng" Gulf se rió por lo bajo. "Tengo clase los lunes, los miércoles y los viernes. Principalmente son clases generales, pero me estoy inclinando hacia la ingeniería. Tengo un trabajo como camarero los martes y los jueves, con las noches de los viernes y los almuerzos de los domingos. Después, tengo un trabajo temporal envolviendo regalos los martes y los jueves por la noche en el centro comercial. Se me da mejor ser camarero que envolver regalos, pero sólo un poco."