Cupi-Camie (Bakucamie)

Una Noche en lo de Todoroki

-¡Tu! -Gritó Enji furioso.

-¡Endeavor-san! -Se alegró Hawks abriendo sus alas.

-Te dije que hoy tendría una reunión familiar, así que no molestes. -Dijo Endeavor- Tu y tus plumas pueden ir a patrullar la ciudad.

-Pero yo estoy aquí porque...

-No molestes. -El más alto estuvo apunto de cerrar de un portazo pero apareció su hija.

-Espera Papá... -Se acercó hasta la puerta- Yo lo invité.

-¿Tu? -Preguntó algo confundido.

-Si... Es más que obvio que ya lo debes conocer de memoria a Hawks... -Se puso al lado del joven, lo tomó de la mano y consiguió el valor para decir la verdad- Papá... Keigo es mi novio. 

-Tu... ¡¿QUÉÉ?! -Gruñó lanzando un poco de flamas por su cara.

-Oh, la cena ya está lista. -Escuchó la campana del temporizador de la cocina- Cuando estemos en la mesa te explicaré. Tu ayúdame con los platos. -Le dijo a su novio.

-Claro amor. -Terminó Hawks con un tenso cruce de miradas con Endeavor mientras era arrastrado adentro por la chica.

Unos minutos después, la mesa ya estaba servida. Enji se había sentado en el extremo de la mesa, al costado de su esposa, mientras solamente miraba en silencio al joven rubio sentado junto a su única hija, mientras que los demás chicos se sentaban en la mesa para cenar.

-Y dime Fuyumi... -Habló la madre- ¿Cómo fue que ustedes dos terminaron juntos?

-Bueno... -Habló Fuyumi y tomó de la mano a su pareja- Después de lo que pasó con el incidente de Papá y... Toya... Keigo estuvo mucho tiempo en rehabilitación para poder recuperar sus alas, y en ese tiempo solía pasar cerca de aquí y preguntar por Papá, así que un día lo invité a pasar a tomar algo y se pasó el día hablando de porqué Endeavor  es el mejor héroe que tiene Japón, y así pasaron los días y varias tardes hablábamos un rato hasta que un día me invitó a salir y después paso lo que tenía que pasar y ahora llevamos dos meses de novios.

-Me alegra mucho que dos de mis hijos hayan encontrado a alguien con quien compartir sus vidas. -Sonrió Rei mientras Momo llegaba a la mesa.

-Wow Momo, es extraño verte llegar tarde a la mesa, normalmente eres la primera en llegar y servir... -Dijo Camie viendo como su mejor amiga se sentaba a su lado- Bueno, normalmente eres la primera en todo, pero sigo sorprendida.

-Acabé de buscar y llamar a cinco pastelerías encerrada en el baño para ver si alguna me podía traer un postre de urgencia a esta hora. -Respondió susurrándole mientras temblaba y peinaba su mechón de los nervios por ser descubierta- Shoto le dijo a su hermana que yo era una excelente pastelera, y tuve que improvisar en el momento... -Explicó la de cola de caballo- Así que como no quiero seguir mintiéndole a una familia tan importante y buena conmigo vamos a hacer ese curso de cocina que prometimos hacer, cueste lo que nos cueste.

-Estoy contigo amiga... -Reafirmo Camie- Baku también me preguntó si sabía de otras comidas y no vamos a tener a Sato para que nos cuide las espaldas para siempre, así que el lunes sin falta nos inscribiremos en ese curso sin falta, yo pensaré una coartada para Shoto y Katsuki mientras tanto.

-Muy bien, yo me encargaré de inscribirnos. -Dijo Momo y ambas mantendrían esa promesa hasta terminar ese curso.

-Ahhh... Shoto... -Frente a las chicas, Midoriya le tocó el hombro a su amigo a lado suyo- ¿No crees que tu padre está enojado...? Digo... Más de lo normal.

Shoto vio a su padre quien seguía viendo a su hermana y su nuevo cuñado, con su seria mirada malhumorada y con pequeños ticks que expulsaban pequeñas llamas desde su barba repentinamente, el cual Shoto fácilmente pudo descifrar que era la mirada de que su padre tenía ganas de matar a alguien.