"—Me iré...
—¿Por cuánto tiempo?
—Cuatro o cinco años...
—[...] ¿Cuál podría ser la buena noticia entonces?
—Cuando regrese, tú serás la primera a quien busque"
Ga Eul todavía recuerda aquella conversación, tristemente fue la última entre ellos antes de que Yi Jung partiera rumbo a Suecia para estudiar y potenciar más aún sus habilidades.
No hubo una despedida triste por parte de ninguno, Ga Eul ni siquiera se apareció por el aeropuerto el día en el que Yi Jung partiría, ciertamente, pese a que quería evitar la tristeza del momento, no se sentía capaz de poder decirle adiós sin sentir que podría llorar en cualquier momento, mientras que por otro lado, Yi Jung tampoco le pidió que asistiera aquel día. Ga Eul se pasó el resto de la mañana, tarde y noche con el móvil en mano a la espera de cualquier noticia suya, algún mensaje o llamada que supuso llegaría hasta entrada la tarde debido al viaje en avión.
Aquella esperada llamada jamás sucedió y ese mensaje anhelado en el fondo de su corazón tampoco llegó.
Ga Eul esperó por horas, las cuales al tiempo se transformaron en días, luego en semanas y para cuando su calendario marcó un mes de ausencia Ga Eul tomó la decisión de hablarle.
Ingenuamente podía verse en ese entonces, sentada en la orilla de su cama y con el móvil en ambas manos, sintiendo los nervios subir y bajar por su sistema mientras escribía, borraba, escribía y re-escribía el mismo mensaje una y otra vez sin saber si un "Hola, ¿Cómo estás?" sería una buena manera de comenzar una conversación después de tanto tiempo, sabiendo por supuesto que aquello es lo más normal del mundo cuando buscas comunicarte con alguien.
"Hola sunbae... ¿Cómo estás?
Ha pasado tiempo desde la última vez que supe algo de ti... Solo te escribo esperando que estés bien. Todos te extrañamos mucho.
Cuídate por favor."
Fue, entre muchos, el mensaje más decente que pudo escribir sin sentir que de algún modo lo estaba presionando a hablar con ella. Lo envió con una sonrisa en el rostro, esperando pacientemente a que fuese respondido teniendo siempre en cuenta la diferencia horaria entre ambos países.
Decepcionada, herida y con un peso extraño Ga Eul observó la pantalla de su pequeño teléfono día tras día, esperando al menos una simple señal por parte de él que le dijera que estaba bien, que le estaba yendo bien y que todo estaba perfecto... Nuevamente no, con una triste sonrisa tuvo que comprobar que su mensaje había sido leído a las pocas horas de ser enviado, más no fue respondido en ningún momento, ni días, ni semanas, ni meses después. Yi Jung... Él solo no respondió, tampoco intentó comunicarse con ella en ningún momento.
Al comienzo fue un tanto difícil, sobre todo al tener que oír lo bien que estaba Yi Jung pues sus amigos sí lograban comunicarse con él a diario, saber de sus progresos, avances, retrocesos sin perderse detalle alguno.
—No importa... —Dijo una tarde cualquiera, situada frente al espejo de su habitación, observando su propio rostro sumido en tristeza, una que Jan Di notó en demasiadas ocasiones como para decir que se trataban de días malos, amargos, o simplemente de esos en los que no quieres mover ni un músculo, ni siquiera salir de la cama. Muy en el fondo Jan Di sabía que había algo más, una razón mucho mayor. Aún cuando ella quiso preguntar e intentar ayudar, Ga Eul solo le detenía recalcándole que pronto estaría bien, que era un simple desanimo que terminaría pronto.—Woo Bin sunbae y Ji Hoo sunbae dicen que Yi Jung sunbae está bien y eso todo lo que que necesitaba saber...
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The story continues [Yi Jeong y Ga Eul]
FanfictionSo Yi Jung regresa de su largo viaje de cuatro años, y tal como dijo antes de marcharse, la primera persona a quien ve una vez que estuvo de regreso en Corea fue a cierta linda y tierna chica, quien actualmente era maestra de artes. ¿Pero y después...