Sodomía || Emiliaco- Terminada- Adaptación

🔥 TE AMO TANTO, NO MUERAS🔥

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Sorry  por la demora, pero ya regreseeeee, los extrañe ..... bueno  HOY se acaba todo.... hoy se estrena todos los capítulos faltantes......asi que hoy damos cierre a esta aventura ...

Claro, se viene otra aventura............

BOOKTRAILER..... "27cm de Emilio"

¿Van a leerla?🔥🔥

"TODO TIENE UN INICIO Y UN FINAL"

- Toma -Joaquin le lanzó una bolsa de A+ y Emilio levantó el rostro del libro.

- Sabes que no necesitas robar sangre... Te pueden pillar... -dijo, aceptando la pequeña bolsa roja.

- No sabrán nunca que eso ha desaparecido. Ahora, bebe -dijo Joaquin, dándole unos golpecitos en la cabeza, como si estuviese felicitando a un cachorro por una buena acción-. Me voy a la cama. Cuando termines, ¿vienes?

-Espérame despierto... -respondió Emilio con una sonrisa maliciosa; Joaquin se echó a reír y desapareció por el pasillo.

Emilio abrió el envoltorio con cuidado y comenzó a beber. No era divertido, y la sangre no estaba tan caliente como recién extraída de una persona aún viva, pero se estaba acostumbrando a ese estilo de alimentación. Evitaba al máximo morder, aunque fuese de broma, cualquier parte del cuerpo de Joaquin, por miedo a descontrolarse y hacerle daño.

Algunas veces, el hambre de Emilio era tan intensa que se encerraba en el baño con algunas bolsas de sangre y salía de allí horas después, cuando se sentía nuevamente recuperado. Joaquín siempre se quedaba al otro lado de la puerta, golpeándola suavemente y hablándole para tratar
de calmarlo. Al inmortal le gustaba torturar a Emilio con palabras y gestos. Le gustaba verlo suplicar por un roce o irritarlo a veces con algún comentario innecesario.

Pero lo que más le gustaba era abrazarlo antes de dormir y despertarse con las prisas del menor, vistiéndose de cualquier forma
porque llegaba tarde al trabajo. Le encantaba besar sus mejillas sonrosadas y besarlo
traviesamente cuando el silencio se instalaba entre los dos. Emilio sentía que vivía cuando estaba cerca de Joaquin. Se sentía casi humano.

••••

Era viernes; un día normal y soleado para la mayoría de la gente. Ambos, humano e inmortal, estaban en medio de un supermercado a última hora de la tarde.

Emilio jamás había pisado un supermercado moderno, pues no tenía sentido ir a donde se vendía comida que él no podía comer, pero Emilio iba a pasar el fin de semana en su casa y ni siquiera había comida instantánea en los armarios. Cuando Joaquin dio la idea de salir solo, Emilio se lo impidió rotundamente. Se vistió rápidamente con un sombrero, gafas de sol, un abrigo rojo y una bufanda, negándose a dejar que el menor fuese solo a un lugar que el inmortal desconocía.

La luz del sol lo incomodaba, pero Joaquin
sostuvo una sombrilla sobre ambos durante todo el camino para protegerlos de los rayos UV. Dentro del supermercado, Emilio metió todos los accesorios extra que vestía en la mochila que llevaba el menor a la espalda, y se quedó sólo con el abrigo rojo, puesto que le incomodaba mostrar sus muñecas tatuadas.