La Marca Tenebrosa

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Pv. Harry 

Pronto nos vimos rodeados por la multitud que abandonaba el estadio para regresar a las tiendas de campaña. El aire de la noche llevaba estridentes cantos mientras volvían por el camino iluminado de farolas, riéndose a carcajadas .

 Cuando por fin llegamos a las tiendas, el padre de Ron nos  mandó a todos a dormir. Hermione y Ginny se metieron en su tienda, el resto de los Weasley y yo nos pusimos la pijama y nos subimos cada uno a su litera. Desde el otro lado del campamento llegaba aún el eco de cánticos y de ruidos extraños. 

Me había acostado en una de las literas superiores, encima de Ron, estaba boca arriba observando la lona del techo de la tienda, en la que de vez en cuando resplandecían los faroles.

Pero no podía conciliar el sueño, todavía recordaba al chico del partido, su cabello negro como la noche que bajaba hasta su frente, sus ojos profundos como pozos de tinta donde te podías perder por horas, su piel parecida a la porcelana tan frágil y grácil a la vez, sus labios tan suaves y carnosos.

No sabia que pensar siempre supe por donde iba mi sexualidad pero ahora no tengo la mínima idea a donde voy. Y de tanto pensarlo no me di cuenta que me había dormido, hasta que el señor Weasley gritaba

—¡Levantaos! ¡Ron, Harry... deprisa, levantaos, es urgente!

 Me incorpore de un salto y me golpee la cabeza con la lona del techo, el mas lindo despertar, noten el sarcasmo.

—¿Qué pasa? —pregunte

Algo malo ocurría, porque los ruidos del campamento parecían distintos. Los cánticos habían cesado. Se oían gritos, y gente que corría.

Baje de la litera y agarre mi  ropa, pero el señor Weasley, que se había puesto los vaqueros sobre el pijama, me dijo: 

—No hay tiempo, Harry... Coge sólo tu chaqueta y sal... ¡rápido

Obedecí y salí a toda prisa de la tienda, delante de Ron.

A la luz de los escasos fuegos que aún ardían, pude ver a gente que corría hacia el bosque, huyendo de algo que se acercaba detrás, por el campo, algo que emitía extraños destellos de luz y hacía un ruido como de disparos de pistola. A continuación, apareció una fuerte luz de color verde que iluminó la escena.

Hermione y Ginny llegaron a toda prisa, poniéndose la bata sobre el camisón, con el señor Weasley detrás. Al mismo tiempo salieron de la tienda de los chicos Bill, Charlie y Percy, completamente vestidos, arremangados y con las varitas en la mano.

—Vamos a ayudar al Ministerio —gritó el señor Weasley por encima de todo aquel ruido, arremangándose él también—. Vosotros id al bosque, y no os separéis. ¡Cuando hayamos solucionado esto iré a buscaros! 

Bill, Charlie y Percy se precipitaron al encuentro de la multitud. El señor Weasley corrió tras ellos. Desde todos los puntos, los magos del Ministerio se dirigían a la fuente del problema.

—Vamos —dijo Fred, cogiendo a Ginny de la mano y tirando de ella hacia el bosque.

Antes de ir corriendo a donde estaban los demás, oí una voz que hizo que volteara a ver de que se trataba, era uno de los encapuchados que habíamos visto durante el partido, me parecía sorprendente que no salieran corriendo como las demás personas si no que estaban calmados mientras ayudaban a varios magos, pero sin quitarse la capucha, además su tienda era la única que no estaba ardiendo, mas bien el mas bajo de los demás la estaba desarmando a una gran velocidad. 

- Hey chicos necesitan ayuda- Hablo el mas alto del grupo por lo visto era el líder, pero me sobresalte a darme cuenta que estaba al lado mío. 

- Claro que no extraño - Respondió bruscamente Ron. 

Semidioses en Hogwarts ( El torneo de los 3 magos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora