Capítulo 28

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- ¡Tu hijo es un marica! ¡Y todo es tu culpa Jay! ¡Lo tratas como si fuera una dulce princesita!

Sus padres peleaban en la sala de su casa mientras el se escondía en el armario de su cuarto. Sentía los latidos se corazón en sus oídos, sus manos temblaban y no podía dejar de llorar. Rogaba y lloraba mientras tapaba sus oídos queriendo dejar de escuchar los gritos de su padre y los lloriqueos de su madre. Todo había sido su culpa, el no debió de llegar tomado de la mano de Zayn, no debió abrazar de aquella manera a su mejor amigo.

No.

«Eran hombres y los hombres no se abrazan y no se toman las manos» el pequeño Louis repetía las palabras constantes de su padre en su mente, no debía y ahora por su culpa su madre estaba siendo golpeada allá fuera.

Louis dejo de escuchar gritos, pero los sollozos no pararon. Al contrario se comenzaron a intensificar mientras el sonido de la suela de los zapatos rebotaba en el suelo. Escucho la puerta de la habitación abrirse, escucho sollozar a su mamá con mayor fuerza, quería salir, quería ver si estaba bien pero el miedo lo detenía.

Con sus manos aún temblorosas entre abrió la puerta de su armario y fue cuando por un pequeño espacio pudo verla. Lloraba mientras se acariciaba su linda y regordeta panza en la que se encontraba su nueva hermanita. Louis salió del armario a gatas, subió su vista hasta su madre y fue cuando su mirada azul se mezclo con la de ella, tenía un golpe que se tornaba rojo que sabía con el tiempo después le dejaría una marca morada, Louis sintió su corazón dar un vuelco, era todo su culpa.

Jay no dejo de llorar, observó por unos minutos a su hijo con los ojos cristalizados mientras seguía acariciando su pancita. Jay le hizo un gesto para que se sentará a su lado, Louis obedeció he hizo lo que le ordeno. Paso sus pequeños brazos por la panza de su madre tratando de rodearla con estos pero aún era muy pequeño para poder hacer eso. Louis comenzó a llorar escondiendo su rostro en su madre, tenía tanto miedo y tanta culpa de lo que había sucedido, solo quería que parará y pensaba que cualquier cosas siempre molestaría a su padre.

- Mi pequeño, no llores amor. - Jay le levanto el rostro para que la mirase - Mírame estoy aquí. Siempre lo estaré para protegerte. - Jay le secaba las lágrimas con el dorso de su mano

- No, no quiero que me protejas más. No quiero que te lastime más por mi culpa. - lloro el pequeño chico castaño

- Eres muy pequeño para entenderlo amor, pero es mi deber. Preferiría mil veces recibir esos golpes yo a qué te tocará a ti. - Louis negó

- No, es mi culpa. No debí abrazar a Zayn, no debí tomarlo de la mano. - lloriqueo y su madre sonrió

- Boo, eso hacemos los humanos. Es una acción para demostrar amor, para demostrar que una persona te importa. No está mal lo que hiciste.

- Pero papá dice...

- Si, tu padre cree que los hombres no pueden tener muestras afectivas a otros hombres, pero esas son sus creencias. ¿Que es lo que piensas tú? - Jay observó un momento a su pequeño.

Louis se quedo pensando, no sabía que decir temía que su papá se encontrará detrás de la puerta y pudiera escuchar. Entonces como si su madre le hubiera leído el pensamiento le contesto:

- Tu padres se ha ido. Puedes decirme lo que quieras. - Lo animo su madre..

- Creo que los amigos pueden abrazarse. - Jay lo acercó más a ella y lo abrazo con fuerza.

- Nunca cambies tu manera de pensar Louis, ni por la sociedad, ni por tu padre, por nadie amor. Solo sigue a tu corazón el siempre te dirá que es lo correcto. - le susurro en el abrazo.

If I Could Fly | Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora