Capítulo 10

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Un recuerdo como el primer amor es uno de los más importantes en la vida de todo ser humano, es el amor que nos permite conocer ese maravilloso sentimiento pero que también nos enseña un lado diferente sobre nosotros. Es un momento de vulnerabilidad donde podemos conocernos a nosotros mismos, más allá de entregarle tu confianza y tu corazón a alguien más le entregas el poder de saber tus más grandes debilidades.

El primer amor puede, muchas veces, apasionado. Otras veces caótico y en ocasiones extrañas para toda la vida. Pero no significa que la primera persona por la que creas que tienes estos sentimientos sera tu primer amor, porque primero necesitamos estar conscientes de saber lo que es el amor.

El amor en los libros nos hace elevar nuestras expectativas pensando que la persona que más nos ame llegaría a dar incluso la vida por nosotros, generalmente ese tipo de amor ficticio al que nos acostumbran en las películas y en los libros llenos de romance son amores pasionales que su principal función es dejarse llevar por el deseo de tenerse. Sin embargo, ¿Cómo se traduciría eso en el lenguaje de la realidad?

En la vida real el amor es una batalla constante para las personas, muchas lo logran encontrar con mucha facilidad y después estamos las personas como Harry y la mayoría que lee este libro. Las personas que romantizan el amor pero que se asustan con la idea de vivirlo, los que somos pasionales pero también entregados.  El amor es un sentimiento fuerte, es una palabra que no se puede de decir que sientes por cualquier persona porque estarías dando a entender que entregarías todo por esa persona, incluso si eso significara entregar tu vida.

 El amor no son solo caricias, besos fugaces o detalles que te llevaran al cielo, es aferrarte a la mano de alguien cuando se deba cruzar el infierno.

Era una mañana húmeda, Harry salía de su casa camino al instituto. Iba cabizbajo, pensaba pareciendo que iba en modo automático.

Trataba de asimilar las cosas. Tenía miedo porque sentía que las cosas iban avanzando demasiado rápido respecto a Louis, no sabía si él era el problema por dejarse llevar tan rápido por las palabras que Louis le decía constantemente o él problema era que a pesar de que lo sentía tan real su mente no dejaba de decirle que no era lo suficientemente bueno para que algo así le estuviera pasando.

Deseaba que esas palabras solo fueran un fantasma de su pasado, pero sabía que no lo eran porque quizá Louis si merecía algo mejor, a alguien que lo pudiera proteger tal y como él lo protege de todos, sin embargo, Harry sabía que nunca podía ser lo que Louis necesitaba.

Mientras caminaba Harry no prestaba atención a su alrededor ni lo que pasaba en la realidad, sus pensamientos lo tenían más preocupados por las cosas que estaba llegando a conocer y a sentir por culpa de unos ojos azules. Unos que no quería encontrarse tan temprano, pero como si el destino intentara joderlo un poco a lo lejos observó como Louis se acercaba a él con pasos rápidos. Harry saludo a Louis cuando este le dijo que estaba feliz de haberlo encontrado para ir juntos al instituto y así no dejarlo solo. Harry solo sonrió por el gesto del ojiazul y siguieron caminando entre platicas cortas hasta llegar al salón del rizado.

- Ya puedes irte. - le insistió Harry y Louis negó levemente recargándose sobre la pared del salón del chico.

- No quiero dejarte aquí solo, sabes que adentro están ellos y bueno no quiero que te pase nada. - le explicó Louis sin mirarle buscando con la mirada a Niall quién no llegaba al lugar.

- Estoy seguro que aquí en pleno pasillo no me molestaran. Estaré bien. - Harry puso su mano en su antebrazo erizando los vellos del curvilíneo.

- Hey. - musita Niall llegando junto con los chicos. Al instante Niall observa los golpes que su amigo traía en su rostro cambiando su mirada a una muy preocupada. - ¿Qué te ocurrió Harry? - pregunto sorprendido.

If I Could Fly | Larry StylinsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora