🍟 El encuentro

695 129 175
                                    

El lugar estaba lleno de niños gritando y corriendo por todos lados, en algún momento Liam pensó que había sido una mala idea. No es que odiara a los niños, al contrario, los amaba, pero no estaba de buen humor para soportar todos esos ruidos. El hambre que tenía era más fuerte; así que después de haber pedido su pedido - la cual fue un cajita feliz - busco con la mirada un lugar para esperar. Todos los lugares están llenos, camino a la mesa más cercana, pero segundos antes de llegar una familia le ganó el lugar.
Suspiro profundamente y con una poca de esperanza trato de encontrar otra mesa vacía, pero no tuvo éxito. Pensó es esperar de pie, pero realmente no quería estar parado.

Giro sobre su mismo lugar. ¡Bingo! No estaba vacía la mesa, pero al menos no estaban ocupados todos los asientos. Camino emocionado, pero a unos centímetros se quedo paralizado. Un par de ojos avellana lo observaron.

— Am, disculpa ¿Podría tomar asiento aquí? Solo en lo que esta mi pedido claro si no esperas a alguien más.

Las palabras de Liam salían rápidamente y nerviosamente, rogando el no quedar como un completo tonto frente a el chico.

— Si, si, claro — respondo el pelinegro casi inaudible.

Liam se sentó y comenzó a jugar con sus dedos bajo la mesa pensando que podría decir. Mientras que el otro chico mordía su labio sin saber que hacer o decir. El silencio era incómodo, y Zayn quería salir corriendo, pero no podía hacer eso. No mientras el chico estuviera ahí, y más porque el dejo que tomara asiento, pero el no podía con eso, alzó su vista disimuladamente, tras sus pestañas miro los rizos castaños caer por el rostro de su compañero de mesa. Sus manos temblaban y podía jurar que tras ver el perfil del chico su corazón había saltado de alegría. La piel del castaño brillaba tras los rayos del sol que entraban por el cristal de la ventana. Las piernas de Zayn no respondían, y su vista no podía apartarse del chico, el rubor en sus mejillas llegó cuando los bellos ojos chocolate lo miraron.

— Soy Liam, Liam Payne. Mucho gusto ...

— Zayn, mi nombre es Zayn Malik — Contesto Zayn segundos - que parecieron eternidad para el pelinegro - después de que Liam extendiera su mano, al lo cual el la tomo.

Y volvió a sentir su corazón a punto de salir. El chico era hermoso a los ojos de Zayn, podría pasarse toda la vida mirando los rizos caer por su frente, sus ojos chocolate, sus labios sandía y la piel blanca, pero el no lo haría para no asustar a Liam.

Liam. Hasta el nombre sonaba hermoso viniendo de el. Y su voz, su voz era perfecta para su físico. Zayn trago en seco mientras veía que aún no soltaba la mano de Liam. Escuchando la risilla del castaño la soltó rápidamente y trato de controlar la respiración.

— Así que ¿Esperas a alguien?

— No creo que la comida sea alguien

Liam volvió a soltar una risilla y eso ocasionó que Zayn se ruborizara una vez más. Ni siquiera sabía si ya le había bajado el color de antes.

— Bueno, lógicamente no. ¿Que edad tienes?

Liam trataba de eliminar el silencio que tenían, pero al parecer el ojiavellana era demasiado tímido. Tal vez era menor que el y por eso era así. Tampoco es como si Liam fuera todo un adulto.

—  Hace dos meses cumplí quince ¿Y tú? — respondió Zayn dirigiendo su vista a la de Liam pero rápidamente la alejo, ya que sintió un vez más el calor en su rostro.

A este paso Zayn sería un camarón.

— Tengo catorce, pero en poco tiempo tendré quince — contesto el castaño orgulloso de su edad — Así que... ¿Londres es siempre tan tranquilo en el tráfico?

McDonald's •Ziam• ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora