Capítulo 2

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En ese momento mi mente se quedó en blanco, ¿acaba de decir que se hará mi amiga?,¿no estoy sorda, verdad? Al parecer no por que igual que yo estaba todo el salón, impactados sin saber qué decir.
Y sin más, se dirigió hacia su asiento, dando así comienzo a las explicaciones para el nuevo curso.
Al terminar me dispuse a ir a casa a relajarme y leer un rato, pero una voz aguda y un brazo no me permitió avanzar más , gire mi cabeza para así encontrarme con la chica de antes.

-Creo que no nos hemos presentado correctamente, me llamo

-Lia, lo sé , te he escuchado antes cuando te has presentado.

-Vale, entonces mejor por que ya sabes lo que quiero hacer.-decía sonriente

-Si, lo sé, y déjame decirte que no sé lo que pretendes, no sé si es una broma o algo, pero no tiene gracia.

-No es una broma, quiero ser tu amiga, en cuanto he entrado por la puerta y te he visto ahí, sola y con pinta de estar sufriendo por tu soledad, no he podido evitar el sentimiento de querer ser tu amiga.

-Bueno pues lo siento, pero yo no sufro por estar sola, así que déjame en paz, me voy- dicho esto, me zafe de su agarre, y me di la vuelta, para continuar con mi camino de regreso a casa.
"Lo conseguiré", fue lo último que escuché salir de sus labios antes de colocarme los auriculares.

Llegue a casa sobre las 14, para cuando llegué mi madre ya se había ido y una pequeña nota yacía sobre la mesa de la cocina:

"Cariño, espero que tu primer día haya ido bien, tienes la comida sobre la encimera, llegaré a casa tarde, besitos mama."

Después de leer la nota, me dispuse a comer para luego organizar todo para mañana y leer un poco mi nueva novela. Al terminar, me puse a cocinar la cena, para después sentarme en el sofá a ver la tele, justamente al encenderla el canal de noticias estaba dando su última noticia fue algo muy extraño que captó mi atención :

"Se avistan pequeñas piedras cayendo del cielo en varias direcciones."

No sé por qué pero aquella noticia hizo que me quedara embobada viendo la tele, ya al cambiar de noticia, salí del trance, apague la tele y me fui a dormir.
                               ~~~
Al día siguiente me fui temprano al instituto, al llegar me sorprendí al ver a Lia en la puerta esperando a alguien, supuse que sería a alguno de sus amigos, no me sorprendería que ya tuviera amigos con lo alegre y simpática que es, pero al verme fue corriendo hasta mi diciendo- te esperé, vamos-
dijo mientras me tiraba del brazo en dirección a la puerta del centro, mientras yo me retorcía para intentar escapar de su agarre, en ese momento sentí como un pequeño sobresalto en mi cuerpo, sentí como una emoción perdida volvía a intentar abrirse paso en mi corazón, pero automáticamente quite esos pensamientos de mi cabeza, no iba a hacer amigos, no de nuevo.


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