Capítulo 5: Invitación

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Narrador

Charlie dijo las últimas palabras, mientras todos contenían la respiración, incluyendola. El silencio era como de ultratumba, y el ambiente pesado, el nerviosismo era demasiado tanto que carcomia la piel con agujas. Nadie se movió, nadie habló, por esos pares de segundos que parecían eternos.

-Supongo que... No era real-. Dijo finalmente Charlie, rompiendo el silencio.

- Cierto, según las lecturas, no hay nada, ni cambio de temperatura, ni voz espectral. Aunque la psicofonia hay que escucharla de nuevo con calma.

-Supongo que esto fue un desperdicio, saben pude estar lo más bien en mis sábanas o en las de alguien más.

- Creo que por esta vez concuerdo contigo-. Decía Vaggie.

-¿Qué? ¿Tú acostandote con alguien más?, estirada.

-Que no esa parte imbecil. ¿Sabes que? , no tengo la energía suficiente para pelear contigo tan temprano, así que solo callate-. Con sus dedos agarró la boca de ángel haciendo una pinza.

-¡Mmm!-. Decía ángel intentando hablar.

-¡Shh, sshh! -. Le decía Vaggie haciendo que se callara. - mucho mejor así.

-Bueno chicos, creo que tendremos que empacar todo, nos vemos mañana a primera hora, empezaré a crear los borradores para poder publicar la investigación.

-Charlie-. Se acercó sutilmente Vaggie.

-¿Te sientes bien?

- ¿ A qué viene la pregunta?

- Es sólo, que en mi familia son muy... Creyentes, y siempre me dicen que no es bueno jugar con estas cosas.

-Comprendo lo que intentas decir, pero Vaggie, tampoco es como si estuviéramos jugando, esto es una investigación y nada me va a suceder-.Vaggie comprendió y se dio vuelta a mirar a Angel que estaba haciendo mucho ruido.

-Niffty mañana tendremos que ver cómo realizar el borrador-. Niffty la miró y asintió.

Todos esa noche se fueron finalmente a sus hogares dejando el silencioso baño.

Narra Charlie

Todos nos fuimos y cerré con llave la puerta principal, vi hacia el vacío pasillo que se veía realmente aterrador.

-Realmente parece escena sacado de una película de terror-. Sonreí al hacer esa comparación.

Nos despedimos y nos fuimos cada uno a su hogar.

Esa noche soñé algo que realmente no puedo recordar, pero me hizo despertar con un muy buen humor.

Llege con Vaggie a la escuela y ya estaba el último funeral del chico que según contó Cherry era el último en invocar. Vi a lo lejos como el grupo de porristas antes con sus trajes de color rojo y sus pomposos peinados, estaban vestidas de negro y peinadas sencillamente. Era simplemente extraño no verlas pasar alzando sus agudas voces y Cherry no era la excepción, siempre ruidosa escuchando música con uno de los chicos deportistas en un parlante y su gran y generoso escote, que había sido cambiado por un suéter negro de cuello alto.

Simplemente todos no tenían el ánimo de hacer ni siquiera ruido, los pasillos que siempre se llenaban de susurros como un panal, era silencioso, demasiado silencioso, un ruido en donde solo se escuchaban los pasos o el chirrillo del roce de las zapatillas con la cerámica, que hacían al pasar a dejar flores y algunos sollozos frente al mural con las fotos de todos los estudiantes muertos.

Sonó el ruido de los altavoces.

-Queridos estudiantes, como bien sabrán, estamos de luto, las clases de la mañana han sido canceladas y les invito a que pasen al gimnasio en donde realizaremos la ceremonia de conmemoración por los estudiantes-.Decía la voz del director, mi padre.

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