El Mejor

DILE LA VERDAD

De acuerdo lo admití, me gusta Gun, no, me enamoré completamente de él. Ni siquiera me había dado cuenta que a Mild la dejé de ver hace unos veinte días hasta que ese mismo día me la había encontrado y ella misma me había dicho cuánto tiempo era el que no nos habíamos visto.

Había estado tan concentrado en Gun y había notado cada cambio, cada coqueteó que le lanzaba al idiota de Joss hasta que los vi en esa maldita cita, sí los había seguido, exploté en el momento en el que vi posar los labios de Joss en los de Gun.

Los golpes que me lleve habían válido la pena, estaba en la casa de Gun en su cuarto admirando cada detalle que lo adornaba, mientras esperaba que volviera con un botiquín, porque él insistió en que necesitaba curar mi rostro.

-Ya estoy aquí- Entró con una pequeña maleta dejándola en la cama, sacó un algodón agregando agua oxigenada -Ahora quédate quieto- Asentí con la sonrisa más estúpida.

-Duele- Me retiré cuando comenzó a limpiar mi labio.

-Te lo mereces por no ser serio conmigo- Lo vi enfocado limpiando mi rostro.

-Pero ahora estamos juntos- Lo atraje a mí, abrazándolo por su cintura.

-¿Por qué tardaste tanto?- Gun peinó mi cabello dulcemente.

-Porque no creí que de verdad estaba enamorándome de ti o al menos no quería aceptarlo- Lo atraje aún más, provocando que Gun se sentará a horcajadas arriba de mí.

-Y ahora ¿Lo aceptas?- Conecté mi mirada con él y asentí. Estoy más que seguro que me enamoré, que estoy tan perdido por él.

Acerqué mi rostro más a él y lo besé tan dulce y lento delineé sus labios con mi lengua, deje pequeñas mordidas sin lastimar. Una forma tan dulce de contestar su pregunta y de satisfacer mi deseo de sus labios.

-Gun tu padre no…- Los dos vimos hacía la puerta como Jennie entraba quedando sus palabras atoradas por la posición en la que estamos -¡Bájate de su regazo!- Jaló a Gun de mis brazos mientras las mejillas de Jennie se teñían de rojo al igual que las nuestras -¡Ay niños! No me den…¡¿Qué te paso?!- Se acercó haciendo una inspección a mi rostro.

-Nada Jennie, una pelea- Sonreí a Gun que se encontraba parado a unos centímetros de nosotros, mientras Jennie agarraba cosas curando mis heridas.

-Por lo visto la otra persona ganó- Vi como Gun se tapó la boca evitando que la risa saliera de sus labios.

-No, gané yo- Mire a Jennie con una sonrisa -Al final Gun es mi novio- Detuvo sus acciones y miró a Gun.

-¿Peleaste por mi niño?- Me miró con algo de enfadó en sus ojos y asentí lentamente -¿Qué pasó?- Miraba de Gun a mí.

-Off decidió fingir ser un saco de boxeo- Jennie rodó los ojos por el comentario sarcástico de Gun -Me vio besándome con Joss y bueno…su impulso estúpido reaccionó- Asentí a Jennie mientras limpiaba la última herida.

-Me alegra que estén juntos, pero no hagas algo tan idiota niño- Me dio un pequeño golpe en mi frente y solo me límite a asentir -Venía a decirte que tu padre no viene hoy a comer- Le dijo a Gun mientras recogía el material de curación.

-Gracias Jennie- Ella asintió.

-Les traeré algo de comer, a ti te traeré hielo y no quiero verlos en una posición comprometedora cuando regresé- Los dos asentimos.

-Ven aquí- Lo atraje de nuevo a la misma posición de antes arrancándole una hermosa sonrisa -Me gustan tus cuadros de ahí- Señale con mi mirada unas pinturas colocadas arriba de su cabecera.