Código Lyoko: Nueva Generación.

Capitulo 8: Feliz cumpleaños.

Aquella mañana me desperté igual que las otras, tarde, de mal humor, cansado, soñoliento, horrorizado por el día que me esperaba... Paul ya se había bajado como los demás días a la cafetería, me acerqué a mi agenda para ver los deberes que tenía que entregar hoy, para mi sorpresa hoy era el cumpleaños de Paul. Me arrepentí de haberme despertado de mal humor, debería haberle dicho algo bueno. Bajé corriendo por las escaleras y me dirigí hacia la cafetería, abrí la puerta, cogí mi desayuno y me aproximé a la mesa en la que se encontraban todos. El rostro de Paul no estaba especialmente alegre esta mañana.

Alan: Hola chicos.

Liss: Hola Alan.

Alan: Paul, perdóname por haberme puesto un poco de mal humor antes jaja.

Paul: No pasa nada, de todas formas ya estoy acostumbrado a que lo hagas todos los días jajajajaja.

Alan: Hoy es tu cumpleaños ¿no? jajaja ¿pensabas que me había olvidado?

Paul: Que raro que te hayas acordado jajajaja.

Alan: Te compré hasta un regalo y todo el otro día.

Sadie: Todos te hemos preparado un regalo, incluso íbamos a hacerte una fiesta después de ir al sector cinco.

Paul: Muchas gracias, de verdad.

Alan: ¿Estás bien? Te noto apagado.

Paul: No es nada.

Alan: ¿Puede que yo sepa por casualidad lo que es?

Paul: Puede jaja...

Alan: Ya hablaremos luego, ahora tenemos clase con Hertz.

Chloe: Yo me voy a la fábrica.

Sadie: De eso nada, tu te vienes con nosotros, no voy a dejar que te expulsen del centro. Tira para clase.

Chloe: Esta bien...

Todos nos levantamos y nos fuimos para clase. La profesora Hertz era una persona muy pesada y aburrida, sus clases eran las peores de todas. Por suerte la clase se me pasó rápido.

Cuando acabaron las clases todos pusimos a Paul una excusa para ir a prepararle la fiesta a la fábrica, todos menos Sadie que se quedó con él para distraerle. La idea la saqué de una de las grabaciones del diario de Jeremy, le hicieron una fiesta en la fábrica a Aelita, yo quería hacer lo mismo con Paul.

Desde el punto de vista de Paul.

Ya habíamos terminado de comer todos, Sadie se había venido conmigo a jugar al baloncesto, después de todo había conseguido estar a solas con ella un rato, era todo cuanto quería. Después de una hora y media con ella llegó la hora de ir al sector cinco, subí a mi habitación para dejar mis cosas. En mi cuarto vi la figura de Alan mirando fijamente la puerta, estaba petrificado.

Paul: ¿Te ocurre algo?

Alan: ¿Qué te pensabas que estábamos en la fábrica organizándote una fiesta? Me das igual tu y tu cumpleaños, jamás pedí en ningún momento tener amigos y lo que es peor, a ti. Ojalá nunca hubieras entrado en mi vida. Y en cuanto a Sadie olvídate de ella, ni tu le gustas ni le gustarás, eres un asco de persona y espero que algún día tengas lo que te mereces.

Paul: ¿Qué?

Alan se marchó por la puerta. Me quedé catatónico, no sabía que decir ni que pensar. ¿Qué debería hacer? Era mi mejor amigo y ahora me había dicho todo eso, no pude evitar derramar una lágrima por mi ojo derecho. Intenté no darle importancia, igual había tenido un mal día. Salí de mi habitación y escuché las voces de Liss y Chloe que salían del fondo del pasillo, me acerqué a preguntarle por Alan, pero mis pisadas no llegaron más allá de la mitad...