HEROES XX VILLAINS: Primer Arco

Capítulo 19: ¿Pero que está pasando?

-¿Habéis visto eso? -dijo Dasai muy extrañado-
-¿El que? -dijo Sero-
-La marca en la espalda de Ráuru -dijo Dasai- es como la de un corte extenso que abarca en diagonal la longitudinalidad de su columna vertebral.
-Ya, la tiene por un incidente con los enmascarados -dijo Darti recordando triste-
-¿¡Que?! ¿¡S-sobrevivió a una incisura directa con un arma afilada de uno de los enmascarados en su columna vertebral y no murió?! -dijo Dasai sorprendido-
-¿A que te refieres? -dijo Tir-
-Ráuru, es un Era, pero los Era tienen la misma resistencia que una persona común, las armas de los enmascarados no son moco de pavo, son muy afiladas y resistentes con una eficacia de corte al 100% casi asegurando la muerte del rival, por lógica Ráuru debería estar... -dijo Dasai muy confundido-
-¿Estas insinuando que Ráuru debería estar muerto? -dijo Sero-
-Se que suena raro pero... ¿No os parece extraño? -dijo Dasai-
-Me pregunté eso cuando lo vi en los vestuarios la primera vez que dimos una clase en el campo de prácticas y la historia que me contó Fén era muy... Extravagante, por así decirlo -dijo Darti-
-¿Estáis soltando una cantidad de barbaridades grandísimas solo por una cicatriz? Venga ya, creo que ya es mucha terma por hoy, sobretodo para ti Dasai jaja -dijo Tir saliendo de la terma y dirijiéndose al interior de la mansión para cambiarse-
-Quizá tenga razón, yo y mis locuras jaja -dijo Dasai saliendo igualmente-

Después de aquella extraña conversación todos se dirigieron al interior de la mansión donde Ráuru veía el canal de noticias perplejo por lo que sucedía en pantalla.
-¿Ráuru que sucede...? -dijo Fén para luego asustarse por lo que se veía en las noticias-
-Se que estas viendo esto, pequeño Era -dijo XX en mitad de la calle con destrucción a su alrededor y con... La madre de Sero cogiendola del cuello-
-¡M-madre! -dijo Sero asustado y enfadado al mismo tiempo-
-¡Gente de todo el mundo! ¡Los Era desde tiempos remotos han sido un incordio para la sociedad! -dijo XX-
-¿De que está hablando? -dijo alguien de la multitud que rodeaba al cámara en ese momento-
-¡Hoy en día suponen un gran problema para los héroes que se quieren ganar la vida honradamente, llevándose todo el mérito y quitándoles totalmente el protagonismo al resto de héroes, y eso se tiene que acabar! -dijo XX creando una espada de oscuridad y dirijiendola hacia la madre de Sero-
-¡¡No le hagáis caso!! -dijo la madre de Sero intentando deshacerse de la mano de XX-

Lo peor que podía pasar sucedió, XX clavó la espada de oscuridad en su pecho dejando caer sangre azul por la espada. Se podía ver perfectamente como la madre de Sero perdía la conciencia hasta morir suspendida en el aire por la mano de XX, seguidamente XX sacó la espada del cuerpo de la madre de Sero y la dejó caer al suelo.

-¡M-MADRE! ¡¡NO!! -dijo Sero con grandes lágrimas corriendo por su rojizo rostro y cayendo al suelo apoyandose con sus manos antes de caer sollozando y dejando caer sus cristalinas lágrimas al suelo- ¡¡¡N-NO!!!! -dijo con la voz aún mas rota-
-Los Era son una fuente de poder infinita -prosiguió XX- y quien maté a uno... Obtendrá su poder -dijo XX haciendo que la gente de alrededor se pudiera a hablar entre si- solo quieren el poder para ellos solos, son simplemente unos egoístas -dijo devolviendo su brazo a la normalidad y dandose media vuelta- que me creáis o no es vuestra decisión, pero... Yo no he sido quién a destrozado un monumento histórico -dijo XX justo antes de marcharse teletransportándose a quien sabe donde-

Sero aún dolido por la perdida de su madre seguía llorando en el suelo mientras el resto lo consolábamos, Fén levanto la mirada al igual que yo mirándome aterrorizada, se avecinaban tiempos oscuros.

UNOS DÍAS MÁS TARDE

Después de aquel momento fuimos al funeral de la madre de Sero, el cual, se había quedado... Huérfano. Su padre murió hace mucho porque le dispararon en un callejón sin salida, a dia de hoy no se sabe donde está el cuerpo. En cuanto a mi, no podía salir de casa, había gente protestante que me queria más que muerto y, por otra parte, había gente que me defendía sabiendo que en realidad eso no podía pasar. No podía ir a la ciudad, la gente me mataría, literalmente. ¿Te acuerdas de la gente de la fiesta fiesta? ¡Decidieron unirse al equipo y protegerme! Incluso... Sero, lo que le sucedió fue horrible pero... Aún así... decidió ayudarme. Pasados unos días estaba sentado en el sofá leyendo un libro que si no recuerdo mal se llamaba "Two Kick Woman", me parece que trataba de una mujer que se volvía demasiado fuerte y ahora podía vencer hasta al mas temido monstruo de dos patadas, curioso.
-Ráuru -dijo Lilith acercándose-
-¿Si? -dije-
-Vamos a ir a ver a la madre de Fén, está a la entrada de la cuidad por el bosque, no habrá problema con la gente, casi no hay por esa zona -dijo Lilith-
-Esta bien, me preparo en un momento -dije levantandome-

Me puse mas bien la ropa de siempre, un pantalón cómodo de color oscuro y una sudadera también oscura... Bien, una vez listo, Lilith, Fén y yo fuimos a la casa de la madre de Fén. Una vez que llegamos nos encontramos con una enorme casa de color azul marino y con un tejado azul muy oscuro y con una puerta del mismo color que el del tejado.
-¿Estáis preparados? -dijo Fén abriendo la puerta con unas llaves que tenía-
-¿Para que? -dijimos Lilith y yo-

Ella simplemente abrió y cuando abrió la puerta nos encontramos con una inmensa biblioteca con extravagantes artilugios en algunas mesas y con muchos papeles desperdigados, me quedé rato viendo la casa hasta que escuchamos una enérgica voz femenina desde el fondo.
-Fén, ¿eres tu? -dijo alguien-
-Si mama, soy yo, y traigo a mis amigos -dijo Fén algo agotada-
-¿¡Amigos?! -dijo la madre de Fén para después correr dejando caer algunas cosas, luego apareció corriendo y se paro justo enfrente de nosotros una mujer con el pelo rojo fuego con una cola de caballo hecha y con unos ojos de color amarillo fuerte, con una camisa roja a cuadros remangada, con un cinturón de herramientas y con unos vaqueros un poco manchados de aceite que se veía algo más joven de lo que me esperaba- ¡hola! ¡Soy la madre de Fén, me llamo Uma!
-¡Hola!, ¿como va todo? -dijo Lilith contenta-
-H-hola -dije algo nervioso-
-Uuuuh ¿este chico tan mono es Ráuru? -dijo Uma-
-¡¡M-mama!! -dijo Fén enfadada-
-E-espere, ¿usted ya me conoce? -dije extrañado y algo nervioso porque me dijeron mono-
-Claro que si, a parte de por el torneo, mi hija me habla muuuuuucho de ti -dijo Uma terminando en una risita-
-¡Jope mamá! -dijo Fén ruborizada y enfadada-
-Anda pasad -dijo Uma volviendo al interior de la casa con una sonrisa dibujada en su rostro-