🔸7 Mes🔸

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Cada vez veía que la panza de Madara crecía, eso lo alegraba porque faltaba menos para que Obito naciera. Pero había un pequeño inconveniente.... Pues digamos que el trabajo del Hokage era de tiempo completo y no podía estar mucho tiempo con Madara, protegiendolo, cuidándolo y tal vez mimarlo, en los anteriores meses le había pedido a su hermano que suplantara aquella veces que Madara necesitaba alguna cosa o lo requería.

Suspiro pesadamente, aparte de las preocupaciones que tenía con la aldea, también las tenía con su esposo, la guerra ya le habia hecho bastante daño a Madara, sabía que él era lo bastante fuerte para protegerse, era una de esas razones por las cual lo amaba demasiado incluso más que su propia vida misma.

Miro los papeles aburrido, sabía que al construir la aldea iba a venir mucho trabajo para quien fuera nombrado Hokage y que la aldea era primero en el pensamiento de un Hokage, ahora se estaba lamentando en decir eso, claro la aldea era primero en casos de que un enemigo lo quisiera destruir o hacerle algo malo, pero en estos momentos no pensaba así, desde que inició todo, Madara siempre había y siempre será el primero en ocupar sus pensamientos.

Se paro de la silla, se encaminó y llamó a un ANBU para que trajera a Tobirama, era el Hokage por dios, podría hacer lo que quisiera, y eso sería tomarse unas mini vacaciones para cuidar de Madara y que todo estuviera bien, aunque sabía que el azabache le iba a sermonear por nose cuantas horas, pero tenía esa certeza de que Madara se iba a alegrar en el fondo..... Muy en el fondo. Pero había válido la pena de pasar más tiempo al azabache.

Escucho que la puerta se abría y se dejaba ver a su hermano que entraba a la habitación.

— ¿Que pasó Nii-san?.

Preguntó.

— Te puedo pedir un favor Tobi-chan.

El peliblanco asintió.

— Te puedo encargar la aldea solo algunos meses.

— ¿Sucedio algo?.

El Senju mayor suspiro.

— Según Mito en los últimos meses, Madara se sentirá más cansado debido al embarazo y quiero estar a lado de él por si necesitará algo.

Tobirama penso en lo que había dicho su hermano, al final aceptó la petición, si Izuna estuviera embarazado haría lo mismo.

Hashirama sonrió cuando su hermano aceptó su petición, sabía que él haría lo mismo, conocía bien a su hermano y aunque lo negara, Izuna había cambiado a Tobirama a mejor y se lo agradecía.

Llegó a su casa, era de noche, se quito sus zapatos y se volteo para la sala a ver si estaba Madara ahí acostado pero al no verlo ahí, pensó que estaba ya estaba  dormido en su habitación.

Subió hacia la alcoba y vio a Madara durmiendo plácidamente, sonrió con ternura al verlo, se puso ropa cómoda para dormir y se acomodo al lado del azabache.

Madara se medio despertó cuando sintió un peso a lado suyo, se acomodo en los brazos del Senju queriendo un poco de calor de este, era una noche fría después de todo.

— Llegaste.

— Lo siento por tardar y también por despertarte.....sabes le pedí a Tobirama que me suplanta algunos meses para cuidarte.

Madara se removió un poco, levantó un poco su  rostro para ver  a Hashirama y viendo que no era una broma y le mostrará una sonrisa, bufo y se acomodo en el pecho de Hashirama escondiendo su rostro.

— Idiota.

Hashirama rio ante el comentario y beso la cabeza de Madara.

— Yo también te amo Maddy.

Madara sonrió de manera discreta, sabia que cuando fundaron la aldea que él Hokage tendría que velar por el bienestar de la aldea y aunque nunca le iba decir a nadie, le dolía que cuando despertaba Hashirama ya no estaba a su lado por atender asuntos de la aldea, asi dejando un sentimiento de vacío. Por eso tenía ese leve costumbre de esperarlo y acurrucarse en los brazos del Senju aunque sea sólo por algunas horas.

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Embarazo al estilo Senju-Uchiha [HashiMada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora